Infierno

15.Querida Samantha.

Narra Kiara:

Nos encontrábamos en la casa de Leila. Ya que decidimos arreglarnos juntas para nuestra graduación, y por ''juntas" me refiero a Leila y yo decidimos secuestrar a Sam ya que se negaba rotundamente a ponerse un vestido y eso nos causó un enorme problema.

                  
-SAMANTHA JENNER!!!!! VEN AQUI AHORA MISMO!!!- grite tirando de ella pero la muy hija de la gran papaya fue más inteligente y se aferró de los barrotes de la cama—era fuerte la maldita—. No importa lo que hiciera la muy pinche bestia seguía aferrada de los barrotes.

-NO QUIERO!!!! QUITATE DE ENCIMA PERRA!!!- contestó  Sam forcejeando y una idea vino a mi mente en ese instante. Me coloqué  encima de ella y comencé a hacerle cosquillas mientras Leila la agarraba de los costados.-E-está bien, está bien. Me pondré el estúpido vestido! Felices...- nos quitamos de encima de Sam y sonreímos victoriosas por lo que acabábamos de conseguir.- pero será negro.

-de acuerdo

(...)

Pase el día completo con Sam y Leila probándome vestidos. Se los juro, creo que voy a comenzar a entrar en pánico en cualquier momento. Revise todo tipo de vestidos y ninguno me llamaba la atención, hasta que pare en un vestido que en mi parecer era muy hermoso. El vestido era rojo casi anaranjado y creo que se vería perfecto en mí. Tome el vestido antes que una chica que ya le estaba echando un par de miradas. Cuando me fui a probar el vestido sentí que ese era el ideal, quiero verme lo más hermosa posible ya que Ethan por fin después de siglos me invito al baile, para ser mi novio tardo mucho en pedírmelo.

Leila ya había encontrado su vestido y Sam ni siquiera se preocupaba por encontrar uno, la muy pendeja no quería probarse nada así que Leila y yo tendríamos que ayudarla a buscar. Le pase un vestido negro el cual me quede impactada al verlo y sabía que a Sam le quedaría perfecto, era de encaje negro en la parte de arriba y en la de abajo tenia un abierto que dejaba ver parte de la pierna. Ella se adentró al probador a regañadientes pero como quiera termino haciéndonos caso.

Esperamos unos momentos, hasta que Sam decidió salir del probador. Al momento de ella salir literal no la pude reconocer, ella se veía muy preciosa con ese vestido y me sentía muy orgullosa de mi trabajo.

-Sam creo que estoy enamorada de ti- dice Leila dramáticamente y Sam solo le sigue el juego.

- Si, ya sé que estoy hermosa pero ya no me mires así- Sam saca una sonrisa de superioridad.

-y...mataste el momento- dice Leila simulando sacarse una lagrima.

-Nos llevaremos ese definitivamente- fue lo único que pude decir en ese entonces, aun seguía estupefacta.

 

Narra Sam:

Estaba acostada en el pecho de Ashton pensando en la vida tan bonita que por fin estoy teniendo después de tanto tiempo. Al parecer Ashton se dio cuenta de que no le estaba prestando, ni la más mínima atención.

-Sí, y entonces mi unicornio dorado voló y se enamoró de una vaca morada, se casaron y tuvieron un vakicornio bebe al cual nombraron como Steve- Ashton me miro con una cara de diversión- hace media hora que te estoy hablando ¿y tengo que inventarme una estúpida historia para que me preste atención?- me pregunta mi novio algo ofendido por no escuchar ni pio de lo que él estaba diciéndome.

-Perdón...es que estaba pensando

-¿Tu?- me señala- ¿pensando? Eso es algo nuevo.

-Cállate inútil.

-Cállame...- contesta burlón.

-¿y cómo quieres que te calle?...- Me hago la inocente.

-No sé, quizás... ¿con un beso?- él se acerca a mi lentamente y cuando está lo suficientemente cerca de mis labios, lo aparto.

-No, no- le digo con una enorme sonrisa- ese será tu castigo por llamarme estupida en pocas palabras.

-¿enserio?, que mala. Está bien me abstengo a las consecuencias.- dice levantando las manos en señal de rendición.- y... ¿en qué pensabas?

Duro un par de segundos analizando mi respuesta en mi mente.

-En como la vida nos trae muchas sorpresas- lo mire fijamente a los ojos- hace 6 meses eras un maldito estúpido el cual nunca creí enamórame de él, pero míranos ahora. Somos felices y nadie puede cambiar eso, a menos que nosotros lo permitamos.

-Yo tampoco puedo creer en que ahora mismo estoy con la chica más hermosa del mundo a pesar de los demonios que dejo en el pasado y los demonios que tiene en este momento y es por eso que te amo cariño.

Yo salte a sus brazos por sus tan hermosas palabras y uní nuestros labios en un pequeño beso, un beso el cual recordaría siempre.- yo también te amo, Ashton- estaba tan alegre en ese momento, me sentía tan protegida en sus brazos, pero de repente, toda felicidad que tenía plantada en ese momento se esfumo. Pude identificar una de esas tan conocidas cartas en mi ventana. Me solté de los brazos de Ashton y me acerque lentamente a la ventana.

Ashton me miro confundido, él no se estaba dando cuenta de lo que pasaba hasta que miro fijamente el mismo punto que estaba observando yo y su rostro hizo un repentino cambio. Al mirar la nota en mis manos, pude notar como cerraba los puños con tanta fuerza que sus nudillos se volvieron blancos.



#527 en Thriller
#256 en Misterio
#190 en Suspenso

En el texto hay: suspenso y drama

Editado: 02.02.2019

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.