Pergamino Eta 002: Algo malo y algo bueno.

Debido a toda la sangre saliendo de su cuerpo sumado a las heridas visibles que tenía me imagine que esa persona se desmayó después de pedirme ayuda, para mi alivio ese no termino por ser el caso ya que solo perdió la conciencia unos segundos antes de volver a abrir sus ojos tosiendo sangre.

Intentaba acercar mis manos a su cuerpo para ayudarlo, pero a su vez estas se detenían al no saber exactamente qué hacer, así que tome la decisión más obvia que tomaría un ciudadano promedio en mi posición –Aguanta un momento por favor, buscare ayuda. No tardare.

Antes de que pudiera salir corriendo esa persona de cabello negro y puntas verdes uso todas sus pocas energías para gritarme –Detente, no puedes confiar en nadie cof cof nadie que trabaje cof en esta universidad.

Sentía la necesidad de cuestionar esa declaración, aunque por su estado de salud actual lo mejor era actuar primero <Debe tener sus motivos para no querer hacer eso ¿Se relacionara con su estado actual?> y entonces sin esa opción elegí el segundo camino que cualquier persona tomaría. Saque mi teléfono celular del bolsillo –Entonces llamare una ambulancia, van a tardar un poco en llegar, así que resiste por favor.

Podía sentir como mi corazón comenzaba a agitarse con intensidad, una sangre caliente recorría todo mi cuerpo y mis manos comenzaba a temblar con un sudor frio <No es momento para esto> me dije a mi mismo, mientras los temblores de mis dedos entorpecían el presionar de los números de la pantalla del celular.

-Tampoco los llames cof cof si entran los de la universidad se enterarán –soltó esa persona con el extraño tatuaje de un ojo en el centro de su frente.

-¡¿Entonces qué hago?! Tampoco puedo sacarte sin que ellos se enteren –le grite molesto. Él quería que lo salvara, pero me arrebataba todas las opciones para hacerlo <No hay nadie cerca ¿Debería dejarlo e irme corriendo?> considere esa posibilidad seriamente, aunque observar su rostro golpeado, hinchado, con raspones y lleno de sangre me afligió tanto que no pude hacerlo.

Para mi sorpresa esa persona si tenía otra ¿Solución? –Termi…termínalo y actívalo –dijo él.

-¿Qué?

Esa persona que apareció de la nada hizo fuerza para girar su cuerpo a un costado, a su lado con el dedo lleno de su propia sangre había dibujado varias figuras geométricas y extraños símbolos dentro de un círculo en el suelo, solo que varios círculos parecían estar sin terminar. Al ver ese dibujo varias imágenes llegaron a mi cabeza, era similar a los círculos que aparecieron en las palmas de Maricruz y Samara cuando usaron magia, aunque como todavía no tuve ni siquiera mi primera clase no entendía nada sobre ellos.

“Termínalo y actívalo” esas fueron las palabras de esa persona y a la par que pensaba en cómo hacer eso esa persona soltó otra frase –Libera tu Thelema para hacerlo funcionar –agrego. También había escuchado esa palabra varias veces antes y todavía seguía sin saber a qué se refería.

De todas formas, no podía creer lo que estaba a punto de hacer –Que asco –susurre para arrodillarme y usando la sangre de ese sujeto terminé los círculos del dibujo que había hecho –Ahora solo queda darle mi Thelema –repetí como si fuera algo fácil, aunque no sabía a qué se refería.

Imitando a esas dos chicas de antes coloque la palma de mi mano cerca del círculo y me concentre. Por la forma en la que esas dos chicas lo hacían significaba que era algo que provenía de sus propios cuerpos, así que me enfoqué en generar esa sensación, pensé en como uno acumula saliva voluntariamente o como se resisten las ganas de ir al baño para luego soltarlo todo y orinar.

Una vez que logre sentir esa sensación de “liberación” recorrer mi cuerpo, mi corazón se tranquilizó y mis manos en vez de temblar generaron un extraño cosquilleo del cual se generó una pequeña chispa. Aleje mi mano y observe confundido el circulo en el suelo –Parece que no funci…- cortando mis palabras el dibujo hecho con sangre del suelo comenzó a evaporarse y repentinamente toda la realidad que me rodeaba se estiro y doblo como si de un chicle se tratara.

Cuando todo regreso a la normalidad ya no estábamos dentro de esa facultad de la universidad, sino que aparecimos sobre un pasto verde rodeado de árboles, varios arbusto y flores. Logre reconocer el lugar al instante, se trataba de una plaza que estaba a unas pocas cuadras de la Universidad Nacional Consagrada, el colectivo que tomo para ir suele pasar el frente de este lugar.

Estaba sorprendido de como todo nuestro alrededor cambio en un segundo, pero eso también me había dejado tan mareado que no pude resistir las ganas de vomitar en el suelo. Una vez que todo dejo de dar vueltas en mi cabeza me concentre en la situación que aun persistía, ese tipo que apareció de la nada en frente de mí todavía se encontraba muy herido y no sabía cómo ayudarlo.

Levantando su brazo esa extraña persona me pidió que lo ayudara a levantarse por lo que eso fue lo que hice –Te llevare a un lugar donde puedan tratarte –dije, aunque él me detuvo.

-Fuera de esa universidad ya estoy seguro cof cof solo necesito, necesito sentarme un momento.

Cerca de nosotros se encontraban varias sillas y mesas de metal pegadas al suelo de cemento, así que cargándolo lo lleve para que se sentara en ese lugar –Muchas gracias por ayudar a un desconocido –comenzó a hablar esa persona después de sentarse.

-No tenía mucho más que hacer –respondí para acto seguido sacar mi celular, observe la hora y la primera clase de la mañana ya había comenzado –No lo puedo creer, ya me perdí la primera clase. Aunque todavía puedo llegar a la segunda con tiempo.

Analice de nuevo el estado de esta persona y parecía encontrarse mucho mejor que hace un momento, obvio que todavía tenía sangre sobre su ropa y varias heridas, aunque ahora su apariencia transmitía una sensación de mayor bienestar.