Capitulo 4

A pasado ya una semana desde que iniciamos clases, una semana desde que llegaron Emma y Connor, una semana en que lo soporto menos y la quiero más, una semana de entrenamiento con las animadoras, una semana en la que cada día Sara sufre al ver a Damon con Megan, una semana en la que hemos terminado de arreglar todos los preparativos de la fiesta de mi madre. Lo mejor de todo es que me he unido más con mis hermanos, la fiesta nos tiene muy ocupados, aunque le debemos mucho a Linda la organizadora de eventos. Ella ha sido nuestra salvación.

- Sara, sabes que todo tiene su tiempo-Sara frunce el ceño y sigue poniendo las correas de sus enormes, pero bellos zapatos de tacón-sabes que mi hermano tarde o temprano se dará cuenta que tú eres lo mejor.

-lo malo es que su tiempo ya se acabó.

-¿Cómo que se acabó? ¿Ya no lo amas?

-no es eso. Tu más que nadie sabe todo lo que he hecho para que tú hermano se fije en mí. Ya me cansé de rogar, de menospreciar-me, de dejar mi orgullo a un lado para arrastrarme por él. Para el soy un cero a la izquierda, no soy importante para su vida. Por lo que más me duele es que él sabe que lo amo, y porque sabe que lo amo siempre que me ve besa y le habla con mucho amor a Megan, no sé qué le hice, pero ya no más Vivian. No me buscaré un hombre para que lo reemplace o lo ponga celoso aunque dudo que algún día lo esté por mí. Solo voy a seguir con mi vida.

-está bien, ¿Qué piensas hacer?

-empezar a quererme, a darme mi lugar y por supuesto a vivir mi vida dejando de lado la de él y ella.

Me acerco a ella y la abrazó-sabes que para lo que sea puedes contar conmigo-hablo en su arco de su cuello.

-lo se koala, lo sé.

-qué te parece si inicias por lo todo lo alto. Que dices ¿Fiesta?- sonrió con inocencia.

-claro que sí, eso no se pregunta.

-pues vamos.

Salimos de mi habitación. Sara luce fenomenal, con ese vestido rojo súper ajustado en su cintura, el vestido no es de una monja, ni mucho menos de una puta, en realidad se ve divina.

-nena te ves de infarto-le dijo cuándo vamos a iniciar a bajar las escaleras.

-pero mírate tú, ese vestido rosa palo te queda de crimen. De verdad que tengo futuro en la moda-así es Sara diseño mi vestido y una de las tantas casas de moda de su madre los confecciono. Mi vestido es ligero, es de mangas 3/4, es de estilo "A", es un poco ajustado en mi busto, y me llega cinco dedos hacia arriba de la rodilla.

-pues todo te lo debo a ti.

Al terminar de bajar las escaleras, podemos ver cómo quedó la casa decorada, los invitados llegar y a mi madre con una gran sonrisa.

-pero que bellas princesas tengo por niñas, me tienen que dar la receta para seguir siendo bella como ustedes.

-no hay receta mamá R, solo un poco maquillaje y listo-Sara considera a mi madre como si la suya también, no es que no ame a la suya, es solo que ella ve a mi madre más que a la suya y como nos conocemos desde que tenemos tres años, pues le cogió amor a mi madre y mi madre a ella.

-pues tienes que hacerlo conmigo. Mira lo bella que está mí koala, ya no es la koala bestia, sino la koala bella.

-madre, no te pases. Sara vamos que cada año que pasa se pone más interesante.

Cuando veo que mi madre va a protestar me llevo a Sara, pero paro en seco al ver a Connor.
Él entra a mi casa con unos simple vaqueros negro, camisa manga larga blanca y unas Vans negras. Definitivamente ese hombre está para comérselo y no dejar nada de él. Lástima que es un patán de mierda.

-hola chicas, ¿Saben dónde está Ángel, es que el encargado que me pidió ya está listo?

-está en la cocina, se puede saber qué es ese "encargado"-pronuncio la última palabra entre comillas.

-eso a ti no te importa.

-no tienes porqué ser tan grosero, yo solo preguntaba.

-lo siento, pero es mejor que buque a Ángel de verdad lo necesito- y sin más se va.

-eso fue extraño

-sí que sí. ¿Sabes a qué hora llega Emma?

- me envió un mensaje diciendo que no tardaba.

-bueno. ¿Me acompañas a buscar mi primo Justin?

-si claro.

Mi primo es dos años mayor que yo, pero es un completo loco. Las mejores ideas las tiene el, claro está solo las de locuras. Cómo la vez que nos llevó a Sara y a mí a saltar de un avión con tan solo catorce años.

Lo encontramos y nos ponemos a charlar hasta que llega Megan con Damon, y más atrás Emma con su madre. Que resultó ser la mejor amiga de mi madre cuando estaban en primaria.

-chicas creo que Damon se equivocó al decirle a Megan para donde venía-es verdad Megan tiene puesto un pequeño vestido negro con lentejuelas-¿es ella piensa que esto es bar o que se yo?.

-pues ese no es mi problema. Mejor vamos con Justin.

-¿Quién es ése?

-nuestro primo y bomba de tiempo, no recomiendo que te acerques a él si quieres seguir viva-dice un muy divertido Ángel.

-pero que mal primo, no sabes que hablar mal de las personas no está bien visto, y más si aquella persona no está presente para defenderse-dice un serio Justin, pero sé que por dentro está que no puede con la risa.