Capítulo 13: Golpe de suerte.

Luego de recuperar el aliento, comenzamos nuestra marcha, para mi sorpresa no éramos los únicos en el sitio, otros dos grupos de tres miembros también estaban allí.

—Siempre salimos tres grupos de tres. —Aclaró Henry.

—Toma. —Amber me tendió un radio walkie talkie de hello kitty—. Es unos de los pocos radios que hemos logrado rescatar y conservar.

—Espero que sea de edición ilimitada. —Dije a modo de broma.

Lo que me sorprendió a mí mismo, miré a mis compañeros, Henry se encogió de hombros y Amber ocultó su sonrisa.

El grupo partió por lados diferentes, deseando que todos regresaramos con vida.

Luego de una hora caminando me detuve de golpe y me cubrí detrás de un árbol.

Amber se cubrió conmigo, mientras Henry se tiró al suelo apuntando su arma corta al frente.

—¿Por qué...? —Preguntó Amber pero le tapé la boca antes de que terminara de hablar.

Mis compañeros agudizaron su oído y fué cuando lo notaron.

Eran voces, un grupo de personas se burlaban de algo, luego de determinar de dónde provenía el ruido nos encaminamos para allá.

Avanzamos despacio, cubriéndonos de los árboles, Henry vigilaba el frente, yo el flanco derecho y Amber el flanco derecho.

Al llegar al sitio, nos dimos cuenta cual era la razón de tanta algarabía.

Un grupo de unos 15 inoculados habían capturado uno de los grupos que salió con nosotros, uno de los chicos estaba en el suelo inmóvil y los otros dos estaban atados, por un segundo temí lo peor.

Miré a Henry y alcé una ceja, le pasé el fusil que tenía en las manos, agarré el que tenía en la espalda.
Nos alejamos un poco para poder planear una estrategia.

—¿Qué vamos a hacer? —Pregunta Amber un poco ansiosa.

Miró a Henry, pero él también está pensativo, se nota que han pasado mucho tiempo en esa caverna.

—Debemos atacar, son al menos 15, este es el plan. —Ambos chicos se acercaron—. Amber se subirá a uno de los árboles que está cerca donde pueda ver toda el área, tú serás nuestro respaldo.

<<Yo iré por el frente, seré la distracción, Henry, tú irás por la retaguardia y soltaras a los inmune, luego nos replegamos nos encontraremos aquí. —Tome mi cuchillo de caza y le hice una raya al árbol más cerca que encontré.

—Bueno andando. —Dijo Henry dirigiéndose a su zona.

Amber se colocó a mi lado y ambos hicimos el camino de vuelta.

La ayudé a subir al árbol y cuando estuvo lista me fui.

Sortee un par de árboles y llegué al punto donde quería comenzar, me preparé mentalmente.

Acomode el fusil y observé la escena, los inoculados discutían por quien sería el primero en beber la sangre de los inmune, no podía creer que hasta se empujaban molestos, era horroroso, pero apunté a un inoculado que estaba acercándose con un puñal al inmune que se encontraba en el suelo.

Boté el aire de mis pulmones y disparé a una de sus piernas este cayó al suelo, pensé que se quedaría allí, pero no, sacó un arma y comenzó a disparar a todos lados.

Me cubrí detrás del árbol, cuando tuve oportunidad le di un disparo directo a la cabeza.

Sus colegas se cubrieron y comenzó el enfrentamiento, las balas iban y venía, le di a un par, pero eran muchos y yo solo no podía.

Por suerte Amber entró en acción.

Los cuerpos fueron cayendo, cuando disparaba ella yo los atacaba y viceversa.

Henry aprovechó el caos para hacer su parte, corrió hasta sus compañeros, con la navaja cortó la soga que los ataba.

Entre todos ayudaron al otro chico, un inoculado se dió cuenta que su botín era robado y les disparó por suerte su ceguera no le permitió atinar a ninguno.

Yo seguí disparando y viendo caer a todos, hasta que ya no hubo nadie a quién disparar.

Sabía que debía llegar al punto del encuentro, pero me detuve al ver el cuerpo de un inoculado, me daba mucha curiosidad saber que había salido mal en la dichosa vacuna.

Tras comprobar que estuviera del todo muerto, lo cargué sobre mi espalda y caminé a paso lento a donde seguro estarían mis compañeros.