Instituto de Elementos

Capítulo 15

Al abrir mis ojos, lo primero que veo es la cara de Natalie viéndome fijamente. Me sobresalto, al verla ahí solo observándome, que me caigo de la cama con todo y sábanas. Natalie se apresura a ayudarme a levantar y riendo me da la mano para levantarme.

 

-Buenos días señorita, lamento haberla asustado, pero es su primer día, es mi deber hacer que cumpla con su horario- dijo y despues señaló el reloj, son las ocho de la mañana- Y pues hoy voy a estar con usted, para enseñarle el lugar, que conozca todo le debe y aclarar cualquier duda que debe tener.

 

-Oh si, de hecho, me harías un grandísimo favor ayudándome a utilizar la conputadora y el celular, es que nunca he tenido alguno, entonces no sé cómo utilizarlos- dije dirijiéndome al escritorio donde se encuentran aquellos aparatos.

 

-Con mucho gusto lo haré señorita, después de que se bañe- dijo entrégandome una toalla en mis manos y prácticamente me empuja hasta el baño.

 

-Okey- dije confundida.

 

Me ducho rápidamente y me visto con una ropa que Natalie me dejó. Es una camisa de manga larga gris y unos leggins negros, con unos tenis blancos. Me cepillo el pelo y recojo la mitad del pelo en una coleta. Al salir del baño, Natalie me hecha un vistazo, pero luego me mira como si me faltara algo.

 

-¿Qué ocurre?- fruncí el ceño ante la confusión.

 

-¿No te maquillaste?- dijo como si fuera algo obvio.

 

-¿Maqui-llarme?- ¿Cómo se hacé eso?

 

-Sí niña, ¿nunca lo has hecho?

 

-Amm no.

 

-Descuida yo me encargo.

 

Natalie entra al baño un segundo y saca un gran estuche morado y lo pone sobre la mesa. Le da una palmadita a la cama invitándome a sentarme después de que ella lo haga. Cuando me siento, ella abre el estuche lleno de brochas, cajitas e implementos que desconozco.

 

-Solo cierra los ojos y déjame hacer magia- dijo tomando una de las brochas una botellita color piel.

 

Obedezco cerrando mis ojos y noto como Natalie empieza a poner cosas en mi rostro, en mi cejas, en mis ojos, en mis pestañas, en mi nariz, en mis mejillas y en mis labios. Abro mis ojos cuando ella me dice voilá, y siento la cara un poco más pesada que antes. Natalie me mira con cara de orgullo y pone un pequeño espejo en mis manos. Veo y sé que es mi cara, pero luce diferente, no mucho, pero se podría decir que luzco...¿mejor? Tal vez. Se nota que no me maquilló tanto pero aún así el cambio es notable.

 

-Ahora que estás presentable, irás a desayunar- se siente raro que de repente me tutee, pero creo que así me agrada mas-, generalmente, se desayuna a las ocho, pero hoy ustedes desayunaran solos, a partir de mañana harán todo con los demás. Dirígete al comedor, y cuando termines estaré aquí esperandote para explicarte lo de la laptop, ¿okey?

 

-De acuerdo- respondí firme.

 

Salgo y me dirijo al ascensor, baja un piso y se sube Julieta y Ava. Un piso más abajo, suben Star y Camila. Noto que todas estamos maquilladas, se nota que Julieta se siente tan incomoda como yo, pero para las demás parece ser algo súper casual.

 

Llegamos al comedor donde Chistopher y Alejandro se nos quedan viendo con cara de "wow", asumo que es por el maquillaje, así que no les doy importancia, pero las demás parecen sonrojarse, incluso Julieta.

 

-Hola chicas, se ven...- dijo Christopher sin poder terminar.

 

-Diferentes- intervino Alejandro.

 

-Increíbles, díria yo- respondio Christopher con mirada pícara.

 

Todas ríen bobamente y yo ruedo mis ojos.

 

-Sí sí, estupendo, ¿desayunamos?- dije yo para liberar tantiyo la tensión.

 

Comemos un enorme desayuno que consiste en: waffles, jugo, panecillos y fruta. Recuerdo el desayuno de ayer, e inmediatamente pienso en Raiza, lo cual me entristece un poco, ya que ayer nos divertímos tanto en el desayuno, que quisiera hoy también poder hacerlo, lamentablemente no puedo, pero quiero hablar con ella pronto.

 

Al terminar el desayuno, nos dirojimos al ascensor solo Julieta y yo, ya que las otras chicas se quedarón hablando con los chicos, entonces aprovecho para hablar con mi hermana.

 

-¿Qué tal tu primera noche?- pregunte mientras se cierran las puertas del ascensor.

 

-¡Pues maravillosa!, nunca me había dormido en una cama TAN cómoda.

 

-Lo sé, lo mismo pensé yo, fue estupendo.

 

-Y, ¿hay novedades sobre tu compañíera?

 

-No, aún no, pero espero que las haya pronto, me siento sola- dije poniendo un puchero falso.

 

-No seas boba- dijo riendo y poniendo una mano en mi cara, yo la aparto también riendo.

 

-Ya enserio, ojalá llegue pronto.

 

Me despido de Julieta y subo a mi piso, al llegar a mi cuarto, noto que todo está en perfectl orden, asumo que es Natalie, así que la busco, está en el baño, organizando. La veo y llamó su atención.

 

-Hey gracias, por organizar, no tenías que hacerlo- dije algo apenada.

 

-De hecho, ese es mi trabajo- dijo apartando un mechón de su frente.

 

-Sí, lo sé, pero me siento mal con que tu limpies mi desorden.

 

-Descuida no hay problema.

 

-Que te parece si por lo menos me dejas ayudarte tendiendo mi cama.

 

-No debería señorita, yo...

 

-Papapab, no se hable más del tema, es un trato- dije poniendome una de mis manos a escasos centímetros de su cara.

 

-De acuerdo- dijo riendo.

 

-Ahora, vamos a que me enseñes a como usar la laptop, ¿okey?

 

Nos dirijimos al escritorio y nos sentamos frente a la laptop, Natalie la abre y comienza a explicarme. Me enseña cual es el botón de encendido, me enseña como usar el "mouse", donde puedo encontrar mi horario, como usar internet, y un montón de cosas más. Además, me enseña que el celular se usa exactamente igual, solo que en lugar de usar el mouse se usan los dedos.



#1190 en Fantasía

En el texto hay: instituto, romance, poderes

Editado: 08.06.2021

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.