Instituto de Elementos

Capítulo 18

La siguiente clase fue una que solo teníamos los chicos de agua, y era sobre todo lo bueno que tiene nuestro poder y cómo podríamos usarlo a nuestro favor en el futuro. La clase fue corta pero me hizo entender lo increíble que era mi poder.

 

Las siguientes clases fuerón clases básicas como matemáticas y física, así que no fue nada muy interesante. Raiza y yo teníamos horarios diferentes, entonces no puede verla en todo el día. Mi jornada académica finalizó a las cuatro y media de la tarde, y como pude le escribí a Raiza para vernos,  aún era algo nueva con eso del celular, pero ya le estaba agarrando la mano.

 

Quedamos de vernos a las cinco en la cancha de basquetball entonces esa media hora de soledad me la pase tratando de aliviar mi dolor de ojos y frente. Los resultados no fuerón los mejores, pero al menos había logrado no sentir tanto dolor al moverme.

 

Cuando Raiza llegó se le veía muy feliz, conteniendo las ganas de decir algo, en tanto estuvo a una distancia para poder conversar tranquilamente conmigo, comenzó a hablar.

 

-No adivinarás- digo sentándose en la misma escalera en la que estaba yo.

 

-¿Qué?- respondí tranquilamente aunque aún cada palabra es como un golpazo.

 

-Pues, conocía a unas chicas de tierra que organízaran una fiesta está noche y me han pedido que valla, pero no quiero ir sola, así que me gustaría que fueras conmigo, ¿qué opinas?- habló tan rápido que a penas si le puedo entender.

 

-No me parece la mejor idea- dije y sin querer se me escapa un gesto de dolor.

 

-¿Porque?, ¿te encuntras bien?- posó una mano sobre mi hombro.

 

-Sí, estoy bien- continué mintiendo-, es solo que yo no soy tanto una chica de fiestas es todo.

 

-Ay porfavor amiga, no puedes dejarme ir sola, no conozco a nadie.

 

-¿Y se supone que yo sí?- dije en tono sarcástico.

 

-Pues no, pero me puedes ayudar a convivir, será mucho más divertido si tú vas.

 

-Raiza...

 

-Por favor....- dijo poniendo ojos de perrito.

 

-¡Agh! Está bien, pero soló hasta que encuentres a alguien con quien estar, después me iré.

 

-Bien, me parece justo.

 

-¿Y a qué hora es y en dónde?- pregunté colocando un dedo en la sien para tratar de llevar el dolor.

 

-Pues, si no estoy mal, es en el teatro, al patecer han logrado convencer a un maestro de dejarlas usarlo. En cuanto a la hora, me dijerón que era de seis y media, hasta la una de la mañana.

 

-¿Qué? ¿No se supone que todas debemos de estar en cama a las diez y media?

 

-Sí, pero la directora Rogers autorizó que las personas invitadas se durmieran máximo a esa hora.

 

-¿De veras? Wow, pues genial por ellos.

 

-Sí, y oye solo tenemos una hora y media para arreglarnos, así que yo pensaría que es mejor correr.

 

-Dirás arreglarte, yo pienso ir tal cual estoy- dije cruzándome de brazos.

 

-¿En serio, Avril? ¿Hasta con las gafas oscuras?- que ya supere lo denlas gafas oscuras, ¿no?

 

-Sí, hasta con las gafas oscuras- dije en tono cómico.

 

-Okey, haz lo que quieras, pero por lo menso ayúdame a arreglarme.

 

-De acuerdo, aunque dudo que pueda hacer mucho.

 

Raiza toma de mi muñeca y me conduce corriendo a la habitación.

 

-Okey, primero, debo elegir que me voy a poner, quiero que algo que llame la atención pero sin exagerar.

 

Suelto una leve carcajada.

 

-De acuerdo, pero antes, debo saber si la fiesta es formal o informal. No quieres llegar con vestido a una fiesta informal, o con jeans a una fiesta formal.

 

-Correcto. Creo que es informal, pero con estilo, no sé si me hago entender.

 

-Por supuesto. A ver, ¿podría ser esto?- dije sacando un vestido verde suelto que va hasta más abajo de la rodilla.

 

-Mmm, demasiado pretencioso.

 

-Okey, ¿y esto?- dije sacando una camisa blanca con estampado negro, unos jeans rotos y una chaqueta de cuero.

 

-Mmm....¡Perfecto!- dijo dándome un abrazo- Tienes un gran sentido de la moda.

 

-Pues, gracias....creo.

 

Raiza se mete al baño y se viste. Después me pide que la peine, lo único que hago es hacerle un par de rizos suaves y ponerle un par de horquillas. De zapatos se pone unas botas negras un poco altas. Y para el maquillaje, se hace un delineado fuerte con labios vino tinto.

 

-¿Y que tal estoy?- dijo mostrándome el resultado final.

 

Debo admitirlo, se ve exelente.

 

-Te ves genial, Raiza.

 

-Gracias- dijo y mira la hora en la pared- ¡No puede ser!, mira la hora, ya son las siete, hay que irnos.

 

Toma su bolso y una vez más, me lleva agarrada de la muñeca.

 

Llegamos al teatro, el cual está con luces de colores y música muy fuerte, todos están vestidos más o menos al estilo de Raiza. Era una tortura para mi cabeza la cabeza era insoportable, pero lo había dicho a Raiza que me quedaría con ella hasta que encontrara compañía.

 

Por suerte, eso no tardó en ocurrir, al parecer se encontro con las chicas que la habían invitado. La recibierón con los brazos abiertos y muy amablemente, eso me hizo sentir feliz por ella.

 

-Oh, cierto- dijo Raiza acercándose a mí-. Ella es Avril, mi compañera de cuarto y mejor amiga.

 

Las demás chicas me dedican una sonrisa.

 

-Un placer Avril, me llamo Maya, ¿que te está pareciendo la fiesta?- digo una chica castaña de ojos verdes.

 

No puedo ser sincera, si les digo que estoy odiando la fiesta por la música, quedaré muy mal y como una tonta.

 

-¡La fiesta está genial! Pero no creo quedarme mucho tiempo.

 

-¿En serio?, ¿Porque?

 

-Yo... Tengo cosas que hacer y estoy un poco cansada.



#1190 en Fantasía

En el texto hay: instituto, romance, poderes

Editado: 08.06.2021

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