Llegó tú fin.

Capítulo 27.

Empezar un nuevo año de esa manera es estupendo, nunca pensé que me sorprenderia, fue tan genial.

Ahora estoy sentada junto a mi familia disfrutando de una taza de chocolate al frente del televisor mientras vemos una pelicula de navidad.

Es raro estar haciendolo, es mi familia pero nunca me habia sentido comoda de hacer esto.

Despúes de un rato los niños comenzaron a correr en el jardín mientras los adultos estan en la cocina y

Esteben esta jugando en la consola de video juegos, yo rapidamente subo a mi habitacion.

Me comencé a sentir asfixiada mientras estabamos en la sala pero lo controle, no quiero que se preocupen, no despúes de verlos tan felices.

Me siento en el balcón para tratar de relajarme, tengo que dominar estas crisis. Odio tanto a Drew por todo esto, siempre me hizo daño desde que nos conocimos la primera vez, es tan enfermo me dan arcadas con solo evocar aquellos dos ultimos encuentros.

No debo avergar rencor pero él solo ha sido aquella nube negra que no me dejaba avanzar, siempre me utilizo, nunca me valoro, por eso quise estudiar en Misisipi pero tenia que seguirme.

Comienzo a derramar lagrimas sin poder contenerlas más, no se si pueda seguir despúes de todo, él se ha llevado mis ganas de reirme, de ser feliz.

No deberia dejar que esto me domine pero esto ya fue suficiente, me siento hundida, todavia siento sus asquerosas manos en mi cuerpo.

Cada vez que pienso que todo terminó pasa algo nuevamente, estoy asqueada de esta situación.

He pensado mucho en irme a otro sitio pero el estar sola me da panico, pensar que así puede aprovechar y hacerme daño otra vez, que esta vez si logre su cometido. Sé que está en la carcel pero así como salio la primera vez puede hacerlo esta.

Mi celular suena y corro a agarrarlo, veo el identificador y siento el corazón salirse de mi pecho.

—Hola...—hablo.

—Cielo...¿cómo estás?—realmente no sé como logró enamorarme.

—Nath bien ¿y tú?.

—Muy bien ahora que te escucho—suelto una risita y él hace lo mismo—Te amo cariño.

—Y yo a ti cielo—nos quedamos unos minutos en silencio, disfrutando de eso que no puede ser expresado en palabras.

—Siento haberme ido tan temprano es que tenia que hacer algunas cosas en casa—sonreí a pesar de que no pueda verme.

—No te preocupes igual ya casi vamos a volver a la universidad—soltó un bufido.

—Pero yo queria pasar más tiempo contigo antes de comenzar las clases.

—No podemos hacer nada, ya falta poco cielo—lo deje más calmado y despúes de unas horas colgo.

********

Ya estoy en camino para la universidad y estoy muy nerviosa, ya ha pasado un mes de aquello y no sé como actuar ante todo.

Unas horas despúes estaba subiendo mis maletas a mi departamento, entro cuidadosamente y cierro enseguida, todo esta en completo silencio, seguro Mari no ha llegado.

Tire mis maletas encima de mi casa y salí, fui a la cocina para abrir la nevera, agarre una manzana y al darme vuelta veo el rostro de Alicia frente a mi, termino de morder mi manzana y con desgarbo paso a su lado, termino en la puerta y la abrí.

—Sal —le ordené.

—Dejemos los jueguitos—se acercó a mí y cerró la puerta de un manotazo.

—Ya va, explicame—le dije en tono burlón, realmente ella no me da ni un poco de miedo—¿Tu ayudaste a Marifer?—ella asintio con una sonrisa estupida en su rostro— y decidiste delatar a Drew ¿por?—pregunté apunto de estallar en carcajadas.

—Ay niña tonta, todo lo hice para que no me vieran como una amenaza—me erguí—desde que te fuiste te seguí, queria estar detrás de ti viendote caer cada vez más—tragué con fuerza—todo lo planee perfectamente, desde las fotos todo a sido mi idea y Drew solo me cayo como anillo al dedo, esta tan obsesionado contigo que no se me hizo tan dificil convencerlo—estoy hiperventilando—me dio tanta colera que se vieran felices que me apresure a dar mi ultima estocada—saco un arma de su cartera—llego tu fin Esmeralda Greham.

Abrí mis ojos por ver esa arma apuntando justo a mi pecho—¿Por qué haces todo esto?

—Sencillo, porque me has arrebatado a Nathan y quiero que sufras por eso—me jalo del brazo abriendo la puerta para luego empujarme fuera y clavar ese objeto en mi espalda—camina rapido.

—¿A donde me llevas?—empujo el arma clavandola aún más en mi espalda.

—Callate y camina—le hice caso y camine lo más rapido que pude.

Frente a mi paso una amiga de Marifer y con mis labios en silencio le dije que buscara ayuda.

—Mira al frente estupida—lo hice y me di cuenta que habiamos salido del campus y ya ibamos por una calle, espere caminar un poquito más y al ver a varias personas me gire y agilmente le arrebate el arma y la arroje a un extremo de la calle, le di un golpe y salí corriendo, nunca se me ocurrio cruzar la calle pero lo hice y no me di cuenta que ella venia detrás de mí.

Voltee y nos quedamos mirando en el medio de la calle, de un momento a otro ella salio corriendo en mi dirección y yo me quede ahí paralizada, sin poder mover ni un dedo.

Ya estaba muy cerca de mi y escucho un claxón, volteo y un carro viene a toda velocidad sin poder frenar, reacciono de golpe y salgo corriendo hacia la acera.

Cuando llego escucho un sonoro grito, volteo y veo a Alicia pasar encima del auto y caer estruendosamente en el asfalto.

Camino rapido hacia ella sintiendo todo pasar en camara lenta, se siente tan ireal, tan descabellado.

Llego y la miro tratando de no hablar, me agacho y le quito el cabello del rostro, limpio con el borde de mi camisa la sangre que esta en su frente.

—No hables por favor, la ambulancia ya viene—tosio quejandose por el dolor.

—Per...perdoname—la escucho atenta—por...fa..vor

—Sí, Alicia yo te perdono pero no hables más por favor.