Capitulo 20

Después de mucho pensarlo miro a Sebastián algo inquieta por su respuesta. - Que pasa si Taylor es la culpable, hermano.

- Si ella nos está traicionando eso significa pena de muerte.

- ¿Y el bebé?

- No necesitamos al hijo de un traidor.

Esto está mal, aunque Taylor pueda estar detrás de esto no creo que sea ella pues en sus ojos yo vi cuanto ama a su bebé y ella mejor que nadie sabe cuál sería su destino si traiciona a esta familia.

- Hija ahora ve con Sebastián y dile todo lo que recuerdas así él puede hacer un perfil de esas personas.

- Bien, padre.

Genial ahora que necesito más que nunca hablar con Peny me han quitado todo medio con el cual poder comunicarme, si no logró averiguar algo útil estaré sentenciado a Taylor a perder no solo su vida sino que también la de su hijo.

Caminamos observados por todos, la tensión se siente en el aire al igual que el miedo.

- Dime pequeña, quiero que no te guardes nada por más mínimo que sea.

- Era un hombre alto como de 1,80 o un poco más tal vez, se podía notar claramente entre la multitud por su estatura y cuerpo fornido. Cubierto de pies a cabezas no logré ver ni un mechón de su cabello.

- Bueno eso es algo vago, afuera hay un millón de personas así y más en nuestro círculo. ¿Cuántos más estaban con él?

- Tal 4 personas más, había mucha gente en la calle y yo corría por mi vida.

- Que hay de la mujer.

- Para mí ella era una mujer normal como muchas con las que me topé esa noche, ella actuó amable y nos ofreció llevarnos a la policía.

- ¿Nos?

Maldición lo olvidé. - Estaba con otra mujer, una que me estaba ayudando.

- Quiero saber todo lo de ella también, puede ser otra cómplice.

- No hermano, ella era una chica común que sintió pena por mi yo fui la que la arrastro a todo esto.

- No estoy convensido..Que hay de los autos. ¿Recuerdas matrículas o modelos?

- La mujer tenía un auto negro, muy bonito aunque no vi su matrícula, perdón estoy diciendo estupideces.

- Está bien, sufriste un gran golpe en la cabeza por eso tus recuerdos están mezclados además del trauma, el doctor nos dijo que podrías estás suprimiendo involuntariamente información.

Eso es, Penélope no quiere recordar y por eso no es capaz de decir nada con certeza. Yo por mi parte no tengo nada valioso que ofrecer, ojalá que el tiempo que pase con mi familia la haga sentir más a gusto y pueda recordar todo aunque sea doloroso para ella.

- Hermano ¿podrás encontrar algo sobre la mujer? Ella era la más expuesta físicamente.

- Bueno padre me dijo su descripción aun así muchas entran en ella, estoy buscando entre las hijas de las organizaciones cercanas o que está en nuestra contra, pero mira esto pequeña.

Observo la pantalla y hay docenas de mujeres con la misma descripción.

- ¿Alguna te resulta conocida?

- Estoy comenzando a dudar de su tatuaje, puede que no fuera un lobo o calavera mi mirada estaba en todas partes y la observe de reojo. Pero sin duda no es ninguna de ellas.

- Bien seguiré buscando y también estaremos investigando a todos aquí. Por favor Peny ten cuidado, no le digas nada a nadie, no seas cercana a ninguna de las personas que estan en este lugar.

- ¿Eso los incluye a ustedes? Sebastián porque me apartaron todos estos años, porque me trataban con tanta frialdad y despreció. Entiendes que ustedes para mi son la mayor amenaza de todas y que por eso escapé.

- Pequeña puedes dudar del mundo entero y sé que nosotros encabezamos esa lista, pero somos familia y la familia se cuida entre ella.

- Ustedes no cuidaron de mi durante 18 años.

- Entiende que para nosotros tampoco fue fácil, mamá era la única persona aquí capaz de demostrar amor y cuando ella se fue dejo un vacío muy grande y desgraciadamente no sabíamos como criar a una niña y no eras cualquier niña eras la persona más preciada y querida por mamá.

- No es escusa, un abrazo, un beso de buenas noches, un simple gesto de amabilidad es algo que cualquiera puede hacer, ustedes simplemente me abandonaron, me dejaron en el olvido. Mamá estaría muy decepcionada de ustedes así como yo lo estoy.

- Perdón Penélope, todo fue por un bien mayor.

- Cuál es ese, porque que yo sepa todavía estoy encerrada y condenada a muerte.

- Vivirás una buena vida y serás feliz ese es el objetivo y lo cumpliremos a cualquier precio. Un día despertarás y te darás cuenta de que estos 18 años de sufrimiento se multiplicaron con amor.

- Si sobrevivo.

- Tú vivirás, de eso nos encargamos nosotros.

Esta conversación me dejó confundida, Sebastián quien siempre se mostró aterrador ahora me ha dejado ver un poco más de su corazón y sentimientos, lo peor es que parece un buen hermano, tal vez todo esto es porque yo soy una hermana mayor y fue esa la razón que me llevo a meterme en este desastre que intentó comprenderlo.