Capitulo 65

Según el informe nadie ha salido del lugar en los últimos 3 días y siguiendo el plan de Sebastián nos dividimos en pequeños grupos para no llamar la atención y alertar al enemigo.

- Niña te quedas conmigo en todo momento.

- Entendido.

Baltasar llega para informar el avance y no ve muy bien a Peny.

- Porque la estas mirando de esa forma.

- No entpor quéporque la trajiste, se supone que es la niñera de Jayden. No es un soldado y se convertirá en una molestia.

- Yo tampoco lo soy entonces dime hermano soy una molestia para ti.

- No es lo mismo y de hecho no quiero que estés aquí.

- Pero ya estoy aquí así que deja de llorar como una perra y ponte a trabajar.

Comenzamos a movilizarnos entre las calles que rodean la capilla y se escucha el primer estruendo indicando que el segundo grupo se haga presente, nosotros somos el de respaldo y atrás están los que no dejaran a nadie esperar como cucarachas.

Después de esperar lo que parecen horas llega la orden de que entremos en acción, tomo la mano de Peny y comenzamos a correr. Adentro se ve todo calmado incluso creo que estamos locos al ingresar en este lugar sagrado, pero de repente alguien sale corriendo y Baltasar lo neutraliza.

- Ese es el pasaje secreto.

Pasamos por detrás de un gran cuadro y vemos las paredes manchadas de sangre unos cuantos hombres vienen por nosotros y rápidamente actuamos para protegernos.

- Cuidado.

Los disparos, el humo lacrimógeno, los gritos de dormir todo es tan confuso que sientes que estás dentro de una película o videojuego lo malo es que si mueres aquí no hay más vidas de respaldo.

A lo lejos logro ver a ese hombre y Sebastián corre detrás de él.

- ¡Alisha la mujer!

- Maldición es una trampa.

Corremos para ayudar a Sebastián y lo vemos de rodillas ante esas dos personas. - No hagas ruido, niña.

Apunto a la desgraciada, pero antes de darle ella gira y la lastimó en la mano. Me impresionas ver su resistencia, lejos de mostrar dolor ella sonríe satisfecha.

- La mocosa se hizo presente.

- ¡Penélope corre!

- Cállalo Uriel.

Vemos como lo golpea y ambas comenzamos a dispararles haciendo que retrocedan para buscar refugio mientras intentamos acercarnos y llevarlo a un lugar seguro.

- Déjame y cuida de ti misma.

- Olvídalo idiota, si tú mueres todo acaba ahora mueve tu trasero rápido.

Luego de dejarlo en un lugar apartado nos vemos a los ojos sabiendo que llego la hora de ejecutar nuestro plan secreto.

- Recuerdas esa noche Penélope.

- Ahora si la recuerdo, nosotras dos tomadas de la mano junto al barandal del edificio.

- Llego la hora hermanita.

- Estoy contigo hermana mayor, no importa que.

Lo que sucedió fue como un déjà Vu o una epifanía, las dos recordamos lo sucedido mientras subíamos las escaleras. Esa noche estando arrinconadas la abrace y le pregunte si confiaba en mí aun siendo una desconocida, Peny me respondió que confiaba en mí más que en todo el mundo así que la sujete con fuerza de la mano y saltamos al vacío sin siquiera vacilar.

- Si todo es como esa noche él estará de frente y ella atrás entre las sombras. Yo lo voy a distraer lo más que pueda mientras tú te quedas atrás y cuando la veas dispara.. Penélope no dudes así como en esa vez.

- No te preocupes está vez yo te cuido.

Abro lento la puerta y hay esta ese hombre con un cuchillo en su mano y esa mirada desafiante.

- No me esperaba que de verdad subieras. Te quieres divertir conmigo pequeña mariposa.

Dejo caer el arma y me pongo en posición de pelea. - Venga pues cabrón.

Él lanza el primer golpe y lo esquivo con precisión dándole un rodillazo en el abdomen, no tarda en recomponerse y lanzarme contra las rejas con gran fuerza lanzándome golpes tras golpes. Saco el cuchillo de mi pierna y lo apuñaló en el hombro devolviéndole un gran golpe en la cara que lo hace retroceder un poco más de mí dándome espacio nuevamente.

Lo agarro del cabello y le rompo la cara con mi rodilla antes de ser tomada por el cabello por esa víbora.

- La niña ye está dando una golpiza, patético.

- Déjame hacer esto a mi manera.

- Como sea.

Ella me lanza al piso y él se sube sobre mí neutralizándome, pero ya he sido entrenada así que puedo defenderme aunque me gane en estatura y peso. Le golpeó la garganta y luego voy directo a sus ojos enterrando mis uñas en ellos.

- Ahhh maldita desgraciada.

Le doy una patada en los bajos dejándolo tirado por completo. Siento el revolver en mi cabeza y ya me lo esperaba.

- Muy bien niña me has logrado impresionar, no me esperaba que resistieras tanto.

Rowena hace algo que no esperábamos, le da un disparo en la cabeza a su cómplice sin siquiera pestañear.

- Si no puede con una simple mocosa no me sirve para nada. Ahora tú pagarás por dejar ciego a mi perro más leal.

Penélope le la un gran y certero disparo haciendo que suelte el arma antes de salir para unirse a mí.

- Ahora el juego cambió y eres tú la que sé va a tener que enfrentarse a nosotras dos.

- Eres la chica de esa noche que diablos haces aquí.

- Vine por venganza.