— ¿Te irás con él, Margaret? —Escuché la voz de mi papá angustiado. — ¿Nos dejarás por él?
Me escondí en la punta de las escaleras para escuchar la conversación de mi padre con mi madre, últimamente han nombrado mucho la partida de mamá de nuestra casa y no se por qué, papá se ve preocupado y ayer lo encontré llorando en su habitación.
—Te he dicho que sí, yo necesito cosas que tu no puedes darme y él sí—Mamá tenía un par de maletas negras en sus manos y el sonido de una bocina es un aviso para ella—Despídeme de Elizabeth.
— ¿No volverás? —Le preguntó papá cuando ya tenía un pie fuera de la puerta.
¿A dónde va mi mami?
—No, Murphy—Se oyó la puerta de la casa cerrarse con fuerza y yo salí de mi escondite para bajar las escaleras y ver a mi padre arrodillado en el piso.
— ¿Qué paso, papi? —Lo abracé al verlo sollozar. — ¿Mamá no volverá?
Negó con la cabeza y me tomó entre sus brazos abrazándome con fuerza.
—No, Ellie…Somos solo tu y yo.