Dafne me ayudaba a ponerme el hermoso vestido rosa que me obsequió Esteban para el baile, estaba muy feliz y veía mi reflejo en el espejo "Una muñeca deseando ser feliz como princesa" esa era mi forma de pensar cuando era niña, Dafne me acomodaba el corset del vestido y yo no dejaba de ver mi reflejo en el espejo me sentía una princesa o quizás me iba a convertir en la reina del baile con semejante vestido glamuroso, Esteban tocó la puerta, pero Dafne no le abrió y le dijo <<Espera que llegue la hora de la fiesta y verás hermosa a Verónica>>
Cuando estaba lista miré la hora y eran las 7:00 p. m. Estaba emocionada por el momento, pero me senté a ver las noticias; no había nada interesante que ver. Me asomé a la ventana y vi a Esteban charlando con sus amigos; no negaré que estaba muy atractivo y lindo, pero me sentía cómoda en observarlo desde la ventana. Cuando me levanté del asiento, Dafne me sentó en una silla frente a su espejo del tocador. Me maquilló, pero aún no podía negar que estaba empezando a sentir algunos sentimientos inexplicables por Esteban Russ. Tal vez era mi momento de un nuevo comienzo, pero no negaré que aún me gustaba Michael Volkova, aunque intentaba ignorarlo y siempre darlo desapercibido cuando lo veía junto a Haydy. Él no hace mucho intentó comunicarse conmigo, pero no seré su segundo capricho o placer si es lo que en verdad quiere. Miré la foto de mis padres y solo deseaba estar junto a ellos, pero sabía que tenía que aceptar la realidad. Dafne me acarició el cabello y me dijo.
—Cálmate, Verónica; tus padres te cuidan estando muertos; ellos deben estar orgullosos de ti —dijo Dafne mientras trenzaba mi cabello.
Cuando miré el reloj eran las nueve; la fiesta empezaba dentro de una hora, así que me senté en mi escritorio y empecé cuidadosamente a leer uno de mis capítulos que había terminado de escribir. Tenía un gran deseo por salir de esa cárcel, cuya habitación y las aulas eran mi martirio. Mi corazón sentía un gran despecho, pero intenté dejar los pensamientos pesimistas. Tomé mi teléfono y llamé al teléfono de mi hermano Byron. Quería decirle toda la verdad: "Que me había enamorado de su mejor amigo", pero después decidí dejar las cosas quietas; no quería que se disgustara o hiciera una reacción negativa. Dafne me sirvió una taza de café; no quería dormirme; tampoco tomar té, ya que era de mi agrado. Dafne estaba retocando el maquillaje; no negaré que estaba muy hermosa; parecía una actriz que posaba frente a las luminosas lámparas de su espejo. Su reflejo era bonito como un retrato pintado de Leonardo da Vinci. No negaré que mi amiga Dafne era muy buena de personalidad; no solo eso, también era dulce de corazón; estaba acomodando mi collar y algunas pulseras doradas; quería lucir mi estilo y resaltar donde quiera que fuera en esa fiesta.
Cuando Byron me llamó al teléfono, me estaba devolviendo la llamada perdida que tuvo de mí. No sabía qué decirle, así que contesté y le dije <<Estoy ocupada ahora hermano, te llamo después, cuídate>>. Solo pude decirle eso y colgué la llamada. Me sentía incómoda o incapaz de declararle la verdad sobre quién era el chico al que me había enamorado, pero todo estaba cambiando porque mi atencion estaba cayendo sobre Esteban Russ al parecer, no era malo como pensaba desde un principio, Dafne me apresuró a tomar mi cartera y algunas cosas personales. Cuando Dafne y yo salimos de la habitación estábamos marcándole a un taxi que nos recogiera en la entrada, pero en el camino Esteban nos dijo que fuéramos en su limusina. Esteban quería presumir nuestra nueva amistad, pero le negué la propuesta, aun así él se rehusó y me llevó a mí y a Dafne. Cuando lo miré estaba muy elegante, pero aún no tenía mis sentimientos claros por él, así que quería conocerlo más y saber sobre su vida personal, cuando llegamos a la fiesta en la limusina de Esteban... Michael no se resistía a mirarme fijamente. Después de haberme bajado del carro con mi vestido apoteósico, intenté ignorarlo y darme por convencida que él fue mi tiempo perdido, pero dudé por un momento. ¿Quién me ayudará a descubrir las horripilantes verdades y secretos que guarda el internado School National City, Texas?, ¿cómo pasaré los pasillos donde siempre me asecha el peligro? No sabía qué respuesta concluir, pero aún así quise hacerme la difícil. Mientras que Michael tomaba copas de vino sentado junto a Haydy, yo bailaba con Esteban. Dafne me apoyaba a que estuviera conmigo. No obstante, bailábamos un baile tan elegante y apasionado y él sostenía mi mano derecha al aire y su mano izquierda en mi cintura... Era un baile lento con movimientos elegantes, pero no más elegantes que mi vestido. Ya que recibí muchas miradas por parte de los invitados y estudiantes, pude notar a simple vista que Haydy se moría de los celos y la envidia porque yo era la única que resaltaba con el mejor vestido de gala. Cuando Esteban me invitó a tomar copas de vino, no las acepté porque nunca me habían gustado las bebidas alcohólicas, pero no dudé en tomar una limonada en copa de cristal. Muchos me invitaron a bailar, pero no aceptaba porque quería quedarme con Esteban. No tenía a más nadie en quien confiar que Dafne y Michael, pero él resultó ilusionándome y hacer que quedara como una tonta al crear lazos afectivos con mi enemiga, si supiera que esa víbora intentó asesinarme y solo Esteban estuvo ahí para ayudarme, ese era uno de mis pensamientos que rondaban en mi cabeza.
Bailé y probé nuevos platillos toda la noche junto a Esteban. De repente, Esteban acercó su rostro lentamente al mío. No pude evitar sonrojarme al ver fijamente sus ojos verdes. Eran como ver esmeraldas donde se contornaba mi rostro. Sus lindos ojos eran seductores; estaba cayendo en la tentación de que inconscientemente me acercara a él y cada vez que me acercaba casi lo iba a besar hasta que reaccioné en el momento.