Íntimos Escritos

QUERIDA DEPRESIÓN

Hoy te escribo para decirte lo mucho
Que te quiero,
El poco tiempo en la mente de un preso
Lo condena a mil años de tristeza
Pura y sin alma
Nuestra condena es sentirnos con un destino sin motivo aparente a ser infeliz.

Santiago H

Las tardes eran la parte más bella de mis días más cuando tenían esos colores anaranjados que se sentían tan tranquilos de alguna manera eran los colores que yo siempre quería ver cuando me sentía con un bajón

La tristeza se me podía notar hasta en lo más mínimo de mi , mis ojos muy hinchados de tanto llorar, y mis pocos animos de trabajas

Pero Don Santi es muy responsable

Aquí estoy con cara de no querer ver a nadie, cayéndome parado por el cansancio que sentía

Doña Rosita había dicho que si me he peleado con mi sueño cosa que si lo hago porque no he dormido de tanto pensar

Muchas preguntas rondaban en mi cabeza y ninguna respuesta

¿Que haré con Liz?, solo sabía que tenía que un par de días hasta poder saber que hacer como pedír prestado cosa que no quería nunca había necesitado dinero de nadie para eso trabajaba siempre me atormentaba el hecho de que mi hermana nunca digo nada siempre era la que sacaba una sonrisa cuando todo en casa iba mal

Cuando mi mamá lloraba de culpa, o yo por no poder sacarla de aquí o siempre el tema que nunca me gustaba mi padre y el dinero

No había meses no se saltaba uno para ir a casa a gritar a mi madre, treparse por la pared y saltar al patio donde encontraba con una casa silenciosa mi madre se había escondido por miedo mientras mi Liz me llamaba desesperada no teníamos mucho dinero como para ir a cuartos de arriendo porque eran un poco caros cosa y los más baratos eran muy feos

Ninguna persona desearía vivir en una situación espantosa pero tenía que sacar a mi madre de ahí y cada vez más me agobiaba mi hermana necesitaba otro aire vivir de otra manera para que comience de nuevo y mi madre santa que no llore más y no sufra por no darnos a nosotros una vida lujosa por la condición que tenía y no le daban trabajo

Por eso decidí que era suficiente ya que no aguantaba otro mes así, con lo que tenía ahorrado ya tenía para poder pagar un lugar un poco lejos de aquí tal vez a las afueras todo sea un poco más cómodo y tendría que conseguir otro trabajo que sería muy díficil pero tenía mucha experiencia en muchos trabajos.

Antes de salir de casa le dije a mi madre que se cuidaran entre ellas por esta noche ya que yo iba a ir a buscar un lugar en donde quedarnos

- ¿ ¡a donde vas! ? - Mia grita desde la cocina

Tomo mi maleta y me destino a salir lo más pronto posible

- ya es hora de salida - digo cortante , y camino hacia la salida no tenía ganas de hablar con nadie ni dar explicaciones era mi hora de salida se había terminado mi horario

Hoy no tenía que ir al refugio así que también aproveche para decirles que tal vez no iba a volver no sabía si encontraría un lugar en donde estar y solo vendría a llevar a mi madre y a Liz de aquí y renunciaria al trabajo más adelante cuando ya tenga otro en donde sea que vayamos a estar

La única que sabía a donde iba era Rosita la persona que ayudó a conseguir un lugar espero que esto funcione

Pero me sentía muy triste al tenerme que despedirme silenciosamente de Antonela y Leonardo son niños y no entendían mis palabras solo dijeron

- ¡ entonces vamos a volver a jugar al te ! - dice emocionada - ¡cuando vuelva de mi viaje te daré un regalo ! - decía emocionada como quien le da un dulce aún niño y es feliz

- ¡¿verdad que si papá , le traeremos algo a Santi ?! - leo con iluciones le vea a su padre

Y en un intento de hacerlo feliz

- claro hijo que le traeremos algo - le dice con una sonrisa al ver lo inocente que eran - espero que te vaya bien muchacho, y cuando vuelvas haremos en casa una buena comida

Lo miro con una sonrisa triste a lo que solo pude asentir

- ¡Niños es hora de irse !

Todos salían corriendo en dirección a sus padres y con su pequeña manito me decían adiós mientras salían

Veía como todos salían felices con sus padres despidiéndose de mi y gritando que quieran volver a jugar a las escondidas cuando volvieran

No quería llorar así que atragante mis lágrimas y me dispuse a ir al terminal de buses donde compré el ticket de un bus que salia dentro de media hora rumbo a la costa

Si yo era de ahí de la bella y hermosa costa siempre me habría gustado vivir ahí cuando aún no tenía uso de razón mi mamá en un intento de huir paro aquí en Quito donde sería su nueva misión de vida

El calor y todo lo relacionado al mal me gustaba se sentía tranquilo y mi madre siempre habia querido volver a ese lugar de donde había salido

Saque el dinero que tenía en el bolsillo tenía para pagar de la empanada de pollo que para ser de un puesto que no se veía del todo bueno su empanada era demasiado deliciosa

Vi la hora en mi teléfono, en la pantalla salían muchas notificaciones de instagram debía ser por el escrito que habia subido porque si

Dada la obligación decidí subirlo lo más rápido posible, a la gente le gustaba mucho lo que subía las cuatro fases de la luna junto a el sueño de tenerte de sentía más suyo que mío

Había un montón de notificaciones las vería más luego y respondería a las que mas me interesarán

Ayyy a lo que vinimos

6:45

Ya es hora, me levanté del asiento donde me encontraba, las personas que estaban al lado mío hacían mucho ruido y eso me estába consumiendo la cabeza

Lo bueno es que ya me voy

Me dirigo hacia la puerta de entrada donde se paraban todos los buses para partir a su destino

- señor su ticket - dice el guardia - bien viaje

Cogí el ticket que me ofrecía con el numero de carro y asiento

Me destino a ir hacia los carros, para buscar el número de bus



#5503 en Novela romántica
#442 en Joven Adulto

En el texto hay: escritos, romance drama

Editado: 12.10.2025

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.