Cuarto

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Se que la diferencia de horario es bastante pero me urge y necesito hablar con mi hermana, así que entre mas rápido mejor. Después del cuarto tono al fin respondió. 

-Creí que no tendrías tiempo de llamar porque estarías muy ocupada  - dijo sorprendida y al escuchar su tono de voz se que está molesta. 

-Lo estoy Yoon - dije utilizando la palabra que acordamos usar si algo no iba bien. En este cado nuestro apeido. - El vuelo fue perfecto y la bienvenida de Taehyung ha sido de lo más cálida y hospitalaria. Tengo una habitación, incluso más grande que el primer piso de la casa. - 

-Bueno, ¿Y cuál es el problema entonces?, solo pasatela bien. - 

-¿No me has oído Yoon? - 

-Si, "Min Ki", pero es muy pronto para que te arrepientas de casarte con él. - 

-Todo esto es un error, no me gusta mentirle a Tae - dije con la voz baja. Ya que en la habitación de al lado se encontraba una chica del servicio deshaciendo mi equipaje, y aunque no creí que estuviera escuchando, preferí hablar bajo. 

-¿Acaso se ha convertido en un ogro?, oye ¿Desde cuándo es Tae y no Taehyung? - 

-Claro que no, sigue siendo tan encantador como lo recordábamos. - respondí omitiendo su segunda pregunta, y de inmediato supe que mi hermana ya sospecha algo. 

-Supongo que lo que te da miedo es enamorarte de él si sigues con esto. - 

- Mis sentimientos no vienen a cuento ahora. Simplemente no soy buena actriz, no podré seguir con esto por mucho tiempo. - respondí alegrandome de que mi hermana no me viera la cara. 

- Parece como si tu único problema fuera que te gusta más Taehyung de lo que creías. ¿Dónde está el problema? - dijo Min Ki riéndose. 

Él problema era que no podía aspirar a tener nada con él mientras siguiera legalmente prometido con ella. 

- Creo que deberías venir, como quedamos y solucionar todo esto.! - conteste algo alterada por la comodidad de Min Ki. 

-Lo haré en cuanto Danny y yo estemos oficialmente prometidos. Creo que será pronto porque tengo que ir a las Vegas a un desfile y Danny ha pedido unos días de vacaciones para venir conmigo, creo que quiere pedírmelo ya. - Daniel Smith era un gran chico y un gran empresario era dueño de una de las marcas más reconocidas en producto de belleza de Estados Unidos y se nota que ama a mi hermana, la cuida mucho y siempre que puede la acompaña a todos sus eventos, de echo se conocieron precisamente en uno de dichos eventos. 

-¿Cuánto dura el desfile? - pregunté con todas mis esperanzas por el piso.

-Cuatro días, pero pensábamos quedarnos un poco más si Danny tiene días, queremos aprovecharlos. No me querrás tirar mis vacaciones ¿verdad?, sabes que ambos lo necesitamos y esta es nuestra oportunidad. - dijo en un susurro. 

-¿ Cuándo piensas venir a Seúl? - pregunto controlando la ira que ya sentía. 

-A lo mejor no tengo que ir, si tú arreglas las cosas con ya sabes quien. - 

-¿Has tenido alguna vez la intención de venir? - 

-Si, por supuesto, pero ahora que tú estás allí y que parece que Taehyung te ha aceptado, no creo que sea una buena idea que yo vaya a revolver las cosas. - 

-¿Y que pasa con mi trabajo? - pregunto pensando si mi hermana no había planeado esto desde un principio. - Puedo estar un par de semanas fuera, pero no para siempre. - le digo ya con mis nervios al borde de un ataque. 

-Eso no sucederá. Si Taehyung quiere llevarte al altar o algo parecido, no tienes más que contarle la verdad y así te mandara de vuelta tan rápido que no necesitarás ni avión. - se rio Min Ki. 

Eso era exactamente lo que yo no quería que ocurriera, pensar en la reacción de Tae cuando descubriera que lo había engañado, me hacía tener unos horribles remordimientos. Si había aceptado mantener el engaño hasta que mi hermana estuviera prometida, solo espero no sea mucho tiempo,lo cumpliré. 

-Llámame desde las Vegas. - pedí rendida. 

-De acuerdo. Tú serás la primera en saber que llevo un anillo. - prometió - Deseame suerte. - 

Tras desearsela, a pesar de que era yo la que la necesitaba, colgué y me sentí más sola que en mucho tiempo. 

Decidí seguir el consejo de Tae y descansar. La chica del servicio había terminado de arreglar mis cosas y había preparado la cama. Me cambié y me metí entre las sábanas, pero no podía dormir. Veía la cara deTae mientras me preguntaba qué hacía yo Suni de mi vida en Estados Unidos. 

No pude evitar pensar que parecía más interesado por mi que en su supuesta prometida. 

Tras una hora dando sólo vueltas en la cama y más cansada que antes decidí levantarme y darme una ducha, me coloque uno de los conjuntos de mi hermana, un body negro y una falda blanca con negro y una camisa sin abrochar igual blanca con detalles en negro y zapatillas negras. 

Solo me puse un poco de crema hidratante con color, brillo en los labios y máscara en las pestañas. Por último me cepille el cabello pensando que la ropa de mi hermana me daba mas coraje de enfrentar a Tae que las mías. 

La chica que había estado antes en mi habitación me dijo que Tae estaría en la terraza tomando un poco de té y decidí unirme a él. 

No imagine cuán cambiada estaba la mansion y me perdí un par de veces entre los pasillos, tuve que preguntar a otra chica del servicio que encontré en mi camino, me dirigí por donde me indico pero antes me encontre unos ventanales y puerta de cristal que daban a fuera y salí. Me encontré con un jardín maravilloso, adornado con palmeras, plantas tropicales, árboles de cerezos, helechos, rosas e higueras. Era un lugar hermoso y muy tranquilo, se oia el cantar de los pájaros y el olor de las rosas me embriago totalmente. De repente me di cuenta que era un jardín privado, tal vez de Tae y no quería molestar, tal vez no debería estar aquí, asi que decidí irme. La idea de volverme a perder entre pasillos no me apetecía mucho. 

-¿Hay alguien aquí? - pregunté dudosa.