Ivor

Capítulo 16-Shawna

Las palabras que Ivor me gritó luego de que se fuera Tristán, luego de que tirara semejante bomba, me hizo sentir como la peor persona del mundo, es decir, ¿quién engañaba a su pareja con el primo, el hermano o mejor amigo? El enterarme de eso, fue horrible, pero más horrible fue, Ivor señalándome con el dedo acusador. Por lo que Parry habló conmigo la noche anterior, hay muchos otros secretos que todavía no me han dicho, independientemente de que crean que es mejor no decirme y que lo descubra por mi cuenta, me hace sentir enferma. ¿Qué otras cosas he hecho con la excusa de “fue por amor”?

Parry dice que debo hacer magia para recuperar mis recuerdos, pero lleva tiempo, tiempo que no tenemos y necesito saber todo lo que ha pasado en mi vida anterior ahora mismo. Dijo que hay otro método, pero duda mucho que Ivor esté de acuerdo en ayudar ya que es muy peligroso. No tengo la más mínima idea de cuál es ese método, pero estoy dispuesta a averiguarlo y a hacer lo que sea necesario para acabar con las mentiras y los misterios.

En silencio me dirijo hacia el piso de Ivor y Parry. Iris me acompaña, ella tampoco habla y eso es un poco extraño viniendo de mi mejor amiga, pero, con todo lo que ha pasado estos últimos días, es bastante comprensible que tenga la cabeza ocupada en muchas cosas o quizá, tenga la mente toda revuelta por los diferentes sucesos. Al llegar a la puerta del hogar de Ivor y Parry, podemos escuchar gritos, proveniente de adentro. Claramente distinguimos que ambos están discutiendo, ya que nos miramos antes de aventurarnos a abrir la puerta y entrar.

—No va a pasar, Parry —entona Ivor en voz alta.

—Pero, escucha, Ivor… —intenta Parry.

—No. Es peligroso —sentencia Ivor, interrumpiéndolo.

—Al menos deja que ella decida —sugiere Parry.

—Estoy dispuesta a hacer lo que sea —intervengo provocando que ambos se giren a mirarnos.

—No sabes lo que dices —espeta Ivor. Y sentí como si me estuviera desvalorizando.

—Sé perfectamente lo que digo —articulo, apretando los dientes.

—No. No lo sabes, Shawna —refuta él.

—Deja de excluirme. Deja de tratarme como si fuera una estúpida y no deba saber más de lo que sé. También me concierne todo esto. Y si es peligroso qué, tengo derecho a elegir si quiero arriesgarme o no. Es mi maldita vida también —Ivor se queda en silencio, observando mis ojos detenidamente.

—Quiere meterse en tu cabeza, Shawna. No sabes lo peligroso que es que urgen en la mente de alguien —expresa Ivor, casi suplicando que no lo haga.

— ¿Peligroso para quién? ¿Para mí o para la persona que hurga en ella? —inquiero.

—Mira, Shawna, no es que te trate como estúpida ni que te excluya, es obvio que esto te concierne tanto o quizás más como a todos los que estamos en está habitación en este momento. Yo solo… —le interrumpo.

— ¿Qué? —escupo — ¿No confías en mí para que pueda con esto? ¿Crees que no soy lo suficientemente fuerte como para soportar lo que sea? —él mueve la cabeza negativamente.

—Confío en ti y sé lo fuerte que eres, puede que seas la persona más fuerte de aquí, Shawna —entona él.

—Entonces, ¿cuál es el maldito problema? —inquiero elevando la voz.

— ¡Tengo miedo, Shawna! —grita Ivor haciendo que sus ojos destellen. Visiblemente deja caer sus hombros y respira profundo—. Tengo miedo de perderte una segunda vez. Si ocasionamos que tus recuerdos vuelvan abruptamente puede que no lo soportes, puede que tus poderes se revelen y no puedas controlarlos —se acerca un poco a mí—. No tienes ni la más remota idea de lo que eres capaz de hacer, Shawna. Eres más fuerte que antes, ya que en esta vida tu magia es natural y no prestada —explica.

—Es un riesgo que debo correr —entono calmadamente—. No podemos dejar que Tristán siga destruyendo vidas por gusto o por despecho. No me sentiría bien conmigo misma si dejo que siga, si dejo que lastime a alguien más —trato de razonar con él.

—Yo no podría vivir conmigo mismo si… —comienza.

—Si algo me pasara —concluyo por él, conforme me voy acercando—. Pero es mi decisión y no podrás impedirme que haga esto —al llegar a él lo tomo de las manos—. Te necesito a mi lado, necesito que estés tomando mi mano en todo momento, Ivor. Te necesito —termino en un murmuro.

—Te gusta por, y, la amas a pesar de —esboza y, lo miro confundida ya que eso era algo decía mi madre.

—Eso lo decía mi madre —entono.

—Lo sé, y quizás no lo entendía del todo hasta este momento —manifiesta él.

—Entonces, ¿haremos esto? —nos interrumpe Parry. Luego de dejar escapar el aire de los pulmones, Ivor lo mira y asiente.

—Lo haremos —afirma.

—Bien —digo — ¿Qué es lo que hay que hacer? —pude escuchar el gruñido que se escapó de la garganta de Ivor al escucharme.

—Ni siquiera sabes los detalles. Esto es increíble. Estabas discutiendo por algo de lo que no tienes idea —se queja al tiempo que se aleja de mí y se acerca a su whisky.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.