Jake Porter y el Legado de los Horrocruxes

Capítulo 12. El Chismógrafo de Hogwarts

En Hogwarts, como en muchos otros colegios no mágicos, había una extensa red de chismes, tan profunda y tan antigua como el mismo colegio, sin embargo, las últimas generaciones habían traído, y fundado, para quedarse el fanzine mágico El Chismógrafo de Hogwarts, en él se relataban todos los chismes, dimes y diretes, las peleas o disputas, las parejas doradas a las que todos los novios y novias aspiraban a ser, incluso, en sus últimos número, el chorrocientos, había publicado un par de columnas sobre la nueva modalidad de la copa de Quidditch de Hogwarts, así como la relación de los estudiantes de nuevo ingreso y en qué Casa quedaron, la razón del cambio de la modalidad de la copa de Quidditch, si hubiera habido otros fanzines, hubiera sido un boom mediático.

Había dos noticias (chismes) que habían hecho que todo estudiante quisiera tener un número específico del Chismógrafo de Hogwarts, ambos tenían que ver con Tracey Didge, del tercer curso de la Casa de los Cuervos, del turno vespertino. El Fanzine narraba lo siguiente, sobre la disputa por la Primera Posición de Cazadora del equipo:

Cazadora celeste vs. Cazadora granate

Como es bien sabido, en las últimas semanas se han estado preparando todos los alumnos jugadores y amantes del deporte para la nueva modalidad de la Copa de Quidditch, una en la que no se compite por el honor y la gloria de la Casa que se representa, sino por el honor y la gloria de un equipo diverso, Multi-Casa.

Esta mañana, las alumnas, miembros del equipo diverso que dio pie a la fundación de esta nueva modalidad, la señorita Tracey Didge de la Casa Azul, y la señorita Wallace de la Casa Roja se disputaron la primera posición de Cazadora… ¿acaso el lector no sabe el razón por la que ellas son parte del equipo Multi-Casa fundador de la Copa de Quidditch con equipos Multi-Casa? Permítanme amables lectores, recordarlos y/o ponerlos en contexto: Ambas señoritas, de casas diferentes, se unieron al grupo que defendía al señor Constanza, un inocente Hufflepuff, de los abusos verbales de un Slytherin la noche de la Cena de bienvenida… perdonen el breve desvío del tema que hoy nos interesa.

Retomando, ambas señoritas que disputaron la primera posición de Cazadora de su equipo Multi-Casa, juegan dicha posición para su propia Casa: Cuervos contra Leones, Gryffindor contra Ravenclaw. Ambas señoritas endiosadas en esa posición jugando para sus propias Casas.

El partido por la pelea de la primera posición empezó con solo tres miembros del primer equipo Multi-Casa, las señoritas antes mencionadas y el señor Rocco Wallace, Gryffindor masculino, que juega la posición de Golpeador, por cierto, jugador muy admirado en dicha posición y muy apreciado en la Casa roja.

Rocco tachó esa última parte y puso punto final, el chiste del anonimato era vital para que el Fanzine siguiera vigente este ciclo escolar y los posteriores, ya luego él cedería la pluma a otro compañero. El muchacho se estiró un poco, e hizo tronar su cuello antes de continuar con la escritura:

Según informaron fuentes fiables, la intención era entrenar, conocer las dinámicas de juego de los tres jugadores mencionados, sin embargo, la competitividad, el orgullo y el deportivismo aventajó. No con facilidad se tuvo que guardar las bludger negra ya que intención había cambiado radicalmente. Lo que había empezado como un simple entrenamiento, terminó siendo el juego de la semana, con espectadores y apuestas de los otros jugadores que entrenaban para la nueva temporada de Quidditch.

La quaffle fue suelta por el señor Wallace, atajó la señorita Wallace a una velocidad 0 a cincuenta kilómetros por hora en tres segundos, sin embargo, la avezada señorita Didge cerró rápidamente la distancia, su velocidad y experiencia en la posición le dieron la ventaja. Pero la pasión y determinación de la señorita Wallace no la dejó quedarse atrás.

Fueron los cuarenta y cinco minutos más intensos en el campo, quita, pon, arrebata, arrasa, rebasa. El orgullo azul y el rojo no se hicieron esperar entre los alumnos, en las apuestas la señorita de Ravenclaw tenía la ventaja del 51% contra el 49% de la señorita de Gryffindor, pero más tardaban en apuntar los cambios de las apuestas, que en suceder el cambio de manos de la quaffle roja en el campo.

La Quaffle era la pelota caliente en el campo, la más deseada por las jugadoras, las Snitch Dorada en la caja envidió tanto deseo y búsqueda por sus hermana la pesada roja. Ninguna jugadora cedió terreno, al menos no conscientemente, bastaba un pequeño descuido para que la contraria tomara ventaja.

Pero cuarenta y cinco minutos intensos de competencia no tardaron en cobrar factura, y eso que era una disputa a muerte súbita (¡imaginen un partido en regla!), un solo gol anotado hubiera coronado a la autora como la Cazadora de la Primera Posición, pero ninguna dio su brazo a torcer, ninguna quería ser la segunda de la otra. El sudor brillaba por la piel expuesta, la tensión y el cansancio eran tan palpables que se podría cortar con una navaja.

–Dulce de calabaza. -se oyó el tono amortiguado de la voz de Roni.

Rocco cerró el cuaderno tan pronto vio la esbelta figura de su hermana cruzar el umbral de la puerta, sintiendo casi un microinfarto de la emoción de que podría ser atrapado escribiendo la nota de la semana del Fanzine, del Chismógrafo de Hogwarts, en medio de la Sala Común de Gryffindor, por nadie más que por su propia hermana.



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En el texto hay: hogwarts, magos negros

Editado: 20.01.2025

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