-"Sabemos el peligro que corremos trayendo a una niña aquí, y lo que puede pasar si se excede el tiempo de estancia"- se quejaba Spider-man -"¿pero nos importa?, ¡No!, igual la trajimos con nosotros, todos saben que una taberna no es un lugar para niños, ¿pero escuchamos a la razón?, ¡Tampoco!, vamos a llevárnosla, metamosla en la boca del lobo, ¿es que me nadie me escucha acaso?"-
-"¿Es que jamas te callas?"- Pregunto Merida con un muy notorio fastidio.
-"¡De verdad chaval!, os quejáis mas que una solterona"- termino de decir Diego, conteniendo el impulso de amordazarlo con su propia telaraña.
-"No le sucederá nada, esta con nosotros ' idiot de première classe' "- dijo Erik intentando mantener la calma, lo cual, si hemos de ser sinceros, jamas a sido su fuerte.
-"¡Oye!, ¡cuidado 'dos caras'!, mi paciencia tiene su limite"- sentencio el muchacho del leotardo, pero sin obtener los resultados esperados.
-"¡también la nuestra!, así que por lo que mas quieras, ¡Cállate!"- dijo finalmente Silk, mostrandole su puño a su contra parte masculina, logrando que este se retirada un poco, pero no que se callada.
-"¡Hey!, ¡tampoco es para tanto!"- menciono con una voz mucho mas aguda y cautelosa - "¿por que la violencia?, ¡Hablando se entiende la gente!"-
-"sabes, en los comics eso era gracioso, y de ayuda para entender la historia,"- agrego Lisbeth viendo al susodicho- "¡pero con tigo en persona...!, ¡Bueno!, ¿has intentado dormir con un perico?, ¡así de irritante eres!"
-"¡Ja!, ¡¿un perico?!"- soltó entre risas Jack -" ¡Diras un mosquito!, ¡o de plano una chicharra!"-
-"¡Es que no lo entienden!, ¿verdad?"- soltó Spider-man, casi al borde del llanto- "¡Hay buenas razones para que ella no este aquí!, ¿por que no la trajo Tony nunca con el si no?"-
-"¡Un momento!"- dijo Lisbeth deteniéndose de golpe- "¿mi hermano ya había venido aquí?"-
-"¡Si!, barias veces, prácticamente vivía aquí"- dijo tranquila mente Spider-man, que si hubiese prestado alguna atención, se hubiera dado cuenta de que sus compañeros lo estaban viendo con el ceño fruncido, y haciéndole señas de que, si le era posible, o por medio de algún prodigio, cerrara esa claraboya vociferante que tenia por boca antes de que se la cerraran.
-"¿en serio?, ¿por eso es que se hizo tan buen amigo de todos ustedes?"- pregunto ilusionada la pequeña.
-"¡si!, y por eso lo mataron, ¿o creíste que el incendio fue un accidente?"- Dijo finalmente el trepa muros, para luego caer en cuenta de la tremenda imprudencia que había cometido. Apenas recupero el raciocinio, suponiendo que alguna vez lo halla tenido en primer lugar, Spider-man se coloco las manos en la boca a la vez que abrió los ojos tanto como pudo (cosa que se noto claramente en su mascara) , y por fin cerro la boca, solo que ya era tarde, el daño ya estaba hecho.
-"¡¿Como que lo mataron?!"- dijo la chica indignada- "¡¿que saben que no me están diciendo?!"- agrego, molesta, y viendo de manera acusadora a todos cuanto le rodeaban, mientras que las lagrimas comenzaban a correr por su rostro.
Tal vez por condolencia, tal vez por que ya daba igual, o simplemente por su naturaleza inconsciente, pero fuese por lo que fuese, Spider- man se acerco a la niña, y sin mas que hacer, simplemente le dijo lo que el creía saber.
-"Lisbeth"- comenzó a hablar, ¡De nuevo!- "esa noche, el incendio, al parecer lo provoco Jhony, tu hermano se había entretenido leyendo aquella tarde, no presto atención al tiempo que llevaba usando el reloj, y habrio la brecha entre nuestros mundos, justo cuando Jhony e Hippo estaban en medio de un duelo, ellos dos salieron, la cuestión se complico, salieron otros tantos a los que el profesor Ángel y Tony no les caían bien, y una cosa yebo a otra, y bueno... Jhony intento ayudarlo, pero en el proceso causo el incendio, y antes de que nosotros llegáramos, ya se había rostisado"- concluyo el Arácnido.
La niña quedo en shock por un momento, mientras que los demás se debatían en que hacer ahora, si descabezar al seudo- héroe, o ensartarlo, o congelarlo, o aplastarlo como a un insecto, antes de que dijera alguna otra cosa y empeorara, de ser eso posible, la ya muy lamentable situación. El asunto se había tornado evidente mente incomodo, pues solo estaban ahí parados, en medio del bulevar, con todos los que iban pasando por ahí viéndolos con extrañeza, en especial los que notaban que Lisbeth no era de ese mundo, hasta que finalmente la muchacha comenzó a caminar de nuevo, y mientras lo hacia, pregunto a sus acompañantes: "¿como es que ellos salieron de aquí?, de hecho, ¿como es que alguien puede entrar o salir de cualquiera de los dos mundos?", a lo cual Spider-man paso a responderle.