–Joder, chicos, no abre –suelta estando asustado.
–Venga, deja de fingir, Mariano, solo lo haces para asustarnos –comento acercándome para abrirla pero; en efecto, estaba cerrada– Es verdad, no abre –les digo, ahora todos nos miramos con miedo.
–Tranquilos, chicos, ya después se volverá a abrir para salir; vamos a preparar todo para jugar –dice Jeison y todos asentimos.
Empezamos a colocar velas por todos lados; cuando terminamos, colocamos un alfabeto con un vaso en el medio. Todos nos sentamos alrededor y nos tomamos las manos.
–Al espíritu que está en esta casa invocamos, oh, ven a nosotros, te invocamos, si estás entre nosotros danos una señal –recitamos todos juntos. Pasó un rato, pero no pasaba nada.
–Esto es una chorrada –digo antes de levantarme.
En ese momento el vaso se empezó a mover; formando la palabra "Estoy Aquí". Eso me puso la piel de gallina; ahora sí que tenía miedo de verdad.