Juegos Prohibidos

Capítulo 24

¿Matrimonio? ¿Amantes? ¿Amor u odio? ¿Mentiras? ¿En qué clase de serie dramática se convirtió vi vida? Ryan entra a la sala varios minutos después que yo. Evito como nunca su mirada mientras finjo dulzura con Ómar, le daré a su padre lo que Ryan quiere para él y es poder estar juntos antes todos, quiero que vea lo buena acompañante que puedo ser públicamente

 

— Hijo ya es hora — evito una vez más eso que se tornan más prohibidos con el paso del tiempo.

 

Con el rabillo de ojo vi cómo se acerca a la rubia teñida, lo escuchaba hablar a lo lejos, diciéndole cuanto la amaba, quería reír a carcajadas porque sentía tan falsos los sentimientos con los que lo decía, luego medio presencie como sacaba una cajita de terciopelo rojo pidiéndole que se casara con él de rodillas, cuando abrió la pequeña caja su mirada viajo a mí, odiaba que me volviera a ver justo en ese momento, estábamos jugando bajo, no rompí el contacto murmurándole a Ómar que me disculpara, hablándole para que vieran en los polos opuestos donde estábamos. Acariciándole el pecho.

 

Camine fuera de la sala al borde de las lágrimas, destruyéndome cuando nadie más podía ver lo que en realidad estaba sucediendo en esa sala, escuchado como todos felicitaban a los futuros esposos, jale de mis cabellos evitándome romper algún jarrón costoso por liberar frustración, me deje caer en las escaleras obligándome a recordar quien era, pero había mucho rondando mi mente ¿Cuál era la verdad en sus palabras? ¿Me amaba a mi o a ella? ¡No seas estúpida Ava Kylie se casará con ella no contigo! Claro que la ha elegido a ella. Me estaba volviendo loca finalmente. Ryan era el culpable de descarrilar mi tren que iba tan bien sin que estuviera cerca para distraerme.

 

Me incorpore para subir las escaleras escuchado alguien acercarse, lágrimas de rabia se deslizan por mis mejillas mientras las subo, soy una niña haciendo un berrinche, castigada con lo que más quiere. Arriba me apoyo en las barandas agradeciendo lo oscuro de este sitio de la mansión ¡Demonios! Que tonta fui, que tonta soy ¿Por qué una parte de mi seguía esperanzada con Ryan? Se supone que terminaría cuando se marchó.

 

Inicio a caminar de un lado totalmente desesperada, él se casará con ella. Vuelvo apoyarme en las barandas esta vez con la cabeza gacha, el cabello formando una cortina oscura, me obligo a calmarme porque esto yo lo sabía desde un inicio, jamás seria yo la que estuviese en el puesto de Ingrid, yo mate a su hermana y estoy tratando de hacer lo mismo con su padre ¿Cómo podría estar con él? ¿Cómo podría con la culpa teniéndolo conmigo? Debo aceptar la vida, no podía tenerlo todo, era una cosa o la otra ¿Quiénes podrían estar juntos con ese abismo separándoles? Una mano alrededor de mi cintura me hace sobresaltar

 

— Ava Kylie… — es ahí donde no sé si tendré la fuerza para apartarlo — Perdóname… — cierro los ojos fuertemente. Aquí vamos de nuevo destruyéndome. Aquí vamos de nuevo, lanzándome al abismo.

 

— Cállate, yo tengo la culpa.

 

Intento pasar de él, para bajar las escaleras y fingir que estoy súper feliz por la boda, pero las cosas nunca salen como las planeas, toma mi brazo deteniéndome, me pega a su cuerpo, rodeando mi cintura para mantenerme cerca, intenta besarme, pero aparto el rostro no lo quiero ahora, suficiente herida estoy. Y no podré ser Liee si me besa. Aunque no necesitemos del otro para comprobar que aún sigue esa tensión entre nosotros, que es mucha la pasión y que eso solo es un error de matrimonio o es lo que quiero creer, no puedo. No puedo estar con Ryan. Para mi suerte Sean aparece y es la primera vez que soy feliz que sea un desgraciado inoportuno

 

—  Chicos deberían tener más cuidado, pude haber sido cualquier otro — empujo una vez más en la noche a Ryan, lo veo antes de bajar las escaleras corriendo prácticamente.

 

+

 

Me dejo caer en la cama cubriendo mi rostro con la almohada, ahogando un grito de frustración, mi puto mundo está de cabeza una vez más, esto solo estaba empeorando, todavía no era Liee preparada para pelear contra mi peor enemigo. Luego de todo eso añádanle que cuando venía de la maldita fiesta de compromiso recibí una llamada de Matt, donde me dijo que la policía lo está siguiendo en las vueltas que hacía ¡Demonios! Yo necesitaba los abrazos de Dan o Andrien eso que me decían que todo estaría bien y donde me sentía segura, protegida; ese era el asunto no tenía nada después de que parezca lo contrario. Estaba sola para enfrentar la realidad.

 

El timbre de casa suena haciendo eco por el lugar, cubro más mi rostro, no queriendo abrir a nadie, pero este volvió a sonar desesperadas ocasiones, más problemas solo pude pensar, no quería abrirles la puerta a los problemas, ya eran demasiados. Cansada me incorpore, limpiando mis ojos en el camino para que no se notase que lloraba como una niñita; abro la puerta y me arrepiento de haberlo hecho al encontrar a Matt con rostro de perrito abandonado, intento cerrar la puerta en su frente, pero no lo logro, me debilita esto, que este corriendo de la policía.

 

— Liee… — como no logro mantenerlo fuera escapo hacia mi habitación corriendo, tomo lugar en la cama abrazando mis rodillas llorando, no quiero ver a nadie que me esté causando daño en estos momentos. Es mi culpa. Pero no quiero verlo.



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En el texto hay: mentiras, amor, dinero

Editado: 26.01.2023

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