CAPITULO 22

MIA RICCI

Llego del colegio cansada hoy ha sido un día cansado desde que me desperté hasta ahora en la mañana pensé que en la mañana mis padres no estaban en casa pero me lleve con la sorpresa de que justo el dia que Lucas se queda a dormir mis padres tienen que estar qué suerte tengo.

-No se cómo lo has conquistado, pero sigue asi que será muy bueno para la empresa-fueron las palabras de mi madre antes de irme al colegio ¿malas? Si ¿me hizo sentir mal? Si, pero trate de ocultar bien mi dolor para no demostrar que me hizo sentir mal.

Cuando Lucas vino a recogerme todo estaba perfecto se portó como siempre el chico alegre el que me gusta, pero en la hora de receso se portó serio, solo salió del salón sin darme alguna explicación solo se fue apresurado y no apareció hasta casi finales del receso, pero regreso más raro que antes su comportamiento era como preocupado.

Pensaba esperarlo hasta que termine sus prácticas pero Julián me mando mensaje diciendo que me esperaba en la casa, me pareció raro porque el no acostumbra a ir a la casa después de lo que paso con mis papas.

-Aquí me tienes ¿Para que soy buena? -le pregunto a mi hermano que está sentando en el sillón.

-Buenas tardes pequeña-me dice sonriéndome y abrazándome fuerte.

-Si sabes que me estas ahogando-le digo y me suelta.

-Sabes desde que regrese no hemos tenido nuestro día de hermanos¿ Qué te parece si hoy día tenemos nuestra tarde de hermanos?-me pregunta.

-Me encantaría ya te extraño-le digo abrazándolo.

-Y yo a ti pequeña-me dice-que te parece si vamos al parque de diversiones solo tu y yo, como cuando éramos pequeños.

-Vamos-le digo emocionada.

-Nada de celulares el día de hoy-me dice quitándome mi celular sin poder avisar a nadie.

Cuando llegamos al parque de diversiones no hay ninguna persona al parecer el pago para que solo estuviéramos los dos divirtiéndonos y asi fue nos divertimos como cuando éramos pequeños corrimos, gritamos, nos reímos ,un poco más también llorábamos pero hoy no es un día feliz para poder estar triste.

-¿Ahora qué quieres hacer?-me pregunta cuando salimos del parque.

-Vamos al cine-le digo emocionada-como cuando éramos pequeños y nos íbamos después de que nuestro padres nos castigaran-le digo y el me sonríe.

Vamos al cine y entramos a ver una película de terror los dos siempre hemos sido fanáticos en la película de terror claro que después tenía miedo de ir al baño sola y por eso lo tenía a él levantándolo en media noche para que me acompañe.

-¿Qué te parece si vamos a mi departamento y pedimos algo para comer?-me dice cuando salimos de ver la película.

-¿Puede ser Pizza?-le pregunto

-Tu no cambias siempre con tu pizza-me dice y maneja hasta su departamento.

-¿Me quedare a dormir ahí?-le pregunto.

-Si es lo que quieres o si no te puedo llevar a la casa después de cenar-me dice.

-Vale ya veremos-le digo.

Maneja hasta la casa haciéndome algunas bromas o molestando con Lucas, es bonito volver a pasar tiempo con el siento que fue hace mucho que no pasamos un momento asi solo los dos juntos, un momento donde me sentía segura sin miedo de que venga mi madre y nos castigue porque si ella aparecía y me quería castigar él se metía para defenderme. Llegamos a su departamento y hace el pedido de pizza esperamos que llegue cuando llega comenzamos a comer como dos leones hambrientos.

-¿Sabes porque te pedí pasar esta tarde contigo?-me pregunta cuando terminamos.

-Que no era porque me extrañabas-le digo y este se ríe.

-O si claro que si pequeña pero también fue por otro motivo-me dice-te acuerdas que cuando llegue dije que regrese por dos motivos-muevo la cabeza afirmándolo-uno era el trabajo que tenía acá que ya se está acabando y el otro te lo pienso decir dentro de un momento.

-¿Y porque no ahora?

-Porque primero necesito hablarte de la razón de porque me fui hace cinco años-me dice con tristeza.

-Tranquilo que tampoco te estoy pidiendo alguna explicación me imagino que tenías tus razones-le digo.

-Ohhh pequeña claro que tenía mis razones y más de lo que te imaginas-me dice triste.

-No es necesario que me cuentes.

-Cuando yo tenía 17 años conocí a una chica se llamaba Rachel-me dice y se rie con tristeza como si recordarla le diera mucha pena-fue de casualidad asi como en las películas románticas donde te chocas con esa persona y te gusta como si fuera amor a primera vista, a mí me paso eso.

-Cuando la mire fue como si estuviera viendo a la chica más bonita que había conocido alguna vez y creo que a ella le paso lo mismo que a mi ella me sonrió con timidez-me dice triste-no te imaginas su sonrisa era la más hermosa, nos disculpamos y cada uno continuo con su camino como si no hubiera pasado nada pensé que no la volvería a ver pero que mira que irónica es la vida que me la volvió a poner en mi camino.

-Cuando fui a la casa de un amigo la encontré trabajando ahí, ella trabajaba duro para poder pagar sus estudios desde ese dia iba seguido a la casa de ese amigo para poder verla-me dice sonriendo triste-nos hicimos más cercano algunas veces la acompañaba a su casa o la invitaba a salir una de esas salidas le dije para estar, me acepto te juro que fui muy feliz ese momento creo que fue uno de los momentos más felices que viví.

-Todo iba perfecto nuestra relación era perfecta ella me complementaba en todo, hasta le había hablado de ti le dije que eras hermosa niña-me dice agarrándome la mano-Pero todo se jodío cuando un día nuestros padres se enteraron sabes cómo son ellos que siempre tienen en la mente que debemos estar con personas de nuestro mismo nivel.

-¡Mierda! Te lo juro me hubiera gustado no tener dinero con tal de estar con ella pero ya vez como fueron las cosas, cuando nuestros padres se enteraron me enceraron no sé si te acuerdas que hubo una temporada que no salía tan solo para ir al colegio-me dice y asiento-bueno ya estaba encerrado y ellos aprovecharon para ir donde esta ella y decirle cosas que nunca me hubiera gustado que la dijeran, Hasta le habían ofrecido dinero con tal de que se aleje de mí.