MIA RICCI
-Fue un gusto tenerla en este colegio señorita Ricci-dice el director estirando la mano.
-Gracias director-le digo, este colegio me enseño muchas cosas y no solo hablo de lo académico sino me refiero a que me enseño en quienes son mis amigos, que hay personas que pueden ser muy crueles pero lo que más me enseño fue a amar porque amo con todas mis fuerzas a Lucas, guardo todos los papeles me pase toda la mañana sacando estos papeles para hacer el intercambio de colegio y poder terminar halla en Italia.
Salgo de la oficina, no hay ningún alumno y lo agradezco porque me canse las miradas de lástima o de burla que me dan. Ver a Lucas es muy difícil lo veo mal y me preocupa, pero me hago la fuerte. Pienso ir a otro lugar antes de ir a la casa necesito cerrar todos los ciclos.
-Hola-le digo cuando estoy sentada a su frente.
-¿Qué haces aquí?-me responde.
-Quería despedirme-le digo-Me voy a Italia.
-¿Tu padre está de acuerdo?-me pregunta.
-Todavía no lo sabe-le digo.
-Eres una malagradecida después de todo lo hemos hecho por ti tu nos pagas asi-me dice molesta.
-Solo vine a despedirme-le digo-te acuerdas cuando un tiempo atrás te conté sobre mi sueño: el arte, la pintura-le digo sonriendo con tristeza-Me hubiera gustado que me llevaras a museos, galerías o me inscribieras en algún curso para poder mejorar.
-Sabes lo que pienso de ese sueño estúpido-me dice
-La pintura me ayudo a descubrir muchas cosas, a que vuele mi imaginación y sobre todo a olvidarme de este mundo y entrar a mi propio mundo donde me imagino que tengo a una vida perfecta, aunque sea de mentira-le digo limpiando la lagrima que se me escapo-Ahora solo quiero imaginarme como hubiera sido si mis padres fueran diferentes. Sabes siempre quise saber que se siente que te diga tu madre ¡Que hermosa estas! O mejor aún ¡Estoy orgullosa de ti!
-Mia sabes que todo lo que hicimos fue por el bien de ustedes-me dice.
-¿Enserio?-le pregunto de forma irónica-Yo nunca te pedí tener todo este dinero yo solo quería escuchar de tus consejos ,tus palabras de cariño o un abrazo-le digo llorando-Mamá lo único que yo quería era que me quisieras que te sintieras orgullosa de mi pero nunca paso.
-Mia sabemos que nosotros como padres cometimos muchos errores-me dice llorando-no nos merecemos a tener unos hijos como ustedes y te pido que me perdones nunca me di cuenta del error que cometí siempre pensé que hacia lo mejor pero ahora me doy cuenta que estaba equivocada, ya perdí a mi hijo ahora no quiero perder a mi hija.
-No crees que es demasiado tarde mamá-le digo-necesito irme de este lugar tengo muchas heridas que sanar, muchos recuerdos malos que olvidar, ¿Sabes porque Julián nunca te quiso denunciar? -le pregunto-Nunca te denuncio porque te quería a pesar de todo lo que habías hecho el aun te seguía queriendo.
-¿Tu no me quieres? Por eso me denunciaste-me dice.
-Mamá créeme que yo a ti te quiero demasiado sabes cuantas veces he buscado la manera de poder odiarte-le digo-Encontré mil motivos para odiarte pero creía que no era suficiente igual te iba a seguir queriendo-ella llora tratando de limpiarse las lágrimas-Pero te denuncie porque eso no se puede quedar asi tienes que entender que lo que hiciste está mal, todas las personas somos iguales no importa nuestro nivel socioeconómico de que vale que tenga un montón de dinero si al final no entiendes lo valioso que es pasar un momento en familia porque eso no sucede siempre no sabes cuando alguien nos puede faltar.
-Recién me doy cuenta-me dice- ¿Cuándo te vas? -me pregunta.
-Hoy en la tarde-le digo-Cuídate mucha mamá, te perdono.
-Hija quédate-me dice llorando.
-No puedo mamá-le digo parándome-Hasta luego
-Te quiero y si estoy orgullosa de ti mi niña-me dice con una sonrisa triste.
-Gracias mamá-le digo despidiéndome llorando porque no sé si la volveré a ver, pero lo que recordare siempre van a ser esas últimas palabras lo que siempre quise escuchar “Estoy orgullosa de ti”.
Tomo un taxi trato de tranquilizarme en el camino. Cuando llego a mi casa espero no encontrarme con nadie, pero parece que mi suerte no está de mi lado.
-Mia se que lo estas pasando muy mal pero tenemos que hablar-me dice la mamá de Lucas esperándome en la puerta.
-Señora con todo el respeto que se merece no quiero hablar en estos momentos-le digo.
-Si lose pero mi hijo lo esta pasando muy mal-me dice,me quiero reir pero no lo hago por respeto que le tengo.
-¿Y cree que yo no lo estoy pasando?-le pregunto.
-Si lose pero mi hijo esta arrepentido de hacer esa reto-me dice.
-¿Usted también lo sabia?-le pregunto
-Si era mi hijo tenia que apoyarlo-me dice.
-Claro apoyarlo a que jueguen con el sentimientos de otros-le digo-No se preocupe señora que hoy mismo me voy y talvez asi su hijo se pueda olvidar de mi.
-Mi hijo no quiere olvidarse de ti-me dice.
-No hay de otra-le digo-le tengo mucho cariño y le agradesco porque me trataba antes.
-Mia yo también te aprecio mucho-me dice preocupada-se están haciendo daño los dos.
-No, justo me voy porque ya no quiero sufrir más-le digo-quiero sanar mis heridas.
-Si crees que es lo mejor para ti entiendo-me dice triste-yo me encargare de que mi hijo estea bien,cuídate mucho.
-Igualmente cuidese mucho-le digo y comienzo a caminar hacia la puera de mi casa dejándola parada ahí.
-Cuidelo no quiero que estea triste por mi culpa-le digo volteando a verla ella me sonríe y asiente.
Entro a la casa pero hoy no es mi dia de suerte.
-¿Qué crees que haces Mia?-dice papá desde el sillón parece que paso una mala noche.
-Entrando a la casa-le digo.
-Quita esa denuncia-dice y sé que se refiere a mamá
-No lo pienso hacer-le digo-Ella cometió un error y tiene que pagarlo.
-Mia te hablo enserio quita esa denuncia-me dice con voz de advertencia.
-Ya te dije que no lo voy a hacer-le digo-Permiso tengo que irme a terminar de alistar maletas-voy a subir las escaleras, pero siento un tiro en mi brazo.
-¿A dónde te vas?-me pregunta molesto.
-A Italia lejos de ustedes-le digo.
-No tú te quedas acá-dice-tienes que ayudar con lo de tu mamá.
-No pienso hacer nada-le digo y veo como se enoja.
-No pienso darte plata-me dice.
-No lo necesito-le digo soltándome de su agarre y subiendo a mi cuarto.
Pienso buscar un trabajo quiero pagarme mis estudios y el lugar donde me voy a quedar, pienso ganarme todo con mi propio esfuerzo no quiero apoyo de nadie. Me falta guardar unas cosas comienzo a meter todo en las maletas. Tengo dos portarretratos uno con Julián y otro con Lucas me lo pienso llevar, aunque sea para recordar lo feliz que fui alguna vez.
No sé cuánto tiempo me la paso guardando todas las cosas. Todavía no estoy segura de cuándo regresare o si algún día regresare, pero si algún día lo hago será cuando haya cumplido mis sueños.
-Señorita abajo se encuentra la señorita Miranda dice que la quiere ver-me dice la mucama.
-Déjala pasar-le digo, se va y la que entra es Miranda viendo todo mi cuarto.
-De verdad te vas a ir-me dice triste.
-Si hoy es mi vuelo-le digo.
-Puedo acompañarte-me dice.
-Sabes que va a hacer muy difícil despedirme-le digo-prefiero ir sola.
-Al menos déjame estar contigo hasta que te vayas al aeropuerto-me dice llorando.
-No llores más-le digo acercándome a abrazarla-Voy a estar bien y pienso estar en comunicación contigo.
-Me lo prometes-me dice y asiento.
-Ahora ayúdame a guardar mis últimas cosas-le digo, me comienza a ayudar guardando las cosas que falta me rio cuando hace cosas chistosas tratando de animarme.
-Señorita abajo está el taxi-me dice la mucama.
-Gracias ya voy-le digo-bueno llego el momento.
-Cuídate mucho y siempre ten en cuenta que me tendrás para ti-me dice triste.
-Si igualmente tu cualquier cosa me llamas-le digo.
-Toma-me dice dándome un brazalete con la mitad de un corazón.
-Yo tengo la otra mitad-me dice mostrándome su muñeca-es para que siempre nos tengamos presentes.
Me ayuda a bajar todas las maletas, ella sale y aprovecho para despedirme de mi papá que sique sentando en el sillón.
-Cuídate papá-le digo despidiéndome siento como se quiebra mi voz.
-Mia sabes que te puedes quedar-me dice y niego.
-No puedo-le digo-Ya tengo decidido todo.
-Mia ¿Por qué haces esto? -me pregunta.
-Porque necesito estar bien y no lo voy a estar si me quedo aquí-le digo-papá entiéndeme tengo recuerdos dolorosos que quiero olvidar.
-¿has pensando en nosotros?-me pregunta-En cómo nos sentiríamos si te vas.
-Papá siempre he pensado en ustedes todo lo que yo siempre hacia era por ustedes porque quería impresionarlos-le digo botando una lagrima-pero ahora me toco pensar en mí.
-Pero …-lo detengo antes de que siga hablando.
-Me tengo que ir se me hace tarde-le digo abrazandolo y saliendo dejándolo ahí.
Miranda esta parada al costado del taxi con lágrimas en los ojos.
-Cuídate-me dice llorando.
-Cuídate-le digo abrazándola-te quiero mucho.
Cuando pensaba subir al taxi veo bajar a Sebastián de su carro y caminar hacia nosotras.
-Sé que no me quieres ver-me dice acercándose-Pero necesito despedirme de mi amiga-me dice triste-Perdóname sé que como tu amigo debí decirte, pero no podía traicionar a Lucas él es como mi hermano, él te ama mucho no sabes lo que sufría por no poder contarte de ese reto, tenía mucho miedo de perderte porque tú eras su cable tierra cuando te conoció a fondo él se arrepintió y termino de ese reto días después de que fueran enamorados oficialmente.
-Me quedo claro-le digo-Y gracias por ser ese amigo incondicional que tiene Lucas sé que siempre vas a estar para el y te lo agradezco quiero que lo cuides mucho y sobre todo que le ayudes en este momento, lo he visto mal y yo no quiero eso.
-Entonces quédate-me dice-Él va a volver a estar bien si te quedas.
-El va a estar bien, pero yo no-le digo-tengo que elegirme a mí siempre he pensado en otros ahora ya no como ya dije necesito sanar mis heridas para que yo vuelva a estar bien.
-Entonces cuídate mucho Mia-me dice abrazándome.
-Cuidate-le devuelvo el abrazo-Y cuido mucho de Lucas y Miranda ha no vayas a hacer sufrir a mi amiga que te la vez conmigo.
-Suerte-me dice triste. Me subo al taxi y por el retrovisor puedo ver a Sebastián abrazando a Miranda mientras que ella llora cuando el carro se aleja, no aguanto más y también lloro voy a dejar atrás todo mi recuerdo, amigos y sobre todo al amor de mi vida. Cuando llego me voy a dejar mi pasaporte y mi boleto luego me siento a esperar a que llamen para poder abordar al avión. Veo a varias personas despidiéndose, a parejas abrazadas o familia riéndose.
-Mia-escucho que dicen atrás mío cuando volteo me encuentro con Lucas tiene una mirada rota.
-¿Qué haces aquí?-le digo.
-Si no te voy a hacer cambiar de opinión al menos déjame despedirme-me dice veo la tristeza en sus ojos la misma tristeza que siento yo.
-No hagas esto difícil-le digo quebrándose mi voz.
-Te acuerdas que me prometiste que siempre me ibas a querer a pesar de cualquier cosa-me dice y si me acuerdo estábamos en su cuarto cuando lo prometí.
-Si sabes que la persona que te hizo esa promesa con la persona que tienes ahora enfrente son diferentes-le digo y veo como le duele.
-Mia yo te amo-me dice agarrándome la cara no me alejo porque quiero recordar su ultimo toque-No sé si pueda seguir sin ti.
-Si puedes-le digo y veo como se le escapa las lágrimas pongo mis manos limpiando sus lágrimas-Tu eres fuerte vas a seguir adelante.
-No lo soy si tu no estas a mi lado-dice él.
-Te vas a tener que acostumbrar-le digo-Cumple tus sueños que yo voy a cumplir los míos.
-Tu eres uno de mis sueños-me dice.
-Pues ahora me he convertido en tu sueño imposible-le digo y se me escapa una lagrima-Quiero verte en la tele cuando lo prenda que seas un gran futbolista.
-Mia no me hagas esto-me dice llorando-Te amo
-Yo también te amo-le digo juntando nuestra frente-pero necesito sanar todas mis heridas y no lo voy a hacer si me quedo acá.
-Perdóname-me dice llorando.
-Te perdono, pero no me pidas que olvide-le digo.
-Al menos recibe esto-me dice agarrando mi mano y poniendo el collar que él me regalo-Es para que siempre me recuerdes, sé que te hice daño y no sabes cuánto me arrepiento, pero quiero que siempre que mires este collar recuerdes solamente lo bueno que vivimos y te presente que siempre tienes aquí al hombre que más te ama-me dice llorando siento como se me escapa las lágrimas sin poder controlarlo.
Los altavoces comienzan a anunciar los vuelos que van a salir y entre esos está el mío Italia.
-Me tengo que ir-le digo queriéndome alejar, pero él niega se aferra a mi impidiéndome que me aleje.
-No por favor-me dice, lo beso es un beso con sabor a despedida quiero sentir sus labios antes irme porque no estoy segura sin alguna vez regresare y los volveré a probar.
-Cuídate mucho Lucas-le digo alejándome y caminando hacia donde tengo que ir para subir al avión. Siento su mirada, pero no me atrevo a voltear porque si lo hago no creo que seré capaz de irme y como dije tengo que irme para sanar.
Desde ahora tomaremos caminos diferentes y no estoy segura si el destino algún día me volverá poner en el mismo camino, pero ahora solamente quedara el recuerdo de lo que algún día fue nuestro amor.