El lugar está tranquilo, le pido a Katlyn que atienda la parte de arriba mientras yo me quedo sola abajo.
A eso de las 8:30 p.m. el lugar comienza a llenarse más.
Entre tanta gente que entra y sale, veo entrar a Brad.
—Hola, Cielo —dice Brad acercándose lo suficiente para hacer que yo baje la bandeja que tengo en las manos.
—Hola —digo y le doy un pequeño beso.
—¿Te irás conmigo?
—Quisiera, pero me toca conducir la Hummer, además salgo a las 3:00 a.m. es muy tarde para que te desvíes.
—No me importa a qué hora salgas, esperaría toda la noche si tuviera que hacerlo.
—Sé que lo harías, pero hoy no tienes que hacerlo.
—Está bien
Miro hacia la puerta y todos mis hermanos están entrando.
—Iré a buscar a Katlyn
—Bien —dice y me da otro beso
Subo y la encuentro limpiando una mesa.
—Hey, Dylan ya llegó
—Ya voy
Bajo y el lugar está mucho más lleno tanto que las otras chicas que están descansando tienen que ponerse a trabajar.
Me dirijo a la barra y le digo a la chica que está detrás que vaya a ayudar a las demás.
Me quedo detrás de la barra, porque puedo ver a todas las personas. Entre la multitud distingo a Roxy quien ya está coqueteando con los chicos de una mesa.
—Seis cervezas para la mesa de los chicos —dice Katlyn dejando su bandeja sobre la barra.
—Me llevas el conteo de las cervezas que ellos vayan tomando —digo mientras voy poniendo las cervezas en la bandeja.
—Cierto, deben conducir
—Exacto
—Tú manejarás la Hummer hoy ¿verdad?
—Sí
—Me dejas en mi casa, mi madre dice que debo acompañarla al aeropuerto por la mañana, después me iré a la universidad.
—Si me acuerdo, lo hago —bromeo
La noche pasa rápido y sin darnos cuenta ya son las 10:00 p.m. y a esa hora por fin podemos tomar un descanso.
Dejamos trabajando a las demás chicas, ya que el lugar está más tranquilo.
Nos vamos a la mesa de los chicos.
—Dennos espacio —digo
—No caben —dice Nathan
—Sí, sí cabemos —dice Katlyn
Aunque los chicos se acomodan solo hay espacio suficiente para una y se sienta Katlyn.
—Ven, Cielo —dice Brad
Me siento en su regazo y de inmediato percibo el olor a cerveza.
—¿Cuántas cervezas llevan?
—Creo que unas 12 —me responde Katlyn
—Zack, ¿cuántas llevas? —le pregunto al tiempo que le quito a Brad la cerveza que tiene en la mano y tomo de ella.
—Unas ocho
—No quiero que ninguno que vaya a conducir se emborrache y eso va contigo también, Brad.
—No lo haremos —me dice
—Eso espero
15 minutos después regresamos a trabajar.
No tenemos ni una hora de volver a trabajar cuando dos hombres borrachos comienzan a pelear y de inmediato el guardia de seguridad los saca del lugar.
Echo un vistazo a la mesa de los chicos y veo que Zack, Brad y Nathan aún están en sus cinco sentidos a diferencia de los demás que ya están bastantes “felices”.
Voy a su mesa y le pido a Brad que no tome más cervezas y a Zack le digo lo mismo.
Cuando el reloj da las 2:45 a.m. Brad se me acerca.
—Cielo, ya me voy, te veo mañana en clases.
—Hasta luego —digo dándole un beso —Sabes a cerveza
—Qué te puedo decir —dice y sonríe
Me dirijo a la barra donde está Katlyn y desde allí puedo ver a Brad que saliendo.
—¿Brad ya se va?
—Sí
—Mejor, así no se excede con el alcohol
Estoy a punto de responderle cuando veo que Brad sube a su carro y Roxy que está borracha también sube.