La semana pasa volando y ya es 14 de junio y la carrera de Brad.
Como todos los años, Katlyn es la primera en felicitarme prácticamente me levanta a golpes en la madrugada.
Bajo a despedirme de mis padres que ya se van en dirección al aeropuerto.
—¡Sky, Feliz cumpleaños! —me felicita Steven apenas me ve —Lamento no poder quedarme contigo hoy.
—Gracias, no te preocupes
—Tu regalo lo tiene tu madre
—Oh
—Ya viene, espérala
Me siento en uno de los taburetes de la cocina a esperar.
—¡Cariño, Feliz cumpleaños! —dice abrazándome y dándome un sobre pequeño.
—Gracias, ¿qué es esto?
—Tu regalo, ábrelo
Cuando abro el sobre me sorprendo por lo que estoy viendo.
—¿En serio?
—Sí, no es mucho —dice mi madre sonriendo
—¿Cuánto hay?
—5,000.00
—¿Cómo? ¿Y no es mucho?
—No
—Mamá, muchas gracias —digo volviéndola a abrazar y veo a Steven sonriendo.
—Lo sabías —le digo
—Por supuesto
—Gracias —lo abrazo también
—Para que compres tu carro
—Seguro
—Bueno, nos vemos dentro de tres días
—Adiós, que les vaya bien
Después que mis padres salen regreso a mi habitación y guardo el sobre del regalo en mi cajón.
Como son las 1:00 a.m. regreso a dormir, me acuesto al lado de Katlyn quien después de felicitarme siguió durmiendo.
El zumbido de mi celular me levanta, veo la pantalla y es Brad.
—Hola —digo sentándome
—Cielo, no puedo creer que estés durmiendo
—¿Por qué? No tengo nada que hacer tan temprano
—Hoy es un día muy importante
—Claro, es la carrera
—Sí, pero no, hoy es el cumpleaños de una chica a la admiro mucho desde el día que la vi por primera vez, es alguien que lo que no tiene en estatura lo tiene en intensidad, terquedad y…
—Oye, oye —lo interrumpo- ¿Cómo que intensidad y terquedad?
Lo escucho riendo suavemente.
—Y soy casi de tu tamaño —agrego
—Pero, también es alegre, divertida con mucha seguridad y sobre todo hermosa en fin llena de muchas cualidades que si empiezo a mencionar no podré terminar a tiempo.
Sonrío —Ha puesto a que tenemos tiempo y puedo escucharlas.
—No creo, tengo algo que hacer antes de la carrera, pero solo quería decirte… Feliz Cumpleaños
—Gracias
—Te prometo que después de la carrera te daré tu regalo que por cierto me tomó tiempo ya que no quisiste pedir nada.
—No creo haya sido tan difícil, solo un poco
—Sí, solo un poco
Katlyn se despierta.
—Nos vemos más tarde
—Nos vemos, Cielo
—¿Qué hora es? —pregunta Katlyn sentándose
—Como las 9:30 a.m. ¿por qué?
—¡Dylan! —exclama y sale de la cama rápidamente
—¿Qué sucede?
—Le dije que me despertara —dice y sale de la habitación
Mi habitación es la última del pasillo y la habitación de Nathan está en el medio de la mía y la de Dylan y aun así escucho a Katlyn.
—No me levantaste —le dice a Dylan
—Lo siento, me quedé dormido
—Sí, me di cuenta
—Dame 10 minutos
—Apúrate
Me voy al baño directamente y después de ponerme ropa cómoda bajo a la cocina porque sinceramente me muero de hambre.