Justifiquemos la diferencia de edad

Capítulo 02: Contacto

68747470733a2f2f73332e616d617a6f6e6177732e636f6d2f776174747061642d6d656469612d736572766963652f53746f7279496d6167652f73694a315f5f395f6356363772413d3d2d313331363036323437362e313734376437313134393430643264333336373730323736363738342e706e67?s=fit&w=1280&h=1280

El ruido qué hacía la pequeña Letta, me estaba molestando hasta tal punto de hacerme despertar. Lo primero que veo es la luz del día filtrarse por la ventana, luego volteo a ver a la pequeña niña que me miraba con una sonrisa traviesa; no traía nada consigo más que si voz ruidosa y moviéndome sin parar para molestar.

Tuve que soportar en darle una mirada de mala gana, solo me límite a verla.

Pero pronto mi vista se dirigió a él, estaba a un lado de Letta, casi estaba acostado, aunque sus pies estaban en el piso. Me regaló una sonrisa y un brillo en sus ojos miel me hizo querer repetir lo de la madrugada.

Me llené mi corazón de esperanza, ilusión y sobre todo me calentó mi pecho acelerando mis latidos. Su sonrisa cálida, cómplice y tus ojos brillando me dieron a entender qué los besos de la madrugada. No había Sido ningún error, sino un comienzo para los dos.

Las palabras no hicieron falta en ese momento, solo la mirada y el brillo en nuestros ojos hablaban.

No me dispuse a hablar, no sabía cómo tan siquiera empezar el tema. Y quizás, él tampoco sabía.

—¿Qué vamos a desayunar? —interrogo quitando la cobija, la pequeña se hizo a un lado y se fue a la cocina.

Él se levantó, ya qué estaba medio acostado en la cama. Me extendió su mano para poderme incorporar, aunque, yo estaba medio adormilada y un poco ida por lo ocurrido horas antes. Con nerviosismo, tome su mano sintiendo mi cara ponerse roja. Sentí su tacto mojado, ya que su mano sudaba y me hizo creer que también estaba nervioso.

Aunque hizo brotar con más ganas cuando me volvió a sonreír. Mis ganas de soltar el tacto me picaban, pero al ver que ya me incorporé y soltó mi mano.

—Deja pongo algo de café.

Fue su respuesta. Escapando de mi mirada, quizás lo puse incomodo por mi acción de querer romper el contacto. Ya que, no estaba demasiado acostumbrado a ese tipo de tactos o exponer mis sentimientos a alguien más.

Pero sentía que con él me iba a abrir, y tenía miedo.

También me preocupaba una cosa, haciendo que mis nervios aumentaran más, y era que su hermana mayor dijera algo.

(...)

En mis clases de inglés, no logré concentrarme. No entendía de que tema estaban hablando, mi mente solo volaba al momento de la madrugada.

Aun no me la creía, sentía que había soñado ese momento y su sonrisa en la mañana me confirmo que no fue mi imaginación. En verdad paso y eso me emociona mucho, pero tenía que pensar con la cabeza fría. En primer lugar, porque no éramos más que familiares políticos, segundo, el acababa de romper con su novia hacia poco y tercer; la magnitud de diferencia de edades de ambos.

Todos esos aspectos me hacían sentir un mal sabor de boca, aunque el segundo no lo veía con mucho problema, ya que, él le termino porque la chica simplemente era muy indiferente con él y lo buscaba muy poco, se distanciaron demasiado.

—Alguna pregunta —finalizo la maestra, yo salí de mi ensoñación y preocupación que solo negué junto con mis otros compañeros. La maestra asintió con fuerza —, muy bien, la siguiente clase es la prueba de la unidad 1 a la 6. Para ver si avanzan en el nivel o repiten.

Todos asentimos sabiendo las consecuencias. La clase se dio por terminado, salí casi que corriendo para poder pagar la mensualidad de la academia y volver a la casa. Donde podía verlo y hablar con él.

Quería dejar las cosas en claro desde un principio.

Solo esperaba que llegara la noche, donde platicábamos con más libertad sin interrupciones.

La oscuridad era mi lugar seguro sí él está conmigo en ese abismo.    

 




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.