Agua. Agua en torrente. Veo a mis hermanos unirse a los sumpalles, recorriendo remolinos como si de volar se tratara. Volar.
Saltamos así al vacío y cruzamos por esas sedas. Y volamos. Volamos por otro mundo, volamos por otro tiempo. Otro espacio. Volamos.
Volamos entonces por aquel mundo, mundo al revés, mundo de agua donde el cielo es esa burbuja que orbita el mundo fuera del río, y más allá, las estrellas, estrellas de brillo esmeralda, estrellas de color terroso, de un mundo más allá del límite, más allá de lo desconocido; tal y como lo era el agua para nosotros, al menos hace un instante atrás…
Agua. La puerta a un nuevo mundo.