Mientras Jason atendía a Louis en la habitación, Iván intentaba explicar a la familia lo que había sucedido.
Esto se debía a que él les había dicho que Louis se había puesto mal después del reciente enfrentamiento, de ahí que Molly y muchos en realidad, asumiesen que estaba herido.
A pesar de que ya estaban en conocimiento de los hechos, nadie tenía idea de qué estaba sucediendo, pero Bill, Joseph y Harry cruzaron una mirada y por las tres cabezas estaba pasando la misma cosa. No obstante, en ese momento escucharon las voces que se elevaban en el interior de la habitación, pero cuando Bill iba a abrir, la voz alterada de Vladislav lo detuvo.
Todos habían estado mirando hacia la puerta y al escuchar a Vladislav giraron las miradas hacia Iván para ver como se había recostado a la pared y parecía punto de caer, de modo que Vladislav y los gemelos Black se apresuraron a detener la caída.
Geraldine abrió la puerta de su propia habitación y los gemelos entraron seguidos de Vladislav y colocaron a Iván sobre la cama, pero cuando Vladislav intentó preguntarle a Iván algo, notó que había perdido el conocimiento, y Tyler, que había entrado tras ellos junto con Rose, lo apartó suavidad.
Jean Paul empujó a Vladislav hacia la puerta, pero cuando J.L. lo intentó con Geraldine, ésta lo sacudió.
Todos los varones Black habían aprendido muy pronto que era un muy mal asunto contrariar a la gemelita, pues aparte de que esto solía generar la ira de su padre, ella era perfectamente capaz de enviarlos volando contra las paredes o el techo, y siendo que la dulce criatura ya no era una niña, sino que se había convertido en una hermosa señorita de 17 años, su peligrosidad había crecido notablemente, de manera que J.L. encontró mucho más juicioso dejar las cosas así.
Tyler se había concentrado en una evaluación inicial determinando con rapidez el estado de Iván, y se estaba preguntando en primer lugar por qué Jason no había hecho nada, y en segundo, cómo era que aquel chico había resistido tanto.
En el caso de Geraldine no era de la clase que se impresionaba ante la sangre, había crecido al lado de cuatro individuos especialmente aficionados a herirse de diversas formas y ella misma no había sido mucho mejor, pero al ver el torso de Iván que en aquel momento parecía una fuente, tuvo que apoyarse en la pared.
Tyler lo pensó un momento, porque en realidad no había mucho que ella pudiese hacer, ya que se trataba de un Sectumsempra, de manera que lo único por hacer mientras él revertía la maldición era cambiar las compresas y eso fue lo que le dijo.
Geraldine se dedicó a ello procurando no pensar en las heridas que ya estaban abiertas y las que continuaban apareciendo, mientras que Tyler dejó de hacerse preguntas y se concentró en lo suyo. Aunque a Geraldine le pareció que había tardado años, en realidad no había sido así y cuando su padre dejó de murmurar palabras ininteligibles y detuvo su varita, las heridas comenzaron a cerrarse. Sin embargo, entre Tyler y Rose que ya estaba de vuelta, murmuraron otros hechizos para ayudar a la más rápida cicatrización, y en cuanto se cerró la última, Rose comenzó a administrarle la poción.