El hospital era un hervidero, pues los heridos del callejón habían sido muchos. Remus y Hermione se habían encargado del traslado de los heridos fueran civiles, aurores o prisioneros, mientras que Joseph y Ron lo habían hecho de los prisioneros que iban directo a Azkaban.
Cuando Harry llegó al hospital y por primera vez después de un enfrentamiento, no se interesó por sus hombres, sino que buscó a Sirius que en aquel momento hablaba con Silver.
Aquella conversación no contribuyó en nada a aliviar la dolorosa sensación que tenía Harry en el corazón, pero antes de que él pudiese preguntar qué tenía James, aparecieron las gemelas Potter y los gemelos Black.
Loriana lo había empujado y ya iba hacia la puerta, pero fue detenida por J.L. Afortunadamente aquel individuo aparte de rápido era hábil, pues la gemela ya le había lanzado un golpe y él se vio en la necesidad de inmovilizarla.
Mientras J.L. seguía discutiendo con Loriana, hicieron acto de presencia Ginny, Luna y Neville que había estado en Inverness cuando recibieron la noticia. De forma sucinta fueron informados y lógicamente Ginny también quería ver a su hijo.
Un grito desesperado hendió el aire y al minuto siguiente todos lo que estaban en capacidad de moverse tuvieron que lanzarse al piso, pues todo aquello susceptible a moverse y hasta lo que no, como una camilla que estaba en el pasillo, comenzó a volar y a estrellarse contra las paredes o contra las personas. Siendo que dos de las hijas de James estaban allí y la tercera acababa de llegar y había sido la que gritase, en realidad no sabían cuál de ellas estaba provocando aquello o si eran las tres, pero lo cierto era que nadie parecía poder detenerlo. Sirius que había sido uno de los que no había atinado a moverse, fue golpeado por una silla y eso fue lo que lo hizo reaccionar, pero al igual que los demás, no sabía a quien dirigirse. Las enfermeras y los pacientes que estaban en aquella área corrieron hacia las escaleras y a los gritos de las personas se unieron los de las pinturas que volaban en todas direcciones. Harry tenía abrazada a Ginny; J.L. intentaba hacerse escuchar por Loriana; Justin había sujetado a Lorena, pero cuando Aydan lo intentó con Oriana, Cassander lo detuvo, porque para completar aquel caótico cuadro, los que habían sido testigos de la primera explosión de James hacía varios años atrás, vieron con horror que Oriana estaba en la misma situación, de modo que si alguien se le acercaba resultaría seriamente lastimado.
Anthar, Steffano y Jeremy que venían llegando en aquel momento, se unieron a Alex, Lyra, Lily y Jean Paul que hacían verdaderos esfuerzos por detener la enloquecida danza de objetos. J.L y Justin tomaron la decisión de aturdir a las gemelas y las cosas se detuvieron, pero como no había manera de detener a Oriana, Anthar y Jeremy se aplicaron tanto como les fue posible hasta que finalmente la chica cayó sin sentido.
Una vez que la conmoción había pasado, el dolor y la angustia se hicieron presentes. Sirius estaba simplemente destrozado y en realidad no sabían cómo era que no había caído víctima de otro infarto; Anthar se refugió en brazos de Lily y lloraba como un crío después de haber gritado cuanta cosa se le había ocurrido y que nadie había entendido, pues él seguía viendo a Rowena como a la hermanita que lo había recibido con tanto amor a su llegada a casa y era la única imagen que ahora tenía en la cabeza; cuando Tyler terminó de atender a Patrick, casi sufre un colapso al ser informado de la desaparición de Rowena, pues el sufría del mismo apego de Anthar por su hermana y por muchos años que viviese, para él Rowena seguiría siendo la niña pequeña y revoltosa que gustaba de despertarlo lanzándosele encima aun ahora, y a la que adoraba con cada centímetro de su ser; Ginny y Harry estaban igual que Sirius, pues Rowena había sido casi tan hija suya como James, ya que aquellos dos niños habían demostrado su apego el uno al otro prácticamente desde la cuna; Rowena había nacido exactamente diez días después que James, de manera que habían estado juntos desde siempre. Albus, Lyra y Victorie estaban igualmente inconsolables, porque si bien el delirio de Rowena había sido James, ese grupo de chicos había sido tremendamente unido, y en el caso de Lyra que no había tenido hermanos, no tuvo ocasión de echarlos de menos, pues James, Albus, Rowena, Victorie y un poco después Louis que andaba con Albus para arriba y para abajo, habían suplido esa carencia.
A pesar del terrible dolor que estaba sintiendo, Sirius tuvo que sacar fuerzas no sabía de donde cuando llegó Grace en compañía de Steffano y Ameliè, pero a una angustia vino a sumarse otra, pues aquello fue demasiado para Grace y ella sí fue víctima del infarto que Silver había esperado que le diese a Sirius.