Una vez que las cosas se habían calmado un poco y que los miembros de la familia que estaban presentes pudieron saludar a Cassandrea, Jason dijo que debían regresar, pues quería hacer una evaluación completa a su hija, pero Harry se apartó con él, Sirius y Remus.
Jason entrecerró los ojos y los otros tres casi esperaban que los enviase a paseo, pero en lugar de eso se giró y ubicando a Demian, se fue derecho hacia él a quien por cierto no esperaba ver allí después que le había dicho que podía marcharse en cuanto entrasen.
Remus y Harry sabían eso tan bien como todo el mundo, pero al menos en aquella ocasión Jason no parecía querer masacrar a Demian solo por respirar cerca de Lyra, así que lo siguieron, pero a cierta distancia, y después de conversar civilizadamente con él, se giró y volvió con ellos.
Ellos asintieron y así lo hicieron, Jason salió con Sandy y luego los siguió Stefano, y como no tuvo problemas ni para salir ni para volver a entrar, Jason marchó con su mujer y su hija mientras los demás se quedaron haciendo la revisión.
Ellos sabían que Harry tenía muchas y muy buenas razones para querer atrapar a Radvansky, pues aparte de todo lo que había hecho, tener a ese individuo suelto por ahí era un peligro, y si Weiss Salvin estaba con él, sería aun peor. No obstante, también sabía que sus hombres estaban agotados, no habían tenido prácticamente ningún descanso en la última semana, llevaban casi tres días en pie de lucha y ese día en particular la misma había sido especialmente dura. Miró a su alrededor y notó que ya habían recogido todos los cadáveres, los detenidos habían sido llevados a Azkaban y los heridos al hospital, de manera que, con un último suspiro de resignada frustración, asintió.
Los aurores reunieron a sus escuadrones y luego de asegurarse que no faltaba nadie, les ordenaron salir. Los últimos en hacerlo fueron Cassander y Harry, pero, aunque se suponía que ahora nadie podría entrar o salir, Cassander, Aydan e Iván lanzaron un potentísimo hechizo bloqueador para mayor seguridad. Harry miró a los escuadrones alineados frente a él, la mayoría de aquellos chicos tenían las huellas de la dura lucha de ese día, sus ropas estaban desgarradas o manchadas de sangre, en algunos casos la propia y en otros la de sus enemigos, pero todos exhibían las pruebas de aquello por lo que habían pasado. Así que se detuvo, los miró y ellos prestaron atención.
Después de eso y a una orden de Sirius, todos desaparecieron y el grupo familiar se dirigió al hospital, pues todos estaban ansiosos por saber de los heridos.
Dominique casi sufre un colapso cuando le dijeron las condiciones en las que Tyler había sido trasladado al hospital, y en los casos de Sirius, Grace y Anthar, el primero y el último casi apalearon a los gemelos por no haberles avisado, así que corrieron a informarse de cómo y dónde lo tenían.
James y Rowena estaban furiosos cuando Eidel les refirió lo sucedido con Justin, y después de vociferar todo cuanto se les ocurrió en contra de Kaylo y sus hombres, marcharon hacia donde tenían a Justin y a ambos les dolió el corazón al ver a Lorena aun desecha en brazos de Charlie.