CAPITULO 4 (1-5) (HIS SIDE STORY)

Llevé a MC a las tiendas para dormir, ubicadas más allá del campamento principal.

MC- ¿A dónde me llevas exactamente?

Sonaba insegura. Me pregunté a la distancia por qué.

KENSHIN- A una tienda vacía en el campamento de los sanadores. Puedes descansar allí hasta la mañana.

MC- ¿Y tú?

KENSHIN- Estaré organizando estrategias para mañana. Necesito reorganizar las divisiones de la unidad ahora que Sasuke se ha ido.

MC- ¿No crees que es demasiado pronto para rendirte con él?

(Así que por eso está insegura. No es que importe. No para mí.)

KENSHIN- Si la guarnición fue quemada, entonces es muy probable que esté muerto.

Cuando escuché la noticia de la muerte de Sasuke, un zumbido familiar llenó mis oídos. Ardí de ira cuando amenacé a ese mensajero. Pero ahora, todo estaba frío.

(Sasuke está muerto. Yo lo maté. Él salvó mi vida, ¿y así es como le pago? Lo dejé acercarse, sabiendo que probablemente sería fatal. Deberían llamarme el Dios de la Muerte, no el Dios de la Guerra.)

MC- Vamos, no digas eso. Aún no.

MC me agarró del brazo y me instó a detenerme.

KENSHIN- ...¿Qué es lo que quieres de mí...?

(Solo quiero volver a pensar en la batalla, para no tener que pensar en nada más.)

Solo la guerra llenaba mis sentidos lo suficiente como para ahogar las voces en mi cabeza- los susurros y las maldiciones que usaban mi voz. MC frunció el ceño, como si intentara entender.

(Es tan molesta a veces. No pidas una explicación. No la entenderías de todos modos.)

Ella trató de atravesar el frío, el entumecimiento y el zumbido incesante. ¿Por qué, cuando todo lo que quería era desconectar del mundo?

KENSHIN- Un espada rota no cambia nada. Lucharé, y mataré, y dejaré una montaña de cadáveres a mi paso... La montaña podría ser un poco más grande ahora, eso es todo. ¿Cuántos hombres crees que necesito matar para compensar la muerte de Sasuke?

(Como si hubiera un número.)

MC- No creo que funcione así...

(Sonreí ante la posibilidad de que sangre caliente se derramara sobre mis manos, algo más fuerte que el frío.)

KENSHIN- ¿Cuántos de esos cuerpos fríos harán que sienta calor nuevamente?

MC me miró con horror.

(No me importa lo que pienses).

KENSHIN- Tienes razón. No lo sabremos hasta que empiece. Simplemente mataré a todos los que vea y contaré cuando termine.

(Estoy deseando que llegue la batalla de mañana. Así es. La espero con ansias. Aunque Sasuke no estará conmigo).

MC- ¡Espera! Kenshin, no deberías estar solo en este momento.

MC se puso frente a mí. De alguna manera, ya no había miedo en sus ojos.

(¿De qué está hablando? Siempre estoy solo).

KENSHIN- Muévete.

MC- No. De ninguna manera.

(...Déjame estar solo)

Ella tomó mi mano y la sostuvo cálidamente entre las suyas.

KENSHIN- Suéltame.

Dolía. No podía entender cómo su pequeña mano había herido la mía. Entonces lo recordé. Había presionado mis uñas con fuerza antes. Sin embargo, esos pequeños cortes no eran suficientes para darme este dolor. El dolor venía de mi sangre tocando las suaves manos de MC.

MC- Kenshin, escúchame.

(No puedo... no quiero escuchar nada en este momento. Mi corazón duele, pero no es un dolor que ella pueda sanar)

MC- Sasuke está vivo. No sé cómo lo sé, pero lo sé. Suena ridículo, pero confío en mí misma.

(No suena ridículo. ES ridículo).

KENSHIN- Tu confianza será traicionada.

MC- Es mejor eso que rendirse por completo. Todavía estoy preocupada por él. Espero que regrese sano y salvo esta noche, y si estoy equivocada... estaré deshecha.

Su voz calmada y tranquila me llegó a través del ruido. ¿Por qué? Cuando la miré, mi visión se aclaró y vi lágrimas deslizándose por sus mejillas.

KENSHIN- ¿Por qué estás llorando?

MC- ...No lo sé. Probablemente porque tú no estás llorando.

A pesar de la sangre, MC persistió en sostener mis manos en las suyas más cálidas.

MC- Esperaré contigo hasta que Sasuke regrese. Esperaré contigo para que esté a salvo. Y lloraré contigo cuando te preocupes.

KENSHIN- ¿Harías eso?

MC- Sí.

Sus lágrimas brillaban, llamando mi atención hacia sus labios apretados y sus ojos fuertes.

(¿Por qué recién ahora estoy viendo lo hermosa que es?)

Mis manos se calentaron en las suyas.

(¿Qué es esto? ¿Un recuerdo? ¿Qué estoy sintiendo en este momento?)

Mi mente aturdida luchaba con las posibilidades de lo que esto podía ser, lo que significaba y por qué. Descarté todas las ideas, hasta que me quedé con un solo pensamiento, guiado por un solo impulso.

(Necesito tocarla...)

Mi mano ya estaba subiendo. Sin pensarlo, limpié la humedad de sus mejillas. Sus pestañas temblaron.

(¿Por qué esa pequeña acción me parece más importante que cualquier otra cosa en el mundo? ¿Por qué el mundo parece contener solo a nosotros ahora mismo?)

Pero este mundo ruidoso siempre había sido demasiado para mí. Me sentí aliviado al verlo desaparecer.

Kenshin- Hablar contigo me ha traído un poco de paz.

MC- Me alegra.

Me di cuenta de que mi mano aún estaba en su mejilla. La bajé. Extrañamente, podía sentir su calidez en mis dedos de todas formas. Mirando hacia sus manos, recordé la sangre.

(Así es. Ella tiene sangre en sus manos. Por mi culpa).

Giré sus manos entre las mías. Al ver mi sangre en su suave piel, sentí una especie de vértigo.

(... esa es mi sangre en sus manos...)