CAPITULO 6 (1-5)

· SHINGEN- ¿Quieren que Kenshin la vea? Bueno, resulta que tengo un incentivo seguro aquí mismo.

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Al día siguiente, estaba sentada en mi celda cuando tuve una visita inesperada.

· SHINGEN- Buenos días, princesa. Aunque tengo que decir que la mañana es mejor para ver a una dama tan hermosa.

· MC- Eres... Shingen, ¿verdad?

Visto a través de los barrotes de mi celda, parecía incluso más alto que la última vez que lo vi.

· SHINGEN- Me alegra que me recuerdes. Ha pasado un tiempo desde Honno-ji.

· MC- Sí. Así es.

· SHINGEN- Me preguntaba a dónde habías ido. Debería haber sabido que Nobunaga se llevaría a una belleza como tú.

Me consideraba bastante resistente al coqueteo, pero la sonrisa y las bromas de Shingen modificaban mi carácter.

(Alguien está tratando de adularme. Lamentablemente, está funcionando. Culpo a la celda. Eso es todo. Es culpa de la celda)

Shingen era masculino, seguro de sí mismo, extrovertido. Contrastando con la fría belleza y gracia de Kenshin, como habían notado Yukimura y Sasuke. Al mirar alrededor de mi celda, Shingen asintió, riéndose de aprobación.

· SHINGEN- Piezas de alta calidad. No está mal, para Kenshin. Parece que le ha ido bastante bien contigo... Aparte de mantenerte en una jaula de pájaros. Entiendo el impulso de preservar lo verdaderamente bello de su mundo, pero una celda sigue siendo una celda.

· MC- Sí. Ya lo creo.

Fue Kenshin quien me puso aquí, y ni siquiera quiso venir a hablar conmigo. Miré hacia mi pecho para asegurarme de que la espina en mi corazón seguía siendo invisible. Shingen me susurró.

· SHINGEN- ¿Quieres salir, MC?

· MC- ¿Me dejarías salir?

· SHINGEN- Querida princesa, liberarte sería un placer.

· MC- ¡Me encantaría salir! Tomar el sol, respirar aire fresco, ver la luz de la luna. Pero, ¿estás seguro?

· SHINGEN- Un hombre nunca se retracta de su palabra. Odio dar algo bueno a las fuerzas de Oda, pero si lo deseas, me encargaré de que regreses pacíficamente.

(Podría volver con los Oda ahora mismo. Entonces, en sólo un mes y medio, estaré de vuelta en el presente... Y siempre existe la posibilidad de que pueda volver a ver a Kenshin. Lograr que me hable una vez más. Quizás...)

· MC- ¿Pero por qué harías eso?

(Quiero decir, tal vez sólo es una buena persona, ¿pero no va en contra de los deseos de su aliado?)

Él sonrió un poco. Tuve la sensación de que me estaba leyendo, aunque su propia cara era una página en blanco.

· SHINGEN- ¿Qué gano yo con eso? Te liberaría de esta celda oscura y vería la luz del sol acariciando tu hermoso rostro...

· MC- No. Para. Espera un momento. Sé serio.

· SHINGEN- Siempre hablo en serio. ¿Pero tal vez estabas tratando de preguntar sobre mis dos condiciones?

· MC- ...lo sabía. Sí, esas. ¿Cuáles son tus condiciones?

· SHINGEN- Si te dejo salir, tienes que prometerme que no volverás a ver a Kenshin.

· MC- ¿Qué? Espera, ¿por qué sería esa una condición?

· SHINGEN- Es bastante simple. Es el idiota que te arrojó aquí. Sólo abandona el castillo en silencio y no lo vuelvas a buscar. Hablar con él no servirá de nada. No puedes hacer que cambie de opinión. Y si te ve, te encerrará de nuevo.

Lo que dijo Shingen me dolió. Probablemente porque era verdad.

(Quedarme con los Oda hasta que sea hora de volver al futuro... Y el costo es no volver a ver a Kenshin)

Fue un costo bastante alto, mi cabeza y mi corazón coincidieron. Lo reflexioné. ¿Qué era más importante para mí ahora? Había una última cosa que necesitaba saber.

· MC- Dime algo. ¿Kenshin tiene algún plan para usarme como prisionera de guerra contra los Oda?

· SHINGEN- Me agradas. Tienes una buena intuición y vas directo al grano. En deferencia a eso, te daré tu respuesta. No. No tiene planes de usarte contra ellos. Ambos lados tienen más que suficiente combustible para el fuego. Además, Kenshin no usaría rehenes.

· MC- No, eso no suena como él.

(Eso es un alivio. Odiaría ser usada en contra de mis amigos de esa manera)

Mi decisión era más fácil ahora.

· MC- Gracias por tu oferta, Shingen, pero me quedaré en mi celda.

· SHINGEN- Interesante elección la que has hecho. ¿Puedo saber por qué?

Los ojos de Shingen brillaron con interés. Y no era el interés transparentemente falso que me había mostrado antes.

(Así que, puede ser serio. De hecho, tengo la sensación de que este es el verdadero Shingen)

Todavía tenía mucho carisma. Miré hacia otro lado un momento, para poder concentrarme en mi respuesta.

· MC- La gente dice muchas cosas sobre Kenshin, pero yo he llegado a formar mi propia impresión de él.

Hablaban de su destreza, pero nunca de su sentido de la justicia. Y nadie mencionó nunca la tristeza en sus ojos.

(Kenshin es fuerte, pero también es sensible. Tierno y amable. Es un hombre hermoso, por dentro y por fuera)

Cuando cerré los ojos, pude imaginarnos esperando junto a la hoguera una vez más, con sus brazos a mi alrededor.

· MC- He tenido mucho tiempo para pensar en él. Y no creo que haga nada sin una razón. Hay una razón por la que me encerró aquí y se niega a verme. Quiero hablar con él y averiguar que es.