CAPITULO 8 (HIS SIDE STORY)

Regresé de la batalla, pasando por alto a mis vasallos para compartir la libación de celebración con MC. Ella levantó la jarra de sake y sirvió otra copa para mí.

MC- No te gusta tomarte tu tiempo con las bebidas, ¿verdad, Kenshin?

Por lo que parece, MC solo había tomado unos pocos sorbos de la suya. Sorpitos cortos.

(No estoy tratando de obligarla a beber).

MC- Se llama moderación. Estaría hablando con dificultad si bebiera a tu ritmo. Además, cuando piensas en cuánto tiempo lleva cultivar el arroz y luego hacer el sake, parece un desperdicio no saborearlo.

(No puedes detenerte y saborear las cosas).

KENSHIN- La vida es corta y termina de repente. No puedes demorar las cosas que disfrutas.

(Cuanto más tiempo vives, más cosas te atormentan. Es mejor arder con intensidad y rapidez para que no tengan la oportunidad).

Cuando levanté la vista de mi bebida, MC estaba molesta.

(¿Qué la está molestando ahora?)

MC- Quizás tengas razón, pero yo aún pasaría mi tiempo disfrutando las cosas. Eso haría que los buenos momentos, como este, duraran más.

KENSHIN- MC...

(¿Está diciendo que quiere pasar más tiempo conmigo?)

No podía creerlo. La miré fijamente.

KENSHIN- ¿Por qué? ¿Por qué dirías eso?

MC- ¿Qué quieres decir con por qué?

Su mirada se movía como evitando responderme.

MC- Disfruto estos momentos contigo. ¿Por qué no querría que duraran? No quiero pensar en todo el tiempo que podríamos haber tenido cuando llegue el momento de separarnos.

KENSHIN- ... ¿Separarnos?

(¿MC se va... de mi lado? No. No puede irse. ¡No puede irse NUNCA!)

Ni siquiera me importaba lo que ella había querido decir. Mi mente estaba en llamas.

KENSHIN- ¿A dónde irías tú?

MC- ¿Irme? En realidad, a ningún lado. Vamos. Tú mismo acababas de decir que la vida era...

Su expresión preocupada solo trajo todos los demonios rugientes al frente de mi mente.

(No puedo pensar más. Mi mente se está desvaneciendo. Me duele)

KENSHIN- ...Claro. Por supuesto. ¿Sabías sobre la carta que envió Nobunaga? ¿No? Bueno, él pidió que regresaras.

No estaba escuchando lo que decía. Todo lo que sabía era la abrumadora sensación de desmoronarme desde adentro.

MC- ¿Él lo hizo?

KENSHIN- Sí. Sí, lo hizo.

(Levántate. Ahora mismo. Sal de aquí. No te quedes. Necesito alejarme de ella).

Pero la mayor parte de mi mente tenía tan poco control sobre mí en este estado.

(...Está bien, entonces. Ya no me importa lo que pase).

Agarré sus hombros y observé cómo esa fuerza fea dentro de mí la empujaba al suelo. MC me miró.

MC- ¿Kenshin?

KENSHIN- Él no puede tenerte.

Tan asustado de lo que ella pudiera decir, presioné mis dedos contra sus labios.

(Si dices algo más, creo que realmente perderé la cabeza).

Entonces, la besé. La besé con fuerza, saboreando su garganta. Con labios y dientes, la besé con un abandono salvaje e insensato.

Ella agarró mis hombros —para empujarme, pensé— pero en lugar de eso, me sostuvo cerca.

KENSHIN- ...¿Qué estás haciendo, MC? ¿Por qué no estás luchando contra mí?

(Escápate de mí. Inténtalo, al menos, para que así tenga una razón. Sé que no puedo tenerte. Así que déjame romperte en su lugar. Eso finalmente acabará con lo último de mí.)

Esta oscuridad había estado dormida dentro de mí durante mucho tiempo. Sin nombre pero siempre presente.

(...Solo quiero estar en paz...)

Al mirarla con ojos que realmente no eran míos, la vi temblar.

(Teme de mí. Tenme miedo. De esa forma, puedo saber con certeza que solo piensas en mí, la única forma de retenerte.)

KENSHIN- Si no luchas contra mí ahora, entonces nunca te dejaré ir. Nunca.Serás mía. Te mantendré aquí para siempre. ¿No lo ves?

MC- Kenshin, ¿qué estás diciendo...?

(¿O vas a resistirte?)

KENSHIN- Que eres mi botín de guerra. Puedo hacer contigo lo que me plazca.

MC- ¿Es eso lo que piensas? ¿Eso es realmente lo que piensas de mí como...? ¡Mm!

Deslicé mis labios por la hendidura de su cuello, mordisqueando su clavícula. Se calentaba bajo mí. Una sensación que la bestia en mi interior saboreaba. MC gimió; sentí la vibración de ello en su garganta mientras la besaba. Sus labios se abrieron. No esperé. Con mi lengua, me abrí paso entre sus labios, tomando los suyos y atrapándolos donde los encontraba.

(...De esta manera, no tengo que pensar.)

MC- Kenshin, espera, por favor...

Cuando el beso terminó, finalmente me apartó. Sus ojos estaban húmedos.

MC- ...Necesito saber. ¿Eso es realmente todo lo que soy para ti?

KENSHIN- Yo... no sé.

MC- ¿Cómo puedes no saberlo? Sé que lo sabes. Dímelo.

Su voz ahogada era familiar. Sonaba... como la mía. Una lágrima rodó por su mejilla.

(...Esas lágrimas. He visto esto antes).

Fue la primera vez que ella lloró frente a mí. Un recuerdo vívido que no podía olvidar.

(Cuando pensamos que Sasuke había muerto en esa guarnición, mis emociones estaban fuera de control, pero MC me ayudó a controlarme... Esas son mis lágrimas. Ella está llorando porque yo no puedo).

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KENSHIN- ¿Por qué estás llorando?

MC- ...No lo sé. Probablemente porque tú no estás llorando. Esperaré contigo hasta que Sasuke regrese. Tendré esperanza contigo de que esté a salvo. Y lloraré contigo cuando te preocupes.

KENSHIN- ¿Harías eso?