MC- ¡Fuera de nuestro camino, o lo lamentarás!
(Lo digo en serio. ¡Fuera de nuestro camino, por favor! ¡Hoy no quiero pisotear a nadie!)
DISCIPULO 2- ¿Qué? ¡Pero, esa debería ser nuestra línea!
DISCIPULO 1- ¡Hey! ¡Más despacio! ¡Alto! ¡Atrás!
Mis enemigos tenían la misma aversión que yo a ser pisoteados y se echaron a un lado y a otro.
(Todavía tengo un camino por recorrer antes de llegar a Kenshin. ¡Vamos! ¡Vamos!)
DISCIPULO 3- ¡¿Tenían un calvario a la espera?!
DISCIPULO 4- No, eso no es un calvario... Creo que es solo una chica que suena como loca en un caballo...?
DISCIPULO 3- Bueno, ¡córtala como si lo fuera!
DISCIPULO 4- ¡Vale!
MC- ¡Uy!
Estos tipos no se apartaban de mi camino con miedo. Tenían armas y un par de miradas realmente desagradables en sus caras.
SASUKE- MC, ¡sigue cabalgando!
(¡Confío en ti, Sasuke!)
Su seguridad repelió las garras del miedo que se enroscaban en mis manos. Mantuve la mirada al frente y seguí cabalgando... Justo entonces, oí un sonido estremecedor, y el cielo se iluminó como si fuera mediodía.
DISCIPULO 4- ¡Agh! ¡Mis ojos!
DISCIPULO 3- ¡No puedo ver!
SASUKE- ¡Ceguera temporal, cortesía de la ciencia y el poder de la hiperfijación! MC, ¡ahora es tu oportunidad!
MC- ¡Eres un salvavidas!
Di un codazo a mi caballo con las rodillas y cogí velocidad mientras nuestros enemigos se tambaleaban.
DISCIPULO 3- ¡La chica! ¡Detenedla! ¡Dispárale!
Escuche mas gritos furiosos y el peligroso sonido de rifles siendo cargados.
SASUKE- ¡Eso no va a pasar!
DISCIPULO 4- ¡Gh!
Un destello de metal de uno de los kunai de Sasuke y el cañón de un rifle salió disparado salvajemente.
(Pasan tantas cosas en la batalla. Es difícil seguir la pista de las cosas con mis sentidos diciéndome que mire en todas direcciones. Y, sin embargo, si se me escapa un solo dato, puede ser lo que acabe con mi vida).
Me castañeteaban los dientes. Estaba temblando.
(Creo que la adrenalina es lo principal que me mantiene en marcha en este momento... Lo cual es una razón más para no pensar demasiado en esto. Si dejo que haga clic sólo lo que estoy haciendo, probablemente me congelaría en el acto)
MC- ¡Waah!
Unas chispas de una rama cercana saltaron y me hicieron cosquillas en la nariz. ¿Chispas? ...¿Un incendio? "Disparos" me informó nerviosamente mi cerebro.
SASUKE- MC, ¡¿te ha dado eso?!
MC- ¡No! No, estoy bien.
Ha fallado, ha fallado, ha fallado... Le dije a mi cerebro, haciéndole callar para que dejara de pensar en lo cerca que había estado de fallar.
(¿Quieres pensar en lo cerca que está algo? ¡Pensar en lo cerca que estamos de Kenshin! Esa es buena)
Presté poca atención a los soldados que se lanzaban a un lado y seguí cabalgando. Me estaba acercando a Kenshin.
SOLDADO UESUGI- ¡No vas a pasar!
DISCIPULO 5- ¡Ya lo veremos!
MC- ¡Ah!
SASUKE- ¡MC, tienes que volver!
Delante de mi había una pequeña cresta, grupo de soldados Uesugi en combate con los discípulos de Kennyo abajo.
(¡Parece que no me ven venir! ¡Lo cual va a ser malo! Me temo que he convertido accidentalmente este caballo en un coche a toda velocidad y NO voy a poder parar a tiempo).
Tiré de las riendas y cerré los ojos mientras me preparaba para el desastre. Con un relincho, mi caballo utilizó el saliente como trampolín y saltó.
MC- ¡Yep!
Nos elevamos, con todas esas peligrosas y AFILADAS espadas y armas de asta a un pelo por debajo de nosotros.
(Si caigo sobre alguna de ellas, será un final realmente espantoso para... ¡No! Me prometí no pensar en eso. ¡Sólo pensar en la meta! El...)
MC- ...Oww...
Aterrizamos con fuerza, mi caballo y yo, y la caída no sólo fue mala para mi trasero, sino que hizo que mi hombro lesionado empezara a chillar. Apreté los dientes y empecé a navegar más despacio por el tumulto en el que había aterrizado.
KENSHIN- ...¿MC...?
MC- ¡Kenshin!
Me miró. Respondió a mi voz. Ah, él podía oírme. Estábamos reunidos... ¡Pero no por mucho tiempo! Vi a un hombre que se acercaba a Kenshin con la espada desenvainada, listo para blandirla.
MC- ¡Cuidado!
KENSHIN- Hmph.
Se giró, moviendo su katana como una guadaña para acribillar al hombre.
KENSHIN- MC, conmigo. Los objetivos montados a caballo llaman demasiado la atención.
MC- ¡De acuerdo!
Cogí su mano y me deslicé hacia abajo; Kenshin me arrastró detrás de él por seguridad. Justo cuando miraba a mi caballo y lo que deberíamos hacer con ella en este lío... Un disparo cercano la asustó, y se largó por donde habíamos venido. El enemigo se movía lentamente tras mi intervención, quizás buscando una nueva forma de atacar a Kenshin.
KENSHIN- ...¿Por qué has venido aquí?
MC- Tenía que detenerte.
KENSHIN- ¿Por qué detenerme? Voy a librar al mundo de todo lo que pueda hacerte daño. Esta vez te mantendré a salvo. Nunca debo detenerme. No sólo hasta que exhale mi último aliento.
MC- Vale, pero escucha... Lo que de verdad quiero no es protección o tu muerte, ¡es que vivamos los dos! Si te hieren aquí... y no hablo sólo de tu cuerpo, sino de tu mente... ¡mi sueño para nosotros morirá!
KENSHIN- Y sin embargo... no puedo vivir con la idea de que algo te lastime, MC. Ni siquiera me siento vivo, así de asustado estoy de que te pase algo.
(¡Uf! ¡Parece que me está escuchando pero en realidad no es así! ¡¿Cómo lo alcanzo?!)
MC- ¿Y qué hay de lo que te prometí? ¿Lo recuerdas?
KENSHIN- ¿Una promesa?
MC- Cuando tienes esos malos sentimientos. Dime que recuerdas lo que te dije.
KENSHIN- YO...
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MC- Quiero que vengas a hablar conmigo cuando sientas esos malos sentimientos. Cuando lo hagas, te abrazaré así. Cuando lo hagas, te abrazaré así. Amar significa compartir también los momentos difíciles. No me protejas de tu miedo. Compartámoslo hasta que sea sólo un recuerdo.