¿?- MC.
MC- ¡¿Mmgph?!
Alguien me agarró por detrás. Me taparon la boca. Quise gritar.
(¡Estúpida de mí! ¡No pensé que podrían haber puesto vigías! Pero espera. ¿Dijo mi nombre?)
KICHO- Silencio. Sobre todo, mantén la calma.
Miré detrás de mí para confirmar mi sospecha. Unos ojos del color de la luna nublada me devolvieron la mirada.
(...Kicho. Esto... no está mejor)
Di un "Mmhmm" ahogado y asentí. Kicho señaló hacia un lado. Varias figuras se movieron entre las sombras en dirección a los hombres. Deduje que estaban bajo su control.
KICHO- Ahora, ven aquí.
Me quitó la mano de la boca y, agarrándome por los hombros, me guió en dirección contraria a la acción.
(Y ahora tengo que explicar por qué le seguía. No ha sido mi día...)
MC- Escucha, sólo estoy aquí porque...
KICHO- Faltaban varias armas de mi último envío. Tenía razones para creer que habían sido robadas durante el proceso de descarga. Puse a algunos subordinados a investigar y descubrí que estaban siendo revendidas esta noche, aquí. Resultó que mis armas no eran lo único con lo que este hombre había estado comerciando... Gente. Han estado secuestrando gente para venderla como esclavos.
(¡Uf! Eso es horrible... Y no tenía ni idea de en lo que me estaba metiendo)
KICHO- Te vi hoy y al instante me di cuenta de que eres del tipo curioso. Ves algo e inmediatamente actúas en consecuencia. Pero, ¿cuál es tu plan en una situación como la de esta noche, si te hubieran descubierto? No me importa si es una pistola, una espada o algún tipo de arte marcial. ¿Puedes protegerte? ...¿Estás seguro de ello?
MC- No. Nada de armas... Bueno, sé un poco de entrenamiento de defensa personal, pero definitivamente no tengo confianza en ello.
KICHO- Como pensaba. Antes no hiciste ningún intento de liberarte de mí. O demostrado que incluso sabes cómo. Es bueno que tengas algunos conocimientos, pero no puedes arreglártelas solo con habilidades de emergencia entrenadas a toda prisa. Entrena tu sentido del peligro, si no otra cosa. Nunca, nunca tires tu vida por la borda.
Su voz era frígida. Nunca le había oído hablar con tanta rabia. Sus dedos sobre mi hombro temblaban.
(Pensé que me llamaría la atención por seguirle, pero parece que... ¿Su verdadera preocupación es que lo hice sin estar preparada para protegerme? Eso es... raro. Eso es definitivamente raro)
Esta tarde, Kicho me dijo que las vidas perdidas en su guerra eran sacrificios necesarios. ¿Ahora estaba molesto porque me metí en una situación en la que podría haber muerto?
(Tengo que pensar que decirle...)
MC- Gracias por salvarme.
KICHO- Mm.
Me liberó.
KICHO- Mis hombres están a la salida del callejón. Diles quien eres y que uno de ellos te escolte de vuelta. Necesito volver al lugar del trato.
MC- De acuerdo.
Kicho volvió a la oscuridad del callejón, con su figura como un pilar de luz.
(Ha sido inesperadamente amable por su parte. Soy un empleado de bajo nivel en el primer día de trabajo)
"...Nunca, nunca tires tu vida por la borda". Hoy había oído muchas cosas de él, pero esas palabras me parecieron significativas. Pensé en ellas todo el camino de vuelta a la mansión.
-------------------------------------------------------------------------------------
Era el día siguiente...
(Anoche no dormí lo suficiente).
Me eché el paquete al hombro bajo un brazo y usé el otro para disimular un bostezo insoportablemente grande con la manga.
(Despierta, MC. Los agentes dobles no pueden dormir hasta tarde. este paquete va para...)
MITSUHIDE- Bostezas como un gatito bebé que desea emular a sus grandes antepasados felinos.
MC- ¡Mitsuhide!
Mitsuhide me miró directamente a los ojos y luego se llevó lentamente un dedo a los labios como si yo fuera un niño al que hubiera que hacer callar.
(Cierto. No debería gritar el nombre del "jefe de espionaje del enemigo" en público)
MC- Lo siento. Supongo que debería llamarte... Huh. Siento que deberíamos haber decidido un nombre antes de esto... Um... ¿Mitchy? ¡Hola, Mitchi! ¿Cómo te ha ido?
MITSUHIDE- Te felicito por concebir tan rápidamente un nombre que nadie asociaría jamás conmigo... ni con ningún otro ser vivo.
MC- Simplemente... intentaré no usar tu nombre en absoluto.
(Pensé que ser demasiado amistoso con Mitsuhide disimularía nuestra relación... porque Mitsuhide NO es del tipo amistoso. Pero si hay otra cosa que Mitsuhide no es, es del tipo "Mitch", así que ahí va eso)
MITSUHIDE- Veo que has empezado tu nuevo trabajo. Por cierto, ¿cómo va el trabajo?
MC- Mi primer día me duró una semana, pero estoy sobreviviendo, como puedes ver. También he conseguido mi primer trabajo. Reparto de paquetes.
Abrí el mapa que me habían dado y señalé mi destino.
MITSUHIDE- Ya veo. Muy bien. Muy bien. ¿Y qué es ese aroma tan característico que te rodea?
MC- Es perfume de ultramar. Me lo regaló Kicho. Se supone que debo usarlo todos los días. Es como un requisito para trabajar allí. Dicho esto, hablamos un poco el primer día. No sobre nada serio...
MITSUHIDE- Es sólo el segundo día. Nadie espera más de ti en este momento, aparte de que empieces tu trabajo con seguridad.
(¿En serio? Eso me hace sentir mucho mejor)
MC- Gracias. Intentaré cumplir el horario entonces.
MITSUHIDE- Sí. Por cierto, tengo algunas noticias que compartir. Parece que Motonari aún vive.
(Motonari... Mouri, ¿no?)
No había salido en nuestras clases más que como un nombre suelto, con todo eso de "estar muerto"... o presuntamente muerto, al parecer. Los dos habíamos estado hablando de noticias como si estuviéramos hablando del tiempo. Y así, en mi tono más desenfadado, pregunté.