Kicho

ROMANTIC ROUTE - CAPITULO 12 (6-10)

MC- Buen clima hoy.

Kicho- Sí. Me alegra que el cielo esté despejado.

Nos sentamos en un pequeño bote un poco alejados de la orilla, Kicho frente a mí. Parecía la opción más agradable para un lugar donde pudiéramos estar solos.

MC- La verdad, no pensé que alquilar botes fuera algo posible en esta época. ¿Alguna vez saliste a pasear en bote en el futuro? Hay unos botes ridículos para parejas con forma de cisnes gigantes y los manejas con pedales.

Kicho- Los he visto. Pero nunca se me ocurrió subirme a uno. Me pregunto qué pasaba por la mente de la persona que pensó en poner botes como cisnes gigantes en el agua.

MC- ¡Una idea tonta, seguro!

Miré hacia el horizonte mientras hablábamos. La luz se dispersaba sobre el agua como si alguien la hubiera rociado con joyas. Brillaban sobre el reflejo de las montañas nubladas a lo lejos.

(Ha pasado tanto tiempo desde que pudimos simplemente hablar de lo que fuera... Ha pasado tiempo desde que pudimos hablar en absoluto. He pasado todo ese tiempo distrayéndome, pero la verdad es...)

Volví a mirar a Kicho. En algún momento, nuestra conversación se había desvanecido.

Kicho- Busqué algo que decir, pero...

Todo lo que podía hacer era mirarlo.

(Quiero preguntarle tantas cosas, pero al mismo tiempo, no quiero hacerlo. Siento que cualquier cosa que diga hará que este momento se precipite más rápido hacia el final. Y tengo miedo.)

Kicho- ...¿Vamos hacia allá?

MC- Sí. ¿Quieres que reme un rato?

Kicho- No, puedo seguir yo. Mientras lo hago, ¿por qué no hablas tú? Cuéntame sobre el futuro.

MC- ¿Sobre qué?

Kicho- Vivíamos en el mismo mundo, pero la forma en que lo veíamos era tan diferente. Quiero saber qué te gustaba de él. Tus tiendas favoritas. Comidas. Canciones que te gustaban. Programas. Lo que sea.

MC- ...¡Jaja! Está bien, ¡solo no te arrepientas de haber preguntado!

Kicho comenzó a remar, llevando nuestro pequeño bote hacia adelante. Y con ello, la conversación se reanudó. Hablamos para llenar el tiempo. Para no desperdiciar ni un solo momento de estar juntos otra vez.

--------------------------------------------------------------------------

MC- ¡...Y así fue como terminé viéndola compulsivamente dos veces!

KICHO- Pero parece que la disfrutaste más la segunda vez. Me alegra que te hayas divertido.

Devolvimos el alquiler y ahora caminábamos junto al lago.

(¿Qué más hay? Oh, desde que vi la taza de té de Kicho he estado pensando en ese café que me recuerda...)

Me giré hacia él, solo para ver...

MC- Oh, wow. Él caminaba más cerca de la orilla. Mira, Kicho.

KICHO- ...Es hermoso.

Cuando lo miré, estaba bañado por la rica luz dorada que bajaba de las montañas al ponerse el sol. Todo era oro. Un momento verdaderamente digno de ser llamado un tesoro.

MC- Lo es. Aunque el sol se puso tan rápido. Dicen que el tiempo vuela cuando te estás divirtiendo, pero también puede volar cuando algo duele. Creo que... los momentos se sienten más largos cuando los recuerdas.

KICHO- Tienes razón. Cuando estamos en el presente, lo estamos viviendo. Cuando reconoces algo, ya está en el pasado.

MC- Por eso... quiero tener tantos momentos como pueda para mirar atrás; estando al lado de la persona que amo.

KICHO- MC....

Encogí los dedos, incapaz de extender la mano y tomar la suya.

(He vivido lo suficiente para saber...)

...los días son más cortos de lo que crees. Llega la noche, cierras los ojos, y luego otro día está aquí. No importa cuánto ames a alguien, no importa cuánto desees que la eternidad sea real, el tiempo pasa; y las personas con él.

MC- Kicho, yo... no quiero que estemos separados. Deberíamos estar teniendo este tipo de conversaciones todo el tiempo. Mañana, y pasado mañana, y el día siguiente también.

Él no dijo nada.

MC- No quiero tener que encontrarte por casualidad en la ciudad después de una oración. Quiero despertarme contigo a mi lado. Yo...

KICHO- MC.

De repente, estaba en sus brazos. No había distancia entre nosotros, físicamente, pero sentía un abismo en mi corazón.

MC- ¿Tú sientes lo mismo? ¿O solo soy yo?

KICHO- ...No puedo responder a eso. Porque cualquier respuesta sería cruel para ti ahora.

Se apartó de mí y tomó mi mano con ternura.

KICHO- ...Lo siento.

MC- ¿Por qué te estás disculpando?

KICHO- Porque he ido demasiado lejos como para poder regresar.

Sonrió al girarse hacia la luz. La única sombra oscura en un mundo dorado.

KICHO- Me alegra que hayamos hablado. Me alivia saber que tienes cosas que amas esperándote en el futuro. Asegúrate de regresar allí, MC.

MC- ¿Sabes sobre el agujero de gusano?

KICHO- Lo redescubrí recientemente, sí. Y al pasar tiempo contigo hoy, parece que ya no sufres ningún síntoma.

MC- No que yo haya notado. ¿Entonces también crees que el futuro ha vuelto?

KICHO- Sí.

MC- Kicho, ¿qué estás intentando hacer? En el consejo decían que te uniste a Motonari para recuperar tu antigua casa mercante. Estás poniéndote en serio peligro.

KICHO- ¿Entonces los Oda van a invadir Sakai?

(...Supongo que lo confirmé sin querer, ¿eh?)

Cerré la boca, pero ya era tarde para reparar mi desliz accidental.

(No es que pareciera sorprendido. Probablemente ya sabía que esto pasaría por sus acciones.)



#5814 en Novela romántica
#2454 en Otros
#377 en Novela histórica

En el texto hay: ikemen sengoku, cybird, kicho

Editado: 18.07.2025

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.