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🫀 Capítulo 1 🫀

...Sin decir ninguna palabra más, nos empezamos a besar. Quién necesita palabras cuando con los besos se puede comunicar mejor, incluso sentir sus emociones. En este caso, sentía el deseo que Blake sentía por mí, porque eso era lo que éramos, deseo.

Me senté a horacadas sobre su regazo para besarnos mejor, el vestido se me levanto más revelando un poco más de piel que el aprovechó en tocar, halé su cabello negro igual que sus ojos, lo sentía más largo, pero de igual forma me gusta.

Me tomó de las caderas y me restregó más contra su erección, mis bragas se mojaron más, jadee entre sus labios. Levantó más el vestido a la altura de mi cintura y sin ningún descaro me toco por encima de la tela, gemí. Repartía besos húmedos en mi barbilla y cuello, movía más las caderas y su dedo se enterraba más en mi interior.

—¿Te gusta esto Butterfly?

—S-si —mi voz salió entrecortada por los gemidos.

—Y a mí me gusta que tu voz se corte por el placer... placer que yo te doy —mordió el lóbulo de mi oreja.

—Joder...

No soporte más y desabroché su cinturón, después el botón y por último baje la bragueta de su pantalón, metí la mano entre su ropa interior, estaba duro.

—Mierda... Butterfly.

Saque su pene del pantalón...

La tímida Allison cerró el libro en cuanto sintió los pasos de alguien acercarse, no quería que leyeran las cosas impuras que leía, le daría vergüenza.

—¿Qué lees, preciosa?

No pudo ocultar la rojez de su rostro, tomo el libro y oculto la mitad de su rostro, con una mirada tímida miro a su novio.

—Este libro —enseño la portada del libro con portada inocente pero dentro los protagonistas se daban como cajón que no cierra. Eso pensaba Allie.

—Mi lectora preciosa —Harry le dio un beso en la frente, sonrojando más a Allie.

—¿Vas a salir? —vio arreglado a su novio que supuso eso.

—Sí, voy a ver a mi mamá, hace tiempo que no vas tú.

—Lo sé, solo que con la universidad y mis escritos apenas tengo tiempo de respirar.

—Lo sé, ella lo entiende, pero también quiere ver a su nuera favorita.

—Soy su única nuera —dijo riéndose.

—Quien sabe, quizás Henry ya tiene novia en el kínder.

—Tiene cinco años.

—Yo también ya tenía novia a esa edad —Allison elevo una ceja—. Solo me duro una semana, pero fue mi novia.

Allison volteo los ojos y siguió con su lectura. Harry tomo las llaves de su auto y se acercó a su novia.

—¿No vienes?

—Tengo exámenes y tengo que estudiar. Además de que quiero tener una noche de chicas con mis amigas en videollamada.

—Está bien, pero la próxima semana te quiero disponible para cenar con ellos.

—Claro amor.

Se despidió de su novia con un beso y después se fue a su habitación, no mintió, tenía exámenes en dos días y quería aprovechar el tiempo para estudiar. Allison se consideraba a sí misma como nerd, pero sin las gafas y los brackets, aunque si utilizaba lentes, pero solo para lectura o dispositivos; no era muy sociable, su grupo de amigos se reducía a sus tres amigas y su novio. Le encantaba leer y escribir; su doble vida es que era escritora, solo su novio lo sabía y aun así le daba pena compartir sus escritos. No era una gran escritora, sus libros apenas superaban los cinco mil lecturas y mil votos en Wattpad, quería conseguir más lectores pero con la universidad apenas tenía tiempo para escribir, aun así se siente afortunada por los números de lectores que tiene.

Estaba estudiando psicología, le causaba intriga la mente del ser humano y también quería ayudar a personas con algún tipo de trastornos mentales. Una chica con sueños.

Cuando sintió que ya había estudiado suficiente, entro al grupo que tenía con sus amigas en común e hizo una videollamada. Cuando no podían reunirse hacían pijamadas virtuales donde se ponían mascarillas, comían botanas y platicaban de chicos. Tenía veintiún años, quería disfrutar de su juventud. De todas ella era la más tranquila y la que tenía novio, sus amigas aún estaban en busca de su príncipe azul o de su sugar daddy.

—¿Y eso que no saliste con Harry, Allie? —pregunto su mejor amiga, Diana, el tono que uso le pareció extraño, como ¿celosa?

—Pues fue a ver a sus padres, ya sabes, cena familiar y pues no quise incomodar; además de que tenía esta pijamada con ustedes, no la quería cancelar.

—Por nosotros no te hubieras preocupado, lo entenderíamos —hablo Angie con una mascarilla de aguacate en la cara comiendo papas fritas.

—Hablando de tu relación con Harry, ¿cómo va tu relación con él? ¿acaso se oyen las campanas de la iglesia? —le lanzó una mirada pícara Kim, otra amiga del grupo.

Diana puso los ojos en blanco, su comportamiento era extraño para Allie.

—No lo creo, aún somos jóvenes y no estamos listos para ese paso.

—Nunca es tarde para soñar, no cuesta nada.

—Aún sigo sin entender como de todas nosotras que salimos a fiestas, ligamos con los chicos más guapos, no tenemos novio y tú que no haces nada de eso te conseguiste un novio como Harry, pasa el consejo —el tono que utilizo Diana no le gustó nada, como ¿envidia?

—En veces, eso no es necesario para conseguir un buen hombre, así nunca vas a conseguir un buen novio.

Diana entreabrió los labios indignada, le había ofendido el comentario e hizo lo posible por mostrar lo contrario.

Las demás chicas notaron la tensión que se formó e intentaron disiparla.