Knigth: El ultimo en pie

CAPITULO 1

ITALIA

ELICA

Elica Bentter se pasea con su cachorro, un pastor alemán muy listo y bien educado, salió a trotar por un parque en Italia, ella no se preocupa por los Knight ya que ellos solo habían atacado un edificio de Ahmar Lentovak y eso quería decir que no tenían gran información sobre todos los miembros de ONU o habrían atacado a uno de ellos directamente y, eso le da cierto tipo de tranquilidad, pero al mismo tiempo debe estar alerta porque les están siguiendo el rastro y aún ellos no saben quienes son los Knigth, lo más curioso es que el ataque solo lo hicieron dos Knight y uno era el que estaba congelado, probablemente se divieron para recaudar más información y el ataque solo era una distracción, pero con ellos nada es seguro y después de desaparecer casi un año destruyeron un edificio, no tenía mucho sentido, pero no se pueden confiar, un movimiento falso y podría significar la muerte, al llegar a su casa continuó dándole vueltas al tema de los Knight y todo lo que sabe de ellos, debía de haber alguna pista de quienes son y donde están, tomó una ducha y dejó al perro comiendo en la sala, su casa es bastante grande con cuadros de hermosos paisajes colocados en las paredes blancas, Elica es una amante de las pinturas y todo lo que tiene que ver con arte, unicamente en su habitación hay unas cuantas fotos de ella, en dos de ellas está con su hermana y su madre, esas dos fotos le traen muchos recuerdos de su infancia en Francia. Después de ducharse se puso un traje formal que dejaba a la vista el excelente cuerpo que poseía y hermoso cabello negro que completan una imagen de una mujer seria y hermosa, ya era el momento de volver a Francia y su visita a su amiga Annata había terminado. Desde que Diego les propuso la idea de ONU a todos ella y Annata se habían llevado bien, en poco tiempo se hicieron buenas amigas ahora de vez en vez ellas se visitan, sus situaciones de trabajo no dejaban que eso pasara muy amenudo y con el gran problema que tenía Annata las cosas se complicaban aún más, pero por suerte Sehun estaba ayudando a Annata y también contaba con la ayuda de Elica, Annata era muy tierna, pero tambíen tenía su lado rudo y por eso era la más indicada para encargarse de los tipos que estaban bajo tierra causando problemas, Elica terminó de ponerse sus medias negras que le llegaban sobre la rodilla después se puso sus tacones negros, ella prefería usar falda porque siempre sintió que tenía las piernas para lucirlas, en ese momento sonó el timbre de la casa, alguien le buscaba, Elica se puso en pie y se dirigió al comunicador

  • ¿Quién es? – dijo Elica en un tono molesto
  • Así tratas a un amigo
  • ¡Agh!, ya casi salgo Kia – Kia era un gran amigo de Elica y Annata además de ser uno de los mejores científicos de Elica, Kia ya había aportado mucho en sus nuevos proyectos ayudando a Annata y Sehun
  • Ya era hora – dijo Kia apenas Elica abrió la puerta, al abrir la ella le dedicó un vistazo a Kia, era alto delgado y siempre vestía de traje entero
  • ¿Ya nos vamos? – el cachorro de Elica estaba atrás de ella, a pesar de ser un cachorro estaba muy bien entrenado y siempre cuidaba de ella
  • Sí, Annata no va a poder venir – agregó Kia
  • Entonces vamonos ya, tengo mucho que hacer, ven Azal – el cachorro obedeció al instante y así Elica y Kia se dirigieron de vuelta a Italia
  • ¿Y qué vas a hacer Elica? – preguntó Kia iniciando la conversación
  • No puedo esperar a que los experimentos den resultados, así que he estado trabajando en un virus para acabar con los Knight
  • ¿Y funcionará? – preguntó Kia con un pequeño brillo de curiosidad en su mirada
  • Pues más vale que sí o sino podría matar a miles de humanos
  • ¿No crees que arriesgas mucho?
  • Creo en hacer lo correcto y lo correcto es acabar con ellos – respondió Elica secamente
  • Batante tenebroso
  • Sabes bien que eso no me importa

La conversacion de ambos se había centrado mucho en los Knight y lo que harían con ellos, pero así debían estar todos los miembros de Onu.

 

EL CASCO

KALO

  • Neir te lo había dicho, aún te falta entrenamiento – cuando atacaron un edificio de un tal Ahmar Lentovak, Neir perdió el control y destruyó todo, tenían la sospecha de que ese Ahmar tenía algo que ver con los de Onu
  • No me falta nada – dijo Neir aburrido
  • Claro que sí niño, si tuvieras entrenamiento no habrías destruido ese edificio – Kalo no paraba de ragañar a Neir
  • Eso fue divertido… además nadie nos iba a decir donde estaba ese tipo – dijo Neir con su cabeza inclinada mirando al suelo
  • Tú no diste tiempo de hacer que alguien hablara, niño tú no controlas tus poderes así que tienes que hacer esto – le reprendió Kalo
  • Pero a mí me da mala idea el yoga, además ¿para qué yoga? – dijo Nier que pensaba que era una completa perdida de tiempo
  • Porque es la forma más sencilla de unirte con el poder de Knight… Solo hazlo niño – ordenó Kalo
  • Bien, bien… ¿Me siento así?... ¿Qué tengo que hacer con las manos? – dijo Nier mientras bucaba alguna pose para sus manos
  • No niño así no, mejor mirame a mí – Kalo se sentó en el suelo frente a Neir con las piernas cruzadas y las manos frente a su pecho haciendo un círculo con ellas
  • ¿Es solo eso? Me hubieras dicho – Neir imitó la postura de Kalo, le pareció muy simple y no sentía nada especial al hacerla, pero después de varios minutos en esa pose y con los ojos cerrados… Neir no sentía nada y empezaba a impacientarse
  • Niño no te muevas tanto solo concentrate – dijo Kalo al ver al niño  inquieto
  • ¿En qué diablos quieres que me concentre? – dijo Neir molesto
  • Aah… Lo lamento niño había olvidado decirte esa parte – Kalo soltó una risa de vergüenza
  • No sabes cuanto te odio en este momento maldita copia del capitan ame…
  • Ya callate niño – dijo Kalo interrumpiendo a Neir. – primero piensa en cómo te sientes al usar el poder… ¡Cierra los ojos y haz lo que te digo! – escupió Kalo mientras Neir balbuceaba . – ahora concentra ese sentir en el centro del círculo que hacen tus manos… ¡no niño! el fuego se sale del círculo… Menos, menos, ¡no!... ¡Agh vuelve a hacer el fuego que ya se te apagó!... ¡no tanto niño!... menos, ¡así! Mantenlo, mantenlo… otra vez se apagó, ¿que te pasa Neir?
  • ¡Esto es muy difícil para mí!
  • Lo sé por eso lo tienes que hacer, así es como podrás controlar tu energía para que no se desborde como sucede ahora – explicó Kalo
  • ¡Pero ya me siento cansado!
  • Ya lo se niño y es ovbio porque tú no controlas tus habilidades, eso provoca que te canses tanto, tienes que aprender a controlar eso
  • Y yo que pensé que todo había terminado cuando aprendí a crear fuego – el tono Neir fue bastante desanimado
  • No niño eso solo fue el comienzo de tu entrenamiento, ahora debes aprender a controlar y medir el fuego que creas – el niño inclinó la cabeza desanimado porque pensaba estar listo
  • Bien voy a seguir
  • Niño hagamos un trato... Cuando logres esto te responderé algunas preguntas sobre los dioses ¿qué te parece? – el niño sonrió enormemente
  • Perfecto ¡ya veras Kalo lograré esto en un abrir y cerrar de ojos! – Kalo había acertado con lo que escogió para motivar al  niño
  • Bien niño mientras sigues voy a ver si encuentro algo de ese tal Ahmar – Neir no prestó atención a Kalo, estaba muy concentrado en su nuevo entrenamiento.




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