CAPITULO 24

Una semana transcurrió con normalidad, al parecer algunos rebeldes habían sido capturados intentando escapar del reino .

-Pedir por tu libertad ahora resulta como escape- soltó Cail con molestia 

-Las cosas están picantes e intentar salir sin permiso es suicida – respondió Aldous 

-El rey está paranoico últimamente – soltó Evant – escuche eso de las sirvientas 

-Creí que las sirvientas no salían de palacio – respondió Cail con asombro 

-Al parecer esta vez las dejaron salir – Evant leia con paciencia un libro – las escuche mientras iba a la tienda de mi tio a traer algunas hierbas

El golpe de palos y ollas hizo saltar a todos los que estaban reunidos , una gran muchedumbre pasaba al frente de la posada exigiendo la cabeza del rey.

-Que diablos sucede – Aland bajaba con un pequeño bebe en sus brazos – intentaba hacerlo dormir 

-Lo averiguaremos – Cail intento abrir la puerta 

-Espera – Aldous se paraba – necesitamos ser más precavidos – tenemos un techo podemos mirar todo – pausando – pero tu Aland sube y mira que sucede en la calle nosotros taparemos las ventanas y puertas 

-Dudo que quieran entrar la gente de esta ciudad es  honrada – hablo Cail 

-Créeme muchacho el miedo es más fuerte que el hambre pero ahora parece que esos papeles se revirtieron  - Aldous miraba con sigilo por las rendijas 

-Mierda al parecer es una protesta – Aland bajaba corriendo – está a punto de surgir un enfrentamiento 

-Tan pronto – hablo Cail – eso podría ser imposible la gente en este reino nunca se levantaría repentinamente 

-Existe una primera vez para todos – explicó Chloe apareciendo 

El golpe abrupto de la puerta advirtió que algo sucedía , todos subieron presurosos a la azotea viendo como varios soldados corrían y abatían sin piedad a los civiles.

-Marco – Cail divisaba entre la gente herida y tirada a un hombre conocido para el 

-Ese idiota – Aldous dio un salto 

-Aldous – Aland intento seguirlo siendo detenido por Evant

-Hombre te mataras – explicó Evant

Cail bajó raudamente las escaleras desbloqueando la puerta y corriendo hacia el herido hombre 

-Vete – hablo Marco – escuchen que vendrán los alados

Un pelotón de soldados aparecieron con lanzas dispuestos a acabar con quien osase levantarse contra las órdenes del rey Avar.

-Es nuestro amigo – explicó Cail – él fue envuelto en la protesta que pasaba.

-Sí estuvo envuelto quiere decir que también es un rebelde – el soldado mostraba una sonrisa apuntando 

-Hora de poner en práctica tu entrenamiento – susurro Aldous – seré tu escudo 

-Espera- 

Aldous se lanzó contra los soldados derribando los , asestando golpes y partiendo unas cuantas ´piernas 

-Hace mucho que no me ejercito – golpeando a un soldado en el vientre – tus pequeñas armaduras no son más que papel ante mis manos

Cail intentaba levantar a Marco , aunque su pesado cuerpo dificulta el rescate , un golpe en su espalda lo lanzó al piso siendo aplastado por el peso de Marco.

-Alejate de mi amigo – aparecía Aland mientras junto a Yan peleaba contra un soldado – eres difícil de quebrar no eres como esas basuras que están siendo aplastados por Aldous

-Así que el guerrero Aldous también está metido en la protesta de los rebeldes – sonrió el soldado – será grato para mi regresar e informar esto al jefe 

-Quien te dijo que regresaras con vida - Aland mostraba una mirada oscura  acelera con más rapidez en sus movimientos y acertando golpes letales que en segundos lanzó al soldado al piso en un charco de sangre.

-Matarme significa un acto de terrorismo , estas yendo contra las ordenes de su majestad – el soldado lanzo un gran escupitajo de sangre.

-Yo no tengo ningún rey – Aland perforó el cráneo del hombre que minutos antes lo amenazaba- con mi familia nadie se mete – lanzando un escupitajo sobre el cuerpo inerte.

Cail observaba la escena que se alzaba frente a él , dos guerreros que no temen matar durante la batalla , que con honor y fuerza peleaban frente a los soldados.

-La plaza debe parecer una masacre – hablo Aldous sacudiendo sus puños

-No me digas que el gran Aldous se canso – Aland mostraba burla 

-Esta vez te excediste mocoso – Aldous miraba asqueado la escena – te dije que debes contenerte.

-Decirlo es fácil – mirando a Cail – vamos hombre no puedes cargar a Marco- aproximándose hacia Cail ayudándolo a cargar a Marco

Los tre hombres entraron en la posada asegurando la barricada que hicieron anteriormente 

-Saben lo que hicieron – hablo Evan – estamos más que jodidos los guardian vendrán y nos harán papilla 

-Echémosle la culpa al grupo Pugna – hablo Aldous tomando lentamente una cerveza que se sirvió – podemos decir que el segador vino y los asesinó