♠️ Capítulo 17♠️

La puerta fue abierta nuevamente y entró Alan, su rostro reflejaba confusión al ver a la chica ahí.

—¿Qué haces aquí Paola? Te dije que esperarás en la Sala.

Con eso me confirmó que ella no mentía.

—Escuche que se había despertado y vine para ver si no necesitaba algo, pero que bueno que llegas, dale las vitaminas para que se recupere.

—Yo no necesito eso —digo y me levanto de la cama, ya recuperada

—Una Disculpa no me he presentado, Soy Vanessa, Demonio de la Irá, protegida de Lucifer.

Ella se sorprende y me examina con la mirada.

—Eres tú, eres la princesa del inframundo.

—¿Qué?

—¿No lo sabías? Todos te conocen así, tanto brujas, Vampiros, lobos, todo ser sobre natural sabe que Vanessa Hernández es la princesa del inframundo.

—Valla, eso explica muchas cosas, ahora entiendo el comportamiento de todos.

—¿No lo sabías?

—No, hace poco tiempo que me convertí en un Demonio en su totalidad, así que no estoy tan enterada de eso.

Ella me sonríe, su aura es tan tranquila, no entiendo por que Alan hizo eso, si tan solo hubiera sabido que tenía Prometida nunca lo hubiera besado, pero ahora ¿Cómo podría sacarlo de mi corazón? Cuando ya estoy completamente enamorada de él.

—No sabía que estabas comprometido Alan.

Él me miró sorprendido y se dispuso a hablar, pero ella se le adelanto.

—No le gusta mucho, mi padre nos ha obligado a comprometernos, incluso mi hermana mayor nos vigila para que no hagamos nada.

—Entiendo, aún así supongo que se casarán.

—Si, estamos retrasando la boda cada que podemos, pero llegará el momento en el que eso pasará.

Esas palabras llegaron a mi corazón, eso era un hecho, yo odio las mentiras y Alan me había mentido.

—Muchas gracias por sus cuidados, pero tengo que irme.

—Te llevo a tu casa —Dijo Alan haciendo que lo mire por primera vez desde que llegó.

—No, me voy sola.

—Vanessa...

—Dije que no y si quieres seguir siendo inmortal, será mejor que no te me vuelvas acercar en toda tu larga vida.

Dicho eso, un remolino de fuego me envolvió sacándome de ahí. Llegué afuera de casa, al momento de entrar, James estaba con las gemelas.

La presión en mi corazón no se iba, era una punzada Justo en el corazón, Mía se acercó rápidamente hacia mí para llevarme a mi habitación.

—¿Qué es esto que siento?

—Es tu primer corazón roto amiga.

Las Lágrimas comenzaban salir de mis ojos sin que yo pudiera controlarlo.

—Llora amiga, eso calmara tu dolor.

(Al dia siguiente)

—Muy bien niñas, ahora que las cosas han cambiado, pueden invocarme como les he enseñado, yo llegaré al instante con ustedes ¿De acuerdo?

—De acuerdo.

Lía las llevo a la escuela mientras yo me alistaba para irme también, tenía que seguir con mis estudios o de lo contrario el gobierno vendría por mis hermanas y eso no lo puedo permitir.

El sonido de una moto me saco de mis pensamientos, James ya había llegado por mi.

—Hola Guapa, es bueno que ya estes bien —dijo dándome un abrazo.

—Me siento mejor ya, ahora tengo que poner orden en ese lugar, tengo que tomar el control de varias cosas que dejo mi tío, así que hay mucho por hacer.

—Entiendo, por cierto, ayer encontraron los cuerpos de Ericka y su hermano, así que la muerte de Nanci ya fue vengada.

—Muy bien.

—¿Fuiste tú?

—Tal vez.

Ambos reímos y emprendió marcha hacia la institución.

—Me encontré a Alan está mañana, dice que quiere hablar contigo.

—No quiero saber nada de ese mentiroso.

Le conté todo lo que paso ayer, cómo fue que me enteré que él estaba comprometido.

—Ella es muy dulce, pero su familia es tan sádica que su hermana mayor los mandado a seguir, para evitar que se desaparezcan, me gusta Alan estoy muy enamorada de él, pero no pienso perdonar una mentira, no me gustaría ser la amante en esa relación.

—Tienes razón, tú vales mucho más.

Al llegar vi en la entrada una foto de Nanci, junto con muchas flores, varios chicos iban llegando y le colocaban flores, era un hermoso omenaje a ella.
Al llegar al aula era casi igual, su asiento estaba con flores, peluches que a ella le gustaban, podía jurar que más de un chico seguía sufriendo la muerte de Nanci, desde que ella entró a este salón más de uno quedó fechado por ella, pero James fue más rápido y se ganó su corazón, pero eso a ellos no les importó y seguían enamorados de ella.

Me hacía falta, la extrañaba tanto y los chicos igual, varias chicas quisieron aprovechar el momento, tratando de tomar el lugar de Nanci pero eso nunca iba a pasar, nadie tomaría su lugar.

Las clases pasaron lentas, hasta que por fin podíamos salir de ahí, los chicos querían ir nuevamente a la cafetería, pero yo tenía trabajo que hacer, tenía muchas responsabilidades y tenía que cumplir con todas.

Ellos se fueron y yo tomé otro rumbo pero me arrepentí al ver a Alan esperándome.

—Vanessa, necesito hablar contigo, necesito explicarte muchas cosas.

—Ahorrate tus excusas, sabes perfectamente que odio las mentiras.

—Lo se, por eso quiero contarte todo, Vanessa estoy enamorado de ti...

—¡Cállate! Entiende Alan, te vas a casar y yo no pienso ser la amante aunque me gustes y te quiera tanto.

—Por favor Vanessa, Paola sabe que estoy enamorado de mi, ella acepta que salga contigo, estamos buscando la manera de que esté compromiso se acabé.

—Entonces búscame cuando eso pase, ahora que soy inmortal el tiempo no es nada para mí.

—Por favor Vanessa, dame una oportunidad, quiero iniciar algo contigo, solo una oportunidad es lo único que te pido.

—No Alan, no pienso ser la otra, ahora soy una Princesa a la vista de todos los seres sobrenaturales, no me merezco ser la otra.

Dicho eso seguí con mi camino dejándolo ahí completamente sólo. Se que lo amo, pero no iba a ser la otra, no ahora que tengo mucha responsabilidad en mis hombros, yo no sabía que era una princesa para el inframundo. Pero ahora tenía que comportarme como tal.