La Arepa Mágica

Capítulo 5: La Confrontación (Con Sabor A Desastre)

El silencio en la cocina de Maru era tan denso que casi se podía cortar con un cuchillo. La arepa destrozada de Nando yacía en un plato, la farsa de Maru estaba expuesta por su propia madre, y el "Live" en Instagram era ahora una historia de vergüenza nacional.
Maru, con el delantal aún puesto, señaló con el dedo la arepa. "Así que... ¿esto es el famoso 'plato deconstruido'?".
Nando se encogió de hombros, resignado. "No es deconstruido. Es un desastre. Soy un desastre haciendo arepas. Y no soy 'chef'. Trabajo en contabilidad. Y soy un 'freelancer del sabor' solo en mis sueños".
Maru se llevó una mano a la cara y se rio, una risa que sonaba a alivio. "Y yo no soy 'chef' tampoco. En realidad, no sé cocinar. Soy una farsa. Todas esas fotos... son de restaurantes. Mi 'laboratorio culinario' es el microondas y mi único talento es el Photoshop".
Nando se sorprendió. "¿De verdad? Pero... las fotos... la empanada".
"De un restaurante, Nando. De un restaurante en Chacao. Yo... yo solo quería impresionar a mis seguidores y conseguir algo de contenido original. Pensé que tú eras un artista de verdad y que me ayudarías a crear algo 'auténtico'".
"Y yo pensé que tú eras una chef profesional que me ayudaría a arreglar mis arepas", admitió Nando. "Y que quizás... no sé... encontraría una conexión".
El ambiente cambió. La vergüenza inicial se transformó en algo más, en una complicidad por sus propios fracasos. Se miraron a los ojos y estallaron en una carcajada. Se rieron del "Live" en Instagram, de la madre de Maru, de la arepa rota y de la increíble cantidad de mentiras que habían dicho para llegar hasta ese momento.
"Así que...", dijo Nando, recuperando el aliento. "Somos un par de impostores. Un 'destructor de arepas' y una 'chef fantasma'".
"Exacto", respondió Maru, secándose una lágrima de la risa. "El peor 'match' de la historia de '¡Tengo Hambre!'. Y sin embargo... no me he divertido tanto en mucho tiempo".
Nando asintió. "Lo mismo digo. Siento mucho lo del 'Live'. Mi única intención era... impresionarte".
"Y lo hiciste", dijo Maru, con una sonrisa sincera. "No con el plato, sino con la honestidad. Y ahora que las cartas están sobre la mesa, ¿qué te parece si vamos a un lugar donde la comida no sea una farsa?".
La propuesta tomó a Nando por sorpresa. "¿Una segunda cita?".
"No", dijo Maru, "una primera cita real. Sin budares, sin fotos falsas, sin 'deconstrucciones'. Solo... comida de verdad".
Nando le devolvió la sonrisa. "Me parece perfecto. Pero esta vez, yo escojo el lugar".
El pánico volvió a los ojos de Maru. "¿Qué tienes en mente?".
"Conozco un lugar que vende las mejores empanadas de cazón de la ciudad", respondió Nando. "Son tan buenas que no necesitan un 'filtro' de Instagram".



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En el texto hay: humor, comida, romance y humor

Editado: 10.10.2025

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