La Arepa Mágica

Capítulo 18: La Boda Imperfecta (El Gran Desafío)

El camión de comida no fue el único proyecto de Nando y Maru. La propuesta en la empanadería abrió el camino al mayor desafío de sus vidas: planificar su boda. La familia de Maru, tradicional y conservadora, insistió en un planificador de bodas profesional. Y así, se encontraron en la oficina de la temida y ultra-organizada Señora Josefina.
"Entonces, mis queridos", dijo la Señora Josefina, una mujer impecable con un moño perfecto y un traje a la medida. "El tema para la boda será 'Elegancia Tropical'. Todo en tonos crema y dorado. Tendremos un banquete de cuatro platos y una orquesta que tocará música clásica. Y, por supuesto, un pastel de bodas perfecto".
Maru y Nando se miraron. La "perfección" era su principal enemigo.
"Señora Josefina, verás...", empezó Nando, con una sonrisa nerviosa. "Nuestro tema es más... 'Imperfección Mágica'. Y en lugar de una orquesta, queríamos poner un poco de gaita".
"¿Gaita? ¿En una boda de elegancia?", exclamó la planificadora, como si le hubieran propuesto servir sancocho en copas de champán.
Maru tomó la palabra. "Y en cuanto al pastel, nos gustaría uno que sea un... tributo a nuestra historia. Un pastel en forma de arepa, pero que parezca que está un poco rota".
La Señora Josefina se rio, una risa seca que sonaba a papel de lija. "Una arepa... ¿en un pastel de bodas? Eso es inaudito. Y, ¿de qué sería el relleno? ¿Queso de mano?".
"¡Exacto!", exclamó Nando. "Y para el catering, queremos usar nuestro camión de comida. 'La Arepa Mágica' serviría todas las arepas. ¡Incluso podríamos hacer un video en vivo de los invitados rompiendo sus arepas! Sería un desastre, pero un desastre divertido".
El rostro de la Señora Josefina se puso tan pálido como una arepa cruda. "Esto no es una broma, ¿verdad? Mis bodas son impecables. Sin errores. ¿Cómo le voy a explicar a la familia que el pastel se rompió?".
Nando y Maru se dieron cuenta de que estaban en una encrucijada. La Señora Josefina quería una boda que reflejara la falsedad y la perfección que ellos tanto odiaban. Querían una boda que los representara, pero no querían decepcionar a sus familias.
"Señora Josefina, no se preocupe", dijo Maru, con una sonrisa que no le llegaba a los ojos. "Creemos que... es mejor que sigamos con lo que nosotros sabemos hacer. Nos encargaremos de la boda. Con nuestras reglas".
El rostro de la Señora Josefina se tensó. "Como deseen. Pero que sepan que una boda sin mi supervisión puede ser un desastre".
Maru y Nando se miraron y se rieron. "¿Un desastre? Señora Josefina, el desastre es nuestro talento. Es nuestra magia".
El gran desafío de su romance no era el dinero ni la fama, sino la presión de ser perfectos para el resto del mundo. Y ellos, con un beso y una sonrisa, decidieron que el amor, al igual que sus arepas, no necesita ser perfecto para ser real.



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En el texto hay: humor, comida, romance y humor

Editado: 10.10.2025

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