La Bestia Y La Bella

CAPÍTULO 61

CAUSALIDAD

La vida continuaba. Su cabeza se lo repetía constantemente, tal vez en algún momento lo creyera así. Acomodó una vez más el libro de el aparador con el último bet seller de éxito de la temporada, pasó una mano por su trenza y de pronto se sintió harta de todo. Suspiró con impaciencia y dejó el volumen ahí sin importarle si estaba perfectamente acomodado.

- maldición - musitó moviéndose incómoda al salir del pequeño ventanal.

- ¿Mal día? - Inquirió Peter cruzando los brazos sobre su pecho.

Milly levantó los hombros suspirando con fuerza.

- Lo estarías si tuvieras a un ex esposo que despertó de un coma insistiendo en algo que ya no puede ser - le dijo mientras caminaba hacia la bodega en busca de hacer cualquier cosa -. Además de estar embarazada y confundida y loca porque no sé que hacer y...

- Bueno, bueno - rió Peter siguiéndola -, en verdad estás muy mal. Ojalá yo pudiera estar en tú lugar.

Milly se volvió levantando una ceja.

- No creo que seria grato para ti - le dijo continuando su camino -, eres demasiado egoísta para estar en mi lugar. Yo tengo que pensar en mi hijo y en mí, en mi familia,y en Max a pesar de que no debería.

- ¡Vaya Milly, gracias! - le reclamó haciéndose el ofendido -. Esta bien puedo aceptar que soy egoísta, sin embargo creo que si pensaría en un bebe inocente que no tiene la culpa de que tome una mala decisión.

- ¿Crees qué estoy tomando una mala decisión?

- No sé cual es esa decisión - levantó los hombros -. Pero yo creo que si ya la tomaste deberías pensar en los pro y los contras de ello.

- Lo bueno y lo malo - suspiró Milly alargando una mano para encender las luces de la bodega -; estoy segura que lo que pudiera decidir al final tendría las mismas consecuencias.

- ¿Y el guapo doctor Colton?

- ¿Qué tiene que ver Sean?

- ¡Por Dios Milly! - Exclamó fingiendo estar escandalizado -, he visto como le has dado esperanzas y él las ha tomado muy en serio.

- Yo no..., he intentado que comprenda que para mí no es más que un amigo, no puedo ser nada más para él.

-Sin embargo, ¡El bello doctor está loco por ti muñeca! - rió mostrando incredulidad al ver la sorpresa de su amiga.

Milly frunció el ceño posando las manos en su cintura. Miró sin hacerlo realmente al cuarto iluminado en donde todavía había cajas sin abrir para el nuevo estante del bet seller a promocionar. Sabía muy bien que Sean quería algo más, pero también sabía muy bien lo que ella pensaba sobre eso. Él era para ella s amigo, un doctor que le había ayudado en esos momentos tan difíciles. Pasó una mano por su cabello suspirando. ¡Oh! ¡Estaba tan cansada! Quería encerrarse en su departamento y quedarse en cama sin pensar en nada más que su cachorro y adivinar como seria una vez que al fin lo tuviera en sus brazos. Miró a su nuevo amigo, su rostro afilado del que enmarcaban unas largas patillas rojizas hasta la barba sombreando sus quijadas. Posó sus ojos verdes en los color castaños de él.

- ¡Oh Peter! - musitó triste.

- Vamos Milly, nada puedes hacer - se acercó abrazándola -. Eres una mujer muy bella, los hombres se van a sentir atraídos por ti a pesar de que estés embarazada o casada; la bestia cometió el peor error al dejarte ir y ahora que tuvo mucho tiempo para pensar mientras estaba en coma se ha dado cuenta de lo que esta a punto de perder y no le ha gustado.

- Me hizo mucho daño - sollozó sobre la camisa blanca -, todavía es capaz de seguir haciéndolo y yo no quiero sufrir, lo que quiero es estar con mi cachorro y darle una vida tranquila y llena de amor sin todo esto.

- Lo sé muñeca, lo sé.

¡Otra maldita vista de algún doctor y se levantaría a golpearlos! Se movió brusco y un gemido salio de su boca al sentir el agudo dolor en su torso y hombro. ¡Maldición! ¡Hijo de perra! Con la mano libre tomó el vaso de cristal y lo arrojó furioso; el sonido del cristal haciéndose añicos no le calmó el mal humor.

Le habían prohibido bajarse de la cama hasta que no estuvieran listos los estudios y lo que él quería era moverse libre y buscar una solución a su problema con Lady Mildred.

Por ahora sabia muy bien que no serviría de mucho hacerla ir hasta su habitación de hospital, estaba muy seguro que no iría por su propia voluntad, no después de su ultima visita.

La puerta se abrió y un hombre alto y moreno entró como una tromba, se detuvo tenso y le miró furioso.

-¡¿Por qué demonios no me han avisado que ya estabas despierto?! - Inquirió en un tono demandante, tal como lo haría un hombre de su posición.

- ¿Te-nían qué... hacer-lo? - Gruñó Max enfadado.

- ¡Mierda Max! - Exclamó acercándose a la cama -, les ordené que tenia que ser el primero en ser avisado si había algún cambio en tu recuperación.

- Bue-no, por primera vez no has... sido la prioridad en es-te asunto - le anunció seco y lo miró indiferen -. Me disculpó por e-llo su majestad.

- Debería hacer algo al respecto - se detuvo estudiándolo desde la punta de sus oscuros cabellos hasta los pies ocultos bajo la sabana azul -. ¿Quieres hacer algo acerca de esto?

Max le miró frunciendo el ceño con curiosidad.

'Akil cruzó los brazos ciñendo la chaqueta de terciopelo violeta oscuro, Max ocultó la sonrisa, su amigo no parecía haber cambiado nada. Era el príncipe siempre perfectamente cuidadoso de su apariencia y elegancia a veces un poco pasada de moda.

- ¿De qué... mierdas ha-blas?

- Puedo hacer que cambien el mobiliario y las sabanas - pasó una mano por su bien cortada barba y le dijo burlón -, aunque con ese nuevo aspecto que tienes me sorprendería que todo haya cambiado totalmente.

- No te mo-lestes, quizá mientras estu-ve en coma me haya... gustado el color d-e las sabanas - suspiró con cansancio tocando la tela fresca.

Le miró y movió la cabeza divertido.

- Si no te escuchara pensaría que no eres realmente tu, sobre todo con ese cambio de imagen- se sentó en la cómoda silla junto a la cama -, sin embargo no me sorprende mucho ahora que he conocido a tus hermanos tengo que decirte que la sangre Blackthorne corre con fuerza por tus venas.



#1641 en Novela romántica

En el texto hay: romance, amor, bella

Editado: 05.11.2019

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