La bruja loca

El centro con la bruja loca

Evangeli

El pueblo del Topacio había vuelto a la rutina, pero la inquietud persistía. Las mariposas aún revoloteaban a nuestro alrededor, y su luz parecía un recordatorio de que la paz era frágil. Una mañana, mientras exploraba los límites del bosque, encontré un gato blanco, de ojos brillantes y mirada sabia. Se acercó a mí, y sentí una conexión instantánea.

“Soy Neve,” dijo el gato con una voz suave y melodiosa. “Vengo a advertirte sobre una nueva amenaza.”

“¿Una nueva bruja?” pregunté, sintiendo cómo la inquietud regresaba.

“Sí, la bruja de la nieve. Ha despertado de un largo letargo y busca venganza. Controla el frío y la escarcha, y su magia puede congelar incluso los corazones más cálidos.”

“¿Qué debo hacer?” inquirí, recordando las palabras del espíritu de las mariposas.

“Debes encontrar el Corazón de Hielo, un cristal que la bruja guarda celosamente. Sin él, su poder es limitado. Pero ten cuidado, su reino es un laberinto helado lleno de ilusiones que intentarán desorientarte.”

Con la determinación de proteger a mi pueblo, decidí buscar la ayuda de Neve. Juntos, comenzamos nuestra aventura hacia el reino helado de la bruja. Las mariposas, siempre leales, nos siguieron, iluminando nuestro camino con destellos de color.

Al acercarnos a la entrada del reino, el aire se tornó helado, y una niebla espesa comenzó a envolvernos. “Debemos mantenernos unidos,” advirtió Neve, sus ojos resplandecían con un brillo decidido.

A medida que avanzábamos, el paisaje cambió a un vasto mar de hielo, con formaciones cristalinas que reflejaban la luz de las mariposas. En el horizonte, se alzaba un castillo de hielo, majestuoso y aterrador.

“Ese debe ser el hogar de la bruja,” murmuré, sintiendo el miedo en el aire. Pero Neve me miró con confianza. “Recuerda, la clave está en la unidad. Juntos somos más fuertes.”

Entramos al castillo, donde el frío se intensificó y las sombras danzaban en las paredes. La bruja de la nieve, con su cabello plateado y piel como la escarcha, nos esperaba en el trono. “¿Qué os trae aquí, intrusos?” su voz resonó como un viento helado.

“Venimos a detenerte,” respondí con valentía. “Tu magia ya no puede mantenernos alejados.”

Ella rió, una risa glacial que reverberó en el aire. “¿Creen que pueden desafiarme? Mi poder es eterno.”

Neve se adelantó, su voz firme. “Tu magia se basa en el miedo. Pero la unión de nuestros corazones puede derretir incluso el hielo más profundo.”

La bruja, furiosa, levantó su mano y lanzó un viento helado hacia nosotros. Las mariposas formaron un escudo, pero el frío era intenso. “¡Debemos concentrar nuestra fuerza!” grité, sintiendo la energía de mis vecinos y de Neve a mi alrededor.

Conecté mi mente con las mariposas y con el corazón de todos. “Juntos, ¡ahora!” El brillo de nuestras velas se intensificó, y un cálido resplandor comenzó a llenar el aire. Las mariposas danzaron en espiral, creando un torbellino de colores que se enfrentó a la magia de la bruja.

El viento helado se detuvo, y la bruja retrocedió, sorprendida. “¡No puede ser!” gritó mientras su poder comenzaba a desvanecerse.

Aprovechando el momento, corrí hacia un pedestal donde se encontraba el Corazón de Hielo, un cristal brillante que emanaba una energía fría. “¡Neve, ahora!” llamé.

Con un salto, Neve se lanzó hacia el cristal, usando su magia para romper el hechizo que lo protegía. En un instante, el Corazón de Hielo quedó libre. La bruja, al ver su poder desvanecerse, comenzó a gritar. “Esto no ha terminado. Volveré, y la nieve cubrirá todo lo que aman.”

“Puede que regreses, pero no lo harás sola,” respondí, sosteniendo el cristal en alto. “La unión de nuestros corazones es más fuerte que tu hielo.”

Con el Corazón de Hielo en nuestras manos, la bruja fue absorbida por su propia magia, desvaneciéndose en un torbellino de escarcha. El frío comenzó a desvanecerse, y el castillo de hielo se derrumbó, dejando un paisaje cálido y lleno de vida.

Regresamos al pueblo, más fuertes que nunca. Neve se convirtió en nuestro guardián y amigo. Con la magia de las mariposas y la unión de nuestra comunidad, sabíamos que cualquier amenaza futura podría ser enfrentada juntos.

Había un nuevo amanecer, y en el aire flotaba la promesa de un futuro lleno de esperanza y valentía. Terminar con la bruja loca del pueblo




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.