Desoladoras cacofonías provenientes de gélidas ventiscas resonaron a lo largo de un oscuro paisaje pos apocalíptico
inmensos desiertos interminables por el que oscuras sombras apenas visibles se arrastraban como mareas a través de lo que algunas vez fueron bosques o metrópolis repletas de actividad
En alguna desconocida ubicación de estos paramos helados, corruptos, y tenebrosos cuya luz del sol era bloqueada por gruesas capas de nubes tóxicas, Yacían esparcidos por el suelo Cadáveres mutilados, restos de órganos y viseras completamente inertes, su carne expuesta al aire helado no solo no se congelo si no que bajo un extraño proceso de digestión cada trozo de carne era rápidamente procesado por un extraño miasma incorpóreo que lo impregnaba todo en la atmosfera
Entre estos restos que comenzaban a ser asimilados por la oscuridad, hubo algunas cabezas decapitadas, estas pertenecían a aquellos más afortunados que habían quedado en una sola pieza, estás estaban esparcidas por el suelo pero sus rostros se mantenian mayor mente ocultos, ya que sobre sus caras hubo respiradores artificiales que en vida habían ayudado a mantener sus funciones vitales en semejante yermo de muerte
A través del cristal de dichos respiradores se podían distinguir algunos pares de ojos apagados, aunque solo se podía ver esta parte de sus rostros estos fueron suficientes para darse cuenta que estas personas habrían tenido una larga vida de sufrimiento antes de llegar aquí
Esos ojos vidriosos y secos, al verlos trasmitían una sensación de cansancio y soledad incomparable, no solo hubo cabezas adultas si no que algunas relativamente mas pequeñas que trasmitían cierto nivel de inocencia dieron a entender que el enemigo no perdono ni a los mas pequeños, al ver sus caras uno comprendería que la muerte no necesaria mente fue mala, al menos para estas pobres almas todo el sufrimiento, dolor y sacrificio que habían tenido que soportar hasta hoy... por fin terminaron
hombres mujeres, niños, ancianos, combatientes y no combatientes... algunos brazos estaban agarraros de sus palmas con otros, algunos cuerpos mutilados parecían que se abrazaban en un último momento de angustia, manteniendo la esperanza hasta el final, la esperanza de que alguien vendría a salvarlos, de que a ultimo momento un héroe levantaría su arma contra el mal y salvaría a los inocentes de esa oscuridad infinita...
pero sus esperanzas fueron en vano, aquel héroe por el que rezaban no llego y el mal lo consumió todo
aunque había montones de estos restos que alguna vez tuvieron vida no fueron los únicos aqui
todos estos cadáveres fueron acompañados por máquinas cuyas partes mecánicas emitían chispas de vez en cuando intentando cumplir la última orden que recibieron
partes de androides, rostros cuya piel fue carcomida por el miasma relevando una naturaleza mecánica artificial detrás de ellos, extrañamente alguno de estos droides también mostraban comportamientos extraños hasta el final de sus propias existencias, ya que algunos incluso estaban tomados de sus manos, acaso habrán tenido conciencia propia ? esta era una duda que nadie nunca mas resolvería... porque esto era el fin de todo
No hubo tiempo para ayudar a los heridos o enterrar a los muertos, no hubo quien se tomara la molestia de hacerlo, de las miles de millones de almas que alguna vez habitaron el planeta tierra, ya se habían extinguido casi todas
Estos cadáveres se quedarían aquí para toda la eternidad, no tendrían entierro digno o si quiera quien orara por sus almas
En el fondo de esta trágica escena llamaradas rojizas de decenas de metros de altura devoraban con rapidez lo que quedaba un transporte volador de quién sabe cuántos de cientos de metros de diámetro, su súper estructura metálica parecía como si hubiese sido partida a la mitad con un único corte certero, provocando que cayese sobre el lateral de la montaña a un par de kilómetros de distancia
un camino de pisadas en la arena estéril proveniente de dicho accidente, constataba que las personas a los que pertenecían los restos habían sobrevivido al impacto original, pero que algo los había ejecutado en tierra
En el cielo decenas de cientos de destellos brillantes parpadeaban como relámpagos en una tempestad aunque sin lluvia
varios minutos después de cada destello llegaban atronadores sonidos de explosiones, limitados por la velocidad del sonido dichas ondas de sonido sufrían un retraso desde el evento que las había provocado
Entre oscuridad, relámpagos y truenos algunos meteoros de fuego comenzaron a caer al rededor de los miles de kilómetros
Rodeada de todo este caos, destrucción, muerte y melancolía una figura femenina se encontraba parada sobre una roca oscura con un rostro sereno
portando un uniforme de marino blanco en cuyo pecho de lado izquierdo había toda clase de condecoraciones así como un martillo y una oz brillando en su centro
Su uniforme pulcro, perfectamente planchado acompañado de su largo cabello rizado pelirrojo y una apariencia sumamente bella cuyo única imperfección era un parche de pirata negro en su ojo derecho contrastaron con la oscura escena que le rodeaba
su único iris de un tono similar al fuego expuesto enfocaba hacia el horizonte, indiferente a lo que acontecía en sus cercanías
En su mano izquierda había una espada de energía azulada, con una apariencia europea mientras que en su mano derecha había un arma corta futurista repleta de contornos brillantes y que parecía ser un pequeño cañón portátil, a su alrededor hubo algunos cráteres, rayones brillantes de material incandescente y cientos de miles de pequeños agujeros de solo unos centímetros de diámetro en la arena daban señales de un reciente combate aunque ella misma no mostrara preocupación o importancia por el evento que recién había ocurrido
Frente a la chica pelirroja de uniforme blanco cuyo porte general emitía un aura de heroísmo y valentía había una pareja de militares, tanto un hombre como una bonita mujer de cabellos oscuros, pieles pálidas y ojos azules quienes agonizaban