Fue mi turno de curar tus heridas.
Tenias tres costillas rotas,una ceja lastimada , tus labios estaban partidos y moretones se dibujaban en tu frágil cuerpo .
Te sentías sucia.
Me pediste que te limpiará.
Yo lo hice.
Fue la primera vez que toque tu piel desnuda con tu permiso.
Solo te duche
Y aun eso, sabes, fue como tocar el paraíso.