Ese día me quede en tu cuarto.
Me pediste que me quede.
Yo acepte gustoso.
Te espere en tu cama. Saliste del baño.
No podías ser más hermosa.
Mi poco sentido de discreción te hizo sonrojar.
No controle mis impulsos y te bese.
Debía parar.
No lo hice.
Tu tampoco me lo impediste.