El martes Cami no fue a entrenar, ha estado faltando mucho para irse con Carlos, ¿a dónde? no lo sé.
Se ha ido distanciando, he querido evitar la conversación acerca de eso, porque por un lado creo que estoy celosa que ya no pase tiempo conmigo, pero últimamente ha faltado a la escuela, y al entrenamiento.
Me preocupa.
Salí tarde del entrenamiento ya estaba oscureciendo, así que decidí no irme a mi casa caminando, es tarde y tengo tarea que hacer, me senté en la banca a esperar el camión enfrascada en mis pensamientos de tarea y de Cami, no sé si irme directo a casa o llegar a su casa, a lo mejor no está. Envió un wats preguntando. Estoy viendo la pantalla del cel, esperando una respuesta, voltee al frente y ahí esta Tristán, fije la vista en él, mi corazón latiendo rápido, rápido, cuando vi que iba a voltear, baje la mirada. Espere un momento y regrese la mirada para verlo, y él estaba mirándome, y se sonrió, voltee hacia atrás, a los lados antes de devolver la sonrisa, porque no pensé que fuera mi a quien sonreía. ¿Porque me iba a sonreír?
Cruzo la calle y se sentó junto a mí.
Tristán: ¿A dónde vas?
M: A mi casa, ¿tú a la tuya?
T: Si
M: Saliste tarde.
T: Tú también.
Momento en total silencio ¿Desde cuándo se nos hace tan difícil tener una conversación?
Sabia la respuesta, mi cara se puso colorada en ese momento.
Y el entendió.
Estaba muy nerviosa, desde el abrazo ni siquiera teníamos contacto.
T: Normalmente te vas a caminando. ¿Porque hoy no? ¿Te da miedo?
M: Un poco, es un camino largo, con partes poco alumbradas.
-No era totalmente cierto, no es que me de miedo es que tengo hora de llegada, me da pena decirlo. ¡Aunque él ya lo sabia!
T: Si quieres te acompaño
M: ¿Seguro?
T: Si, vamos
Nos levantamos y comenzamos a caminar unos metros, no lo voltee a ver, no le hable ni él a mí, y pensé que nos iríamos de esa forma todo el camino. Seguía nerviosa. Que le podía decir, quería un tema, cualquiera, alguna pregunta, todo lo que se me venía a la mente era preguntar por Roman; normalmente se van juntos, preguntarle por él no era buena idea.
Tanto tiempo esperando que sucediera esto, estar cerca, poder conversar, poder decirle que lo sentía. Caer de rodillas y pedirle perdón. Ok, lo último no.
Él fue el primero en hablar.
T: ¿Porque saliste tan tarde?
M: El entrenador se reúsa a ver su reloj. Y aparte platicamos un poco y nos puso a dar vueltas extra de castigo a todas.
T: Muchas de tus compañeras no deben estar muy felices contigo.
M: ¿Porque deberían de estar infelices conmigo?
T: De seguro fuiste la comenzó la conversación.
-Sonreí, y pensé me conoce.
M: Se les pasara rápido.
Se detuvo de repente y después yo, se giró para quedar frente a mí, se me acerco y me beso.
Comencé a temblar.
T: ¿Porque tiemblas?
M: No lo sé, ¿nervios?
T: ¿Por qué estas nerviosa?
M: Porque pensé que jamás me volverías a besar.
Y me volvió a besar, esta vez fue más largo con necesidad. Di todo lo que sentía en ese beso.
Suspiro y se retiró, me tomo la mano y me la beso, seguimos caminando, mi corazón acelerado, tenía lágrimas en los ojos. Estaba feliz, si era un sueño por favor no me despierten. Comenzamos a platicar como antes, Tonterías. Riendo.
Esta vez me pare yo y lo jale hacia mí. Lo bese, largo. Quería convencerme de que era real. Toco sus brazos, su espalda. Su cara la recorrí con mis manos una y otra vez.
Seguimos caminando deteniéndonos un poco cada tanto para besarnos.
Llegamos a mi casa, y estuvimos platicando afuera, hasta que mi mama se asomó y me dijo que era hora de que me metiera. Mi mamá se metió, él sonrió, se despidió con un beso y se fue.
No hice tarea.
Me acosté sin cenar, no tenía hambre, tenía el estómago revuelto de tantas emociones, sentía alegría, a la vez tristeza, soñé con ese momento por tanto tiempo.
¿Que significaba?, en realidad en ese momento no se me ocurrió preguntar el porque me besaba, hasta ahorita.
¿Se acabó por que bese a Roman? ¿O por su novia?
Preguntas que no le he hecho, ¿y las quiero saber?
¿En realidad quiero saber?
Demasiadas preguntas y si seguimos lo podre preguntar
Mejor aferrarme a ese beso.
Pensar en que pasara mañana, soñar con que todo va a estar bien.
Al día siguiente llegue emocionada a la escuela por fin vi a Cami y le conté todo a ella y a Rosa. Cami puso los ojos en blanco y Rosa abrió los ojos emocionada conmigo.
C: Sabes que no se resuelve todo de un día a otro.
M: Lo sé.
Sé que Cami quiso ser objetiva, pero a veces un poco de apoyo no me viene mal. Mi humor cambio radicalmente y no tuve ánimos de abordar el tema de su ausencia. El tema cambio. A cosas sin interés.