Después de la reunión importante con Lady Sunset mi abuelo me permite salir a descansar y hablar con mis amigos, lo que no he hecho en todo el día, y dijo que las horas de trabajo en el sector rojo ya acabaron puedo ir a hablar con Rick y ver que ha hecho y como viven o trabajan los del sector rojo, lo hago porque me da mucha curiosidad y analizar si son explotadas por la clase alta o simplemente tuvieron la mala fortuna de tener una baja clasificación y compartir una habitación con muchas personas por sobrepoblación o algo así, pero estoy muy seguro que la primera opción es la correcta y es peor de lo que me imagino. Trevor se ve obligado a acompañarme porque mi abuelo piensa que me van a matar o algo por rumores sobre el sector rojo que están planeando una venganza por la explotación que hay y que mi padre no menciona, o por lo menos eso no ha dicho en los pocos minutos en los que estuvo presente. Vamos a un parque cerca del edificio principal, que mi abuelo dijo que se llamaba “Edificio de Gobierno y Justicia”, pero le dicen el edificio de gobierno para abreviar. Llegamos al parque “Supernova” que se llama así por una escultura enorme de una supernova, creo que no se les ocurrió algo más creativo y les gustó mucho el nombre de “supernova”. Todos mis amigos están ahí, incluso Teresa está ahí con ropa naranja, todos están hablando y jugando con los tableros de ajedrez y estructuras para jugar que hay en el parque, pero Rick es el único que está trabajando sin parar, está cortando los arbustos y tiene un enorme bolso lleno de muchas herramientas de jardinería, está sudando y su ropa está manchada de tierra y otros fluidos que ni quiero adivinar.
— ¡Rick! No te he visto en todo el día y creo que tengo mucho que contar, iniciando con el hecho de que voy a ser el…sucesor de mi padre el gobernante.
— ¡Eso es…genial! Pero no creo que tu padre lo haga sin razón, en el sector rojo todos hablan sobre el tirano que es.
— Eso es lo más coherente que he escuchado —dice Flinn sin importarle que hay guardias, soldados o lo que sean cerca de nosotros, vigilando los alrededores del parque—. Sabía que el padre de Axel es un psicópata que podría llegar a matar, ¡está comprobado científicamente! Tal vez no haya matado a alguien que nosotros sepamos, pero podría hacerlo en un ataque de ira.
— No lo creo —contradigo la opinión de Flinn porque mi padre casi siempre tenía ataques de ira y no mataba a nadie, o por lo menos que yo recuerde, si fuera un psicópata ya me hubiera matado—. No es un psicópata, solo es una persona muy, muy, muy mala que odia a los que no puede controlar.
— Tú padre siempre hace expresiones faciales muy extrañas —parece que Flinn también notó la mirada extraña de mi padre hacia mí y que si daba miedo—. Cuando lo conocimos para asignarnos un puesto nos miraba como si fuera a matarnos, se nota que podría matar a alguien.
— Deberíamos hablarle a John, no puede ir de viaje por sus exámenes médicos y tenemos que contarle todas las locuras que hay en este lugar —les propongo recordando que John está en sus exámenes médicos y con la mitad de sus amigos en otro país. Saco mi celular que Lady Sunset hizo que funcionará otra vez sin que yo lo supiera, y hago una video-llamada con John para contarle todo y darle la enorme noticia acerca de Hannah, él contesta tras unos cuantos segundos y veo que está saliendo de uno de sus exámenes. Él me saluda y yo muevo mi celular para que vea el parque en donde estamos—. John, oficialmente estamos en la Ciudad Purificadora y tenemos mucho que contarte.
— Eso es genial, acabo de salir de mi examen médico y oficialmente estoy libre de cualquier virus o sustancia de RedCell, este ha sido un bien día para todos— John está muy feliz porque ahora ya no está bajo la influencia de RedCell, definitivamente no está en mi lista de sospechosos, eso ya lo sabía y solo necesitaba esa respuesta para descartarlo—. ¿Qué han hecho? Necesito cada detalle, sobre todo porque están vestidos de colores como si fuera una película de ciencia ficción.
— En primer lugar, tengo que darte una buena noticia— le digo haciéndole un gesto a Hannah para que se acerque y que John la vea, espero que no se desmaye como yo lo hice—. ¡Hannah está aquí conmigo! Está muy bien.
Por lo menos no se desmayó, suelta un grito de emoción que confunde a los que están alrededor de él y lo miran como si estuviera demente, cosa que sí piensan algunos porque antes de lo que pasó en el laberinto todos pensaban que era alguien que fue corrompido y se volvió loco, pero ahora ya lo ven como el amigo que fue controlado a la fuerza contra su mejor amigo y pudo recuperar su cordura, aunque nunca se volvió loco, sin embargo, no todos están convencidos con esa historia y hay personas en la resistencia que lo evitan descaradamente. Nos pide cinco minutos y corre hacia su habitación, que trató de recrear como él puede recordarlo de su memora que todavía no se restaura totalmente, aunque ya no tiene amnesia y el suero no lo afectó en nada todavía tiene mucho que recordar y hay ciertas partes de su vida que no recuerda bien o simplemente no recuerda en lo absoluto. Su habitación es casi parecida si no fuera porque arriba de su cama hay una repisa con su colección de muñecos heroicos, que son unos muñecos con una cabeza enorme y con pelucas para cada personaje y la repisa original estaba muy bien atornillada a la pared porque John le tiene miedo a que le caiga la repisa y sus propios objetos y lo maten por un golpe en la cabeza, ese ha sido de los pocos miedos que tiene.
— Hannah, perdón por matarte…bueno, no eras tú porque era una clon tuya y tú estabas atrapada…perdón por recordarte eso, yo…— ya está nervioso y no sabe que contestar, pero no creo que sea necesario porque esto ya ha sido solucionado de una manera rara.