capitulo 9

Bianca

Abro los ojos escuchando el sonido del celular de Basil. Aún no se ha despertado. Cojo el teléfono y contesto.

Naoh

Basil, vamos camino a tu casa. ¿Recuerdas a mi hija perdida?

¿Naoh tiene una hija perdida? ¿La encontré?

Rápidamente empiezo a pasear a Basil por todos lados para despertarlo. No interactúa. Ella empieza a darle besos por toda la cara, hasta que abre la puerta del cuarto de Simon y puedo ver que le da vergüenza sonreír.

Me toma de la cintura y me acerca a él.

—Quiero despertar a tu hijo así todos los días— Simone dice su nombre muchas veces y lo interrumpe depositando un pequeño beso en mis labios.

—Te escribió, Naoh dijo algo sobre una hija perdida y la que encontró— Al decir esto, incluso fue al baño y se vistió— Dijo que venía.

Simone y Basil

Naoh siempre buscó a su hija. Porque la madre de su hija se separó de él cuando tenía ocho años.

Por lo que nos han contado, Naoh es el padre biológico de nuestra hija. Bianca no sabía mucho al respecto, solo tenía pequeñas pistas, hasta que hace tres meses me contó que había logrado encontrar otra gran pista.

Suena el timbre. Bajamos todos a la cocina, preparo un gran desayuno y luego Bianca se dirige a la puerta.

La abro y veo a Naoh. Respira muy agitado y muy agitado y tiene la única identidad real.

"La encontré", es lo único que logra decir. "La encontré, ella es..."

Simone y Basil

Invita a Noah a pasar. Entra y se acomoda en el sillón, un poco nervioso.

—Naoh, dime—dijo recostándose en el sofá frente a la familia desconocida con Sofía Mendoza—Dime de una vez por todas. ¿Encontraste a tu hija? Él levanta la cabeza y yo asiento.

—Mmm...—dice—Esto no va a ser fácil de decir, solo prométeme que no dirás nada hasta que ella me lo asegure—asiento y él continúa—ella es Bianca, mi hija es Blanca. El día que se va porque se fueron a casa, no lo puedo negar, es muy hermosa. Pero me sentí extraña estando con ella, como si la conociera de antes, cuando en el orfanato la mamá de mi hija se enojó conmigo y se fue, pude ver cuando se levantó un poco la camisa y mi hija tenía la misma marca de nacimiento que tu hija...

No entiendo, lo podía creer. ¿Bianca es hija de Noah? Bianca sabrá que tiene una hermana de su padre biológico. ¿Su madre biológica sabrá quién la adoptó? Definitivamente tendría que saberlo con todos ellos.

—Rebecca, necesito un favor. Necesito que llames a Víctor ahora mismo. Ahora necesito que venga, pero Bianca no puede saberlo—dijo Naoh. Definitivamente llamaría al abuelo de Bianca, pero él tendría que sacar a Bianca de aquí primero.

"Voy a llamar a tu bisabuelo Víctor para que venga a buscar a Bianca, ¿de acuerdo?" dijo Naoh, yo solo asentí.

Mientras Naoh llama a Víctor Fernández yo llamo a Don Víctor, el bisabuelo de Bianca. Él dijo que estaría ahí enseguida.

Después de dos horas y media, la puerta se abrió y vi a Víctor entrar y volver a cerrarla.

Víctor se acercó a nosotros y se bebió el agua seca cuando vio a Naoh.

"No lo puedes creer... ¡Naoh!" —dije, dejando caer las pastillas al suelo y caminando lentamente para abrazar a Naoh— Mi hijo, ¿cómo estás? ¿Qué haces aquí? —dice Don Víctor, secándome las lágrimas.

—Padre Víctor... —Naoh la abraza de nuevo—Siempre te busqué... Te extraño tanto... —Dice Naoh

—Eh... Mi hijo se dio de baja del ejército, tu hermana Rebeca también te extraña tanto—Dice Víctor—¿Qué haces aquí? ¿Cómo sabe uno del otro? —Nos señala a los dos.

—Somos hermanos adoptados desde hace ocho años—Dijo Rebeca—Víctor, necesitamos hablar los cuatro, ¿no crees?

—Oh, claro. —Dice y se sienta en el sofá frente a la familia. —¿Qué es exactamente lo que quieres saber?

—Cuéntanos todo, desde el principio—Dijo.

—Bueno, cuando éramos jóvenes, Noé y Manuela se conocieron en la universidad de criminología y derecho penal. Pararon por un año y nos hicimos novios y luego nos casamos. A los veinticuatro me embaracé de ti, Nicole. Vivíamos los tres en la casa. Después de que me embaracé de nuevo de Bianca, ella me pidió que interviniera durante el embarazo, no, yo quería tenerla, nunca me dijo la verdadera razón por la que no quería porque Bianca tiene una discapacidad Nzca. Luego me dijo que te llevaría con ella si no nacía y yo me quedaría con Nicole... Si no lo convertía en un orfanato... la misma mujer se encargaría de que Bianca no naciera. Así fue hasta ahora, cuando veo que se reencontraron — dice Víctor suspirando. — Bianca no lo sabe, a menos que tú se lo digas.

Víctor no pudo terminar de hablar, Simone lo interrumpió.

— ¡¿Eso?! — Rebeca se dio la vuelta y pudo ver a Bianca, sus lágrimas no paraban de caer — Mamá, ¿por qué si me contaste de la adopción? ¡No me dijiste que tenía un padre biológico y una hermana biológica! No lo puedo creer... — Bianca subió a la habitación llorando. Me levantó para ir a verlos.

- Basil, ¿debo ir? - dice Noé poniéndose de pie. Asiento y vuelvo a sentarme

Bianca

No lo puedo creer... Mis padres me mintieron toda la vida. Ella no me dijo que tenía un padre biológico y una hermana.

¿Cuántas veces tuvo la oportunidad de contarme conversaciones familiares?

¿Cuántas veces necesité a alguien, cuando ella no estaba?

Escuché el ruido de la puerta. Alguien estaba tocando

-¿Salir? No quiero hablar con nadie -grité desde mi casa. Los golpes en la puerta cesaron

-Bianca, soy yo -soy Noah- ¡podemos hablar hija! -Me levanté y fui a abrir. Él entró y se sentó en mi cama.

Me senté a su lado, me abrazó e inmediatamente sentí que mis lágrimas caían de nuevo.

—No llores, mi linda hija, no me gusta verte llorar—dice, acariciando mi cabello.

—El día que llegaste a mi casa me resultaste muy familiar, y cuando te enojaste con Simone, te levantaste muy rápido y pude ver tu marca de nacimiento en el costado de tu brazo, identifica la mía. No estaba tan segura, hasta que hoy Binna me lo confirmó—dejé escapar un suspiro y continué—Hija, estoy tan feliz de encontrarte, te busqué a ti y a mi hermana por mucho tiempo y no pienso perderte de nuevo—dijo abrazándome aún más fuerte.