La Cueva

6:40 p.m.

Estábamos tranquilos, relajados, el hecho de tener una esperanza nos había reanimado a todos, habíamos estado viendo las fotografías que Mayra había tomado, las había descargado a la laptop y las guardo en un disquete, al cual le pego una calcomanía donde había escrito, " La Minita de oro", después de reposar la comida entramos al agua, pasamos todos y cada uno de los puntos ya conocidos, pero esta vez hubo algo raro, ya no emanaban burbujas de aquel hueco en el piso del túnel.

- Oye, donde están las burbujas? –replico Mayra-

- Supongo que la nueva cavidad en el cenote termino de llenarse de agua.- le contesto Pedro-

- No, la verdad no creo que sea una nueva cavidad, mas bien creó que este es el lugar por el que se alimenta el cenote, es por aquí por donde entra el agua del mar o alguna laguna cerca de aquí, así es como se forman los cenotes.-conteste-

- Ok, pero y las burbujas?

- No lo se, tal vez, simplemente fue aire comprimido que descargo aquí.

Preferimos ignorar aquel suceso, si le dábamos importancia perderíamos mucho tiempo y necesitábamos llegar al final y saber si era una salida, llevábamos un mazo que Pedro siempre llevaba consigo, y yo traía un desarmador de punta plana que habíamos utilizado para instalar el equipo de video.

Al llegar al gran salón, nos despedimos de Miguel y Marco, prometiendo regresar con ayuda en caso de encontrar la salida, Miguel y Marco se escuchaban tranquilos y la verdad nos fuimos sin preocupación alguna.

A partir de este punto, todo seria nuevo para Diana y para mi, no habíamos visto mas allá del salón, así que íbamos con cuidado y además estudiando el lugar.

El túnel era mucho mas estrecho, íbamos intercalados, a la cabeza Pedro y detrás Mayra, después Diana y al ultimo yo, Pedro se detuvo bruscamente.

- Vieron eso?

- Que? –Contestamos todos-

- Eso!, miren, parece.....una lagartija.....pero.....bajo del agua?.

Todos quedamos sorprendidos, era una especie de salamandra, estaba para justo delante de nosotros, caminaba sobre el piso del túnel como si no hubiera agua, aunque no le veía muy bien la cabeza se notaba claramente que tenia cuernos en el hocico como un rinoceronte, su cola era muy larga y sus patas eran cortas, el color de esta ahora era negro con manchas verdes, pero cuando la había visto Pedro juraría haberla visto roja con manchas azules.

Mayra ahora traía el flash en la cámara, como ya sabia que aquí estaba demasiado oscuro decidió ir por el flash para tener mejor iluminación, al tomarle una foto a aquel espécimen, simplemente desapareció, el tiempo lo teníamos encima, avanzamos hasta que nos topamos de nuevo con el pez extraño y de colores, tratábamos de evitarlo pero el seguía interponiéndose en nuestro camino, Mayra soltó el flash y así fue como dedujimos que estas especies eran sensibles a la luz intensa, y o es que empleara tanta lógica, en realidad era de suponerse ya que ellos están constantemente en las penumbras.

Las estalactitas y estalagmitas hacían de nuevo acto de presencia, reducían el espacio en el que íbamos avanzando, de repente algo llamo mi atención, en las paredes que había entre las estalactitas y estalagmitas, había incrustaciones de conchas, me recordaban mucho al recorrido que hicimos hacia ya varios años en Villa de García, allá en Nuevo León, habíamos ido de visita, aunque como dicen que allá no hay mucho que ver, trajimos buenos documentales de El Chipinque, Las grutas de García y alguno que otro lugar, Las grutas eran muy parecidas a lo que estábamos viendo en este cenote, las piedras, los caminos, Las estalagmitas y estalacnitas, y ahora hasta las conchas incrustadas.

El tiempo pasaba y nosotros seguíamos avanzando, faltaba tal vez muy poco para que dieran las nueve de la noche, seria un poco mas difícil encontrar la salida anhelada, así que cuando llegamos.

- Pues bien, aquí estamos

La frustración de nuevo llego a nuestras caras, y es que la gran luz solo había resultado ser un tragaluz gigantesco en la cueva y que estaba muy en alto como para salir por el, no había alternativa, teníamos que regresar y pronto antes de que el gas de los tanques se terminara, emprendimos e nuevo el viaje, casi sin ninguna novedad, habíamos visto de nuevo las misma especies, llegamos hasta ver lo que creíamos que eran medusa o agua malas, y habían resultado ser una especie de pulpo transparente, solo que este nos tenia miedo, entre mas nos acercábamos mas se alejaba de nosotros, llegando al salón un golpe fuerte se escucho, retumbo el lugar en donde estábamos, nos asustamos, pero luego todo volvió a su cause.

- Base, aquí Andrés...........respondan, cambio.

- .........

- base, cambio!?

- ........

- algo esta mal, escucho pura interferencia. ¿Y tu que tal Pedro?.

- Igual Andrés.

- Diana, Mayra?

- Igual o peor.

- Yo también.

Al no recibir respuesta de Marco y de Miguel, nos apanicamos, emergimos rápidamente, al llegar la sorpresa seria mucho mas grande, Miguel y Marco no estaban, no había rastros, a excepción del reloj de pulso de Miguel, Los aparatos estaban ahí, pero se encontraban apagados, buscamos en todos lados, no los encontramos.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.