Mire a Maxwell, está sentado en la entrada del castillo y no me ha dicho nada desde que se levantó. Paso días inconsciente, lo cure con lo que tenía y buscando ciertas plantas pero no pude hacer mucho.
Durante ese periodo balbucea cosas sin sentido y cuando lograba despertar no duraba mucho antes de que volviera a caer inconsciente. Por fin hoy despertó pero no fue como lo esperé, me vio y sin más se levantó con cuidado para ir a sentarse a la entrada del castillo, lleva ahí sentado casi 3 horas sin decir nada y sin moverse, me han dado ganas de ir a preguntarle cómo se siente o simplemente preguntarle que tiene sin embargo me he detenido para darle un poco de espacio.
Suspire y camine hacia la cocina con la intención de preparar algo de comer para los dos, porque yo debo dejar de comer solo frutas y plantas y él debe comer algo más elaborado para recuperarse. No se inmuta al oír mis pasos alejarse de hecho hasta parece aliviado, entre en la cocina hace mucho que limpie todo y fui acomodando ciertas cosas ya tengo un poco de leña para cocinar algo.
En la mañana, muy temprano, salí a cazar cualquier cosa que pudiera encontrar; me tope con una ardilla que es de piel un poco dura pero es conveniente porque saldrá un caldo bueno para Max. Limpie a la ardilla tratando de entender lo que le sucede a Max, no se porqué está así, entiendo que está afectado por lo que paso con Erick y tiene sentido, es su abuelo. Creo que le dolió más que lo hubiera golpeado y lo considerara traidor por mi. Tal vez se arrepiente de haber ido a buscarme y no lo culpo, perdió su título, su protección todo por mi y en muy poco tiempo.
Puse agua para calentarla y poner la carne de ardilla, corte algunas verduras lentamente ya cuando termine de cortar el agua está hirviendo así que primero metí la carne y después de un rato incluyó las verduras picadas. Me dedique a mover el contenido con una cuchara de madera, son movimientos ligeros y sin fuerza para evitar que se caiga el agua fuera de la olla; cuando está listo lo sirvo en dos platos. Saqué dos cucharas de un cajón y salí de la cocina directo hacia la entrada del castillo para sentarme al lado de Max.
Él me mira de reojo, le tiendo el plato. Lo toma con lentitud para luego comenzar a comer en silencio, solté un suspiro de alivio, mínimo aceptó la comida y aunque no me haya dicho nada es un avance que tomara el plato y esté comiendo. Comí sin mirar a Max y sin hacer ruido, si él quiere hablar hablará cuando esté listo, si lo fuerzo se enojara conmigo o más de lo que ya está.
—¿Cómo has superado el trauma de ver todo esto? —me pregunta señalando las casas en ruinas y cosas tiradas por las calles.
Me sorprende su pregunta pero no lo mire.
—Ha sido difícil, los primeros días recorrí todo buscando cosas que fueran de todas esas personas que conocí. Encontré muchas y me sentí demasiado mal porque no estuve para ayudarlos, no estuve para pelear por ellos —solté otro suspiro— Con el pasar de los días fui dejando esos pensamientos aunque no deje de sentir la tristeza; limpie todo lo que he podido y juré hacer más.
—¿Más? ¿A qué te refieres?
Lo mire— Hace unos días que vi a Ezra Unterwood en persona y desde ahí lo he estado espiando.
Por fin me mira.
—Marenna ¿sabes lo peligroso que es?
—Si, lo se pero fue un accidente y cuando supe que era él no quería desaprovechar esa oportunidad.
Él suspira— lo entiendo ¿vas a hacer algo?
Asentí repetidamente.
—¿Qué planeas?
—Saber que paso con mis padres y matarlo.
—Pero ya sabes que paso con ellos —dijo dejando el plato al lado de él.
—No creo lo que me dijiste o lo que me dijo Erick así que haré que me diga si sabe algo —le respondí.
Él asiente y se vuelve a quedar en silencio hasta que dice:
—Es doloroso
—¿Qué cosa?
—Que sea mi abuelo y haya hecho cosas tan horribles solo por su orgullo —dice jugando con sus manos.
—El orgullo puede ser peligroso —comenté terminando mi plato de comida.
—Antes de golpearme me dijo que si lograba atraparte volvería a recuperar mi título pero que si no, me fuera olvidando de mi hogar.
Puse una mano en su hombro— lo siento.
—No es tu culpa, solo es él y su obsesión.
Asentí— Se que puede ser difícil pero si gustas quedarte hay mucho espacio para alguien más.
Él sonríe— creo que me gusta esa idea de tenerte como compañía.
—No olvides a Orion —señalé al cabello detrás de nosotros.
Se ríe levemente— cierto Orion también está incluido.
Me levanté y tomé los platos para ir a dejarlos en la cocina. Cuando regresé al vestíbulo me sorprendo de ver a Max sentado esperándome, ahora que está despierto me da miedo que recuerde a los soldados que yo mate, tal vez cuando lo recuerde me diga asesina y se aleje de mi o me entregue a su abuelo para recuperar su título de príncipe. Alza la mirada y me hace una leve mueca que semeja una sonrisa.
—Me quiero quedar y ayudarte si no te molesta.
Le sonreí feliz— Bienvenido Max.
—Yo empecé a dormir aquí porque no quería llamar mucho la atención encendiendo las luces, sé que están los reinos lejos pero luego hay gente merodeando así que preferí no alarmar a nadie, si deseas podemos acondicionar un par de habitaciones aquí en la planta baja o en el primer piso.
Niega— así está bien, dormiré aquí contigo.
—De acuerdo, casi siempre salgo a los bosques para buscar más frutas, verduras, plantas y apenas algunos animales y como te darás cuenta tendremos que hacer las cosas ambos ya que no hay nadie más.
—No tengo ningún problema —respondió Max.
—Ven te enseñaré el castillo.
—Con gusto princesa Marenna —dijo mientras hacía una reverencia.
No pude evitar reír.
—Gracias príncipe Maxwell.
—Creo que ya no puedo usar ese título.
No supe qué decir así que lo guíe por la planta baja enseñándole todo y así con cada planta.