II
Me recuerdas a la simpleza que creí enterrada
Bajo mi corazón, mi deseo y mi perder;
Y reflexioné cuanto me faltaba tu poder.
Entonces dalia mía,
¿Qué es lo que siento?
No ocultas nada, pero hay algo más, una verdad,
Quizás una verdad que no merezca,
Porque solo te soy un extraño de piso inferior.
Pero al menos soy afortunado por encontrar una rara belleza
Tus brillos son de esos que queman,
Pero con la frialdad de una estrella moribunda,
Y bailas con el viento,
Con experiencia de eras.
Bailas como si supieras la cadencia de cada animal.
Luego das vida a lo mundano;
Me acompañas cuando salgo a respirar,
Como un ángel que está para desinflar peso.
Entonces dalia mía, ¿sientes lo que siento?